Capítulo 13
"Gentle"
-Corrígame si me equivoco, pero para convertirte en vampiro-aquellas palabras aún se sentían extrañas al ser pronunciadas por sus labios-tienes que...
-Tienes que morir con sangre de vampiro en tu sistema y después entrarás en proceso de transición-contestó por la chica, quien se quedó callada en medio de la oración-Para completar dicho proceso debes beber sangre humana, de lo contrario morirás.
-Ustedes no envejecen, ¿son inmortales o sólo viven por mucho tiempo?
-¿Por qué la pregunta?-Ameliia lo miró extrañada y después comprendió-Oh, no me malinterprete, Elijah. Sólo intento satisfacer mi curiosidad.
Dicho esto el original soltó una ligera carcajada.
-Aunque quisieras matarnos no podrías, al menos no a mi ni a mis hermanos. No somos como los vampiros ordinarios, una estaca de madera en el corazón es mortal para ellos- ella lo miró confundida- La única manera de matar a un Original es una estaca de roble blanco. Pero mi familia y yo nos encargamos de destruir hasta el último pedazo de ésta.
-¿Podría una bruja convertirse en vampiro?-preguntó con cierto temor.
-Podría-un nudo se formó en el estómago de Ameliia y pasó saliva-Pero su vínculo con la magia se rompería al morir. No se puede ser dos cosas a la vez.
Esperaba que la respuesta de Elijah fuera negativa pero más que nada esperaba que aquello nunca llegara a pasarle, sólo de pensar en eso, sentía escalofríos recorrerle todo el cuerpo.
-Creo que ya hablamos lo suficiente de mí y de mi familia, ahora es tu turno, cuentame de ti- a ella le sorprendieron las palabras de ella, aún no se sentía en confianza para hablar sobre su vida, pero de todos los originales, Elijah era quien le inspiraba más comodidad para hacerlo. Aunque suponía que Elijah sólo preguntaba por compromiso.
-No hay mucho que decir sobre mí, Elijah-se encogió de hombros-Mi madre falleció hace unos años y su hermana se hizo cargo de mi hasta que cumplí la mayoría de edad y fui capaz de cuidarme por mi misma. Después de eso intenté buscar trabajo por un tiempo, pero ya sabe lo difícil que es encontrar trabajo para una mujer. Un día conocí a Clarissa, la hija del dueño, ella me ayudó a conseguir un trabajo aquí como mesera.
-Siento mucho lo de tu madre.
No supo como contestar a aquello, así que evadió el tema.
-Tal vez sería hora de regresar, tal vez Niklaus ya ha regresado-Elijah, quien notó la incomodidad de Ameliia se limitó a asentir.
-Claro, vamos-ambos se levantaron al mismo tiempo y se dirigieron hacia la salida donde Elijah abrió la puerta, permitiéndole a Ameliia pasar primero.
El camino de regreso fue más silencioso de lo que ella esperaba, la había incomodado tocar el tema de su madre, pero también le incomodaba aquel silencio. Por su parte Elijah decidió respetar su espacio y no continuar la plática.
Antes de llegar, Ameliia recordó la escena que había tomado lugar en la mansión de los Miakelson que había involucrado a Kol y a Elijah. Aminoró la velocidad de sus pasos al intentar retrasar su encuentro con Kol Mikaelson.
Cuando entraron, el cuerpo de Kol ya no estaba tendido en el suelo, por lo que Ameliia entendió que ya había despertado hacia un tiempo.
Miró a su alrededor pensando que lo encontraría en cualquier parte o que sería capaz de aprovecharse de su miedo y asustarla.
Pero nada pasó, ella se adentró en la sala donde el grimorio permanecía sobre la mesa, ahora cerrado.
-Sólo un último hechizo- dijo Elijah y ella lo miró por unos segundos antes de asentir.
