Somos Tú Y Yo

Capítulo XII - Mi sol

8:35 AM. Jihyo aún no ha llegado.

Ya ni recuerdo en qué momento pude conciliar el sueño en la densa madrugada de hoy, ni tampoco recuerdo en qué momento del día se asomó el amanecer. Solo recuerdo que me encontraba contemplando fijamente la ventana, y las luces que se confundían entre los reflejos de los autos al pasar y el de las estrellas allá arriba se posaban confundidas en mi camilla, como una suerte de conspiración hacia mí, como susurrando que muy pronto llegará la luz del sol dispuesta a dar inicio a un día el cual esperaste mucho, y que disfrutarás no importa qué. Pero... da la casualidad de que... sigo esperando a que este sol aparezca. ¡Jihyo! ¡A la cuenta de 5 quiero que aparezcas aquí! ¡Si es que no lo haces, yo...! ¡5... 4... 3... 3 ½... 2... 2...! ¡Ahhh! ¿Por qué todo ahora me resulta tan...? Tan... aburrido. ¡Si estuviese aquí ya me hubiese referido a esos grandísimos ojos que tiene, le hubiese exigido mi desayuno, un vaso inmenso con jugo de naranja, y una que otra petición... pero... a quién engaño... 8: 45 AM. Jihyo aún no ha...

— ¿Nayeon? ¡Ya despertaste!

—¡Oh! B-Buenos días, señor Kim.

—Buenos días. Pasé hace unos momentos por aquí, pero daba la impresión de que aún no era el momento de acompañarte. ¿Todo está en orden?

—No, solo que... ¡Q-Quiero decir... sí! ¡Sí, todo está en orden!

—Entiendo. Mmm... es cierto, Jihyo aún no ha llegado.

—¿Eh? ¡¿Qué planea, señor Kim?! ¿Acaso desea que le cuente... algo sobre ella? S-Sí, así parece. ¿Sabe usted qué pudo haber pasado con ella?

—Bueno, Nayeon, tengo entendido que ella va a la escuela, así que debe de estar ahí.

—¡Cierto! ¡Qué tonta he sido! Ella también tiene que ir a la escuela, pero... ¿por qué hay días en los cuáles ella llega más temprano aquí? Sí, quizás sea lo más probable. ¿En qué escuela ella estudia, señor Kim? ¿Lo sabe?

—Veo con mucho gusto que te interesa mucho Jihyo, Nayeon.

—¡N-No es eso! Solo... que... de pronto se me vino a la mente esta pregunta, solo eso...

—Lo sé, lo sé. Pues verás, Jihyo estudia en la escuela media de Seúl. El lugar no se encuentra muy lejos de su casa, sin embargo a ella le resulta un poco complicado llegar desde aquí por la inmensa distancia que existe. Por eso...

—¿La escuela media de Seúl? Pero si... y-yo... ¡yo estudio ahí! Y... señor Kim, dígame... ¿desde cuándo ella estudia en dicha escuela?

—Lamento que eso no lo sepa con exactitud, Nayeon, pero lo que sí estoy seguro es que ella no tuvo interrupción en sus ciclos escolares, ya que actualmente cursa el 3er año, y ella hace dos años llegó al albergue.

—Esperen, eso quiere decir que... e-ella... ¡¿Ella está en el mismo año escolar que yo?! E-Eso no es posible, señor Kim.

—¿Por qué lo dices, Nayeon?

—¡Rayos! ¡Lo dije en voz alta! Es que yo... yo... veo muy joven a Jihyo, y podría jurar que ella estaba cursando el 1er o 2do año.

—Es que ella es muy inteligente y dedicada en los estudios.

—¡Oh! Así que Jihyo es una genio. Me gustaría comprobarlo... ¡si tan solo estuviese aquí! ¿En serio, señor Kim? ¿Y cómo puede estar seguro de ello?

—La misma escuela sabe que ella hace muchas labores sociales en la ciudad, y también saben sobre el albergue y el valioso período que ella le ofrece, así que le dan la oportunidad de que presente sus tareas a corto tiempo y que...