Capítulo 3
"Visit"
Cuando Ameliia terminó su bebida caliente, recordó haberle dicho a su amigo que visitaría a su madre, tomó la tasa vacía en su mano izquierda mientras que en la otra sostenía su libro. Dejó la tasa en la barra y agradeció a la señora para después pagarle lo debido, por última vez la señora le dio una enorme sonrisa mientras aceptaba el dinero.
-Qué tenga un lindo día-habló Ameliia con amabilidad.
-Igualmente señorita-esta vez la chica fue la que sonrió antes de retirarse del lugar.
Fue a la dirección contraria en la que había llegado, caminaba con los brazos cruzados aprisionado el libro entre estos, se continuaba preguntando sobre quien era aquel hombre misterioso cuando aquellos pensamientos se vieron interrumpidos por chocar con alguien.
En un reflejo, Ameliia coloco sus manos en el pecho de aquella persona para disminuir el impacto y como consecuencia su libro cayó al suelo.
-Lo siento-se disculpó con torpeza-Estaba distraída.
Retiró sus brazos y dio unos pasos hacia atrás para poder recoger su libro pero aquel hombre se le adelantó y lo extendió hacia ella, no parecía estar enojado por su torpeza sino tenía una expresión serena.
-No hay problema-dijó comprensible- solo más cuidado, podría ocurrir un accidente.
El hombre vestía formal, había algo en él que hacía que de alguna manera se viera más elegante que los demás, las mejillas de Ameliia se encendieron cuando vio el hombre había notado la mirada fija en su persona.
-Aprovechando este pequeño inconveniente-decidió hablar-me presento, mi nombre es Elijah Mikaelson.
Alzó su brazo derecho y Ameliia la tomó con notable nerviosismo, Elijah se dedicó a depositar un beso en su mano, el tono de las mejillas de la chica aumentó ante tal acción.
-Ameliia Croackshaw-le dio su nombre-la persona que lo siente.
-Como lo dije antes no hay problema-pausó-Ameliia, esta ciudad es pequeña, espero volvernos a ver.
No pudo evitar sonreír de nuevo.
-Si, yo igual-respondió en tono bajo.
-Mucho gusto, Amelia-Elijah dijo por último antes de retirarse.
-Igualmente-suspiró cuando lo perdió de vista , no se dio cuenta que se había quedado parada, observando como Elijah caminaba, nunca lo habia visto por aquel rumbo, talvez no conocía a todas las personas aquí pero si lo hubiera visto antes no lo olvidaria.
El estar distraída no le permitió relacionar el apellido de Elijah con alguien a quien había visto en esa misma mañana.
Cuando se dio cuenta de que había permanecido de pie en el mismo lugar por un tiempo se sintió tonta y sacudió su cabeza intentando echar aquel pensamiento y siguió su camino hacia la casa de los Chadwick.
Al llegar subió las pequeñas escaleras y toco la puerta con su puño, fueron tres golpes secos. Mientras esperaba a que atendieran, observó la puerta de un café oscuro y los pequeños adornos en color oro. Finalmente la puerta se abrió y apareció Stephani, la más pequeña de los Chadwick, hermana de Weasley que a diferencia de él Stephani tenía unos potentes ojos verde claro y unos rizos castaños casi perfectos.
-Hola Stephani-saludo la pelinegra con una sonrisa.
-Hola, Lia- respondió la hermana de Weasley, era la única que la llamaba así en toda ocasión, una que otra vez Weasley también lo hacía.
