Capítulo 46

9K 343 26
                                    

Desperté por la lejana voz de Lily quien supuse, obviamente me estaba hablando.

—Traje el desayuno.—Dijo sentándose al lado mío.

Me incorporé de a poco en la cama y me senté con cuidado, sin botar la bandeja llena de comida.

—No tengo hambre..—dije con un gallito.

—Preparé jugo de naranja natural.—intentó sobornarme.

—No quiero.

—Debes estar mal de la cabeza. Tu jamás niegas el jugo de naranja y menos el natural. Pero que va, lo tomarás igual.—Dijo llevándose una tostada a la boca.

Comí amenazada. Lily me dijo que si no comía, llamaría a mi abuela, que cabe decir que hace muchos años que no la veía. La llamaría y le diría que yo tenía serios problemas alimenticios.

Las dos sabíamos que mi abuela no dudaría ni un segundo en venir a cuidarme aquí.

Mis intenciones eran quedarme en cama todo el día sin hacer nada, pero Lily me lo negó rotundamente.

Me hizo arreglarme, y ponerme 'linda'

No me dijo a dónde íbamos hasta que llegamos al esplendoroso lugar; el centro comercial.

—¿Para qué estamos aquí?

—Para comprarte ropa, hacerte un nuevo look y comprar libros.

—¿Libros?—Pregunté asombrada. A Lily no le gustaba comprar libros, pero sí leerlos.

—Sí. A ti te encanta comprar libros.

—Pero tu odias la librería.—Me ignoró por completo y salió del auto.

Hice lo mismo y caminé tras ella. Nos introdujimos rápidamente en el centro comercial.

Con cada minuto que pasaba, más me iba dando cuenta de las cosas y llegué a la conclusión de que hoy era lunes.

—¿Hoy no entraba yo a trabajar?

—Nos dieron el día libre.—Dijo sin prestar mucha atención.

—¿En serio?

—Se lo pedí a Travis. No se negó.—Dijo buscando alguna prenda entre los colgadores.

Me alejé de ella y me senté en una banca que estaba fuera de la tienda.

Esperé unos minutos a Lily ahí, sin hacer nada. Miraba a un punto fijo, como se me estaba haciendo costumbre.

Pensé en cómo podría haber evitado que sucediera.. pero-

—Bueno, nuestras compras han finalizado. Iremos a por libros, comida rápida y Starbucks.

Me levanté y caminé tras Lily. Sentía mi cuerpo terriblemente pesado.

Iba a pasos de tortugas, pero sabía que sólo tenía que seguir a la linda cabellera rubia con un moño muy alto para encontrar a mi amiga.

Llegamos a una gran librería.

Mi favorita, pero justamente este día no tenía ganas de comprar nada.

—¿Cómo se llamaba el libro que querías?—Me preguntó Lily.

—No sé..

—Pues así no sirve.—Dicho esto fue hacia el otro lado de la librería, dejándome sola entremedio.

—¿Puedo ayudarla en algo?—Preguntó con una sexy sonrisa un joven bastante guapo.

—Sí. ¿Tiene un asiento?—Era completamente consiente de que mi aspecto daba asco, pero qué más daba. Yo sólo quería un asiento.

Mi Belieber Favorita  TerminadaWhere stories live. Discover now