EL HUBIERA SÍ EXISTE (CAMREN)

CAPÍTULO ONCE

CAPÍTULO ONCE

-¿Te das cuenta de que estás poniendo en práctica la filosofía de Oscar Wilde...?- La Doctora Gruber concluyó tras recapitular mentalmente todo lo que su nueva paciente acababa de contarle -Escapando de la tentación, pero haciéndolo muy despacio para que ésta pueda alcanzarte en cualquier momento-

-Y eso está muy mal...¿Cierto?- Lauren preguntó temerosa.

-No existen actos buenos o malos, Lauren...Es nuestra forma de pensar la que se encarga de asignarles un juicio de valor a las cosas- Respondió con total tranquilidad.

-¿Y matar a alguien?- De pronto se mostró muy interesada por la filosofía tan abierta de su Psiquiatra.

-Cualquier acto que atente contra la integridad física, psicológica y la propia dignidad o de terceros debe ser notificado ante las autoridades correspondientes-

-¿Por ejemplo...?-

-Si me contarás qué estás cometiendo alguna clase de abuso sexual mi obligación sería dar parte a la policía-

-Y si la víctima soy yo pero no quiero denunciar...Digo eso siempre sucede, las personas se callan por vergüenza-

-Si es algo que forma parte de tu pasado no puedo obligarte a denunciar porque eres un adulto, pero si es algo que estás sufriendo en tu presente, intentaría contactar con algún miembro de tu familia para ponerles en alerta-

-¿Lo que yo estoy haciendo con Camila...? Eso de ocultarle la verdad...¿Tú podrías buscarla para contarle?-

-No, eso es algo personal entre dos adultos, únicamente les concierne a ustedes dos-

-¿Es algo muy malo lo que estoy haciendo? Me refiero en tu manera de ver las cosas-

-Es algo que no puedo responderte, sería interferir en tu propio criterio, lo que representaría una falta grave para mí ética-

-Pero tú le dirías la verdad ¿Cierto?-

-Ciertamente nunca me han gustado las mentiras, pero entiendo que a veces no quedan muchas salidas, también entiendo que todo esto es algo totalmente nuevo para ti y debes atravesar por un proceso de asimilación y aceptación a tu realidad, solamente entonces podrás tomar una decisión...¿Desde siempre te han gustado las mujeres?- Esa era información de rutina para rellenar la ficha técnica.

-Creo que sí, obviamente anduve con chicos antes de salir del clóset, pero desde siempre recuerdo ponerle más atención a la protagonista femenina de la película que al chico-

-¿Tienes pareja en este momento?-

Lauren agitó la cabeza de forma negativa.
-Nunca he sido de relaciones muy estables, soy más de momentos, si conozco a alguien y me gusta pues...Nos vamos a su apartamento o al mío, sin promesas ni ñoñerías; he tenido dos novias formales, bueno yo les llamo formales porque las lleve a cenar con mis padres, pero realmente no funcionó porque a ellas no les gustaba que yo fuera tan independiente, que viajara sola y todo eso-

-¿Viajas a menudo?-

-A eso me dedico, tengo un canal en YouTube-

-Sólo para confirmar...¿Traveler y soltera?-

La ojiverde asintió -¿Crees que lo mío tenga cura?- Preguntó con impaciencia.

-Tú no estás enferma, Lauren, al menos que unos estudios revelen lo contrario, para mí eres una persona sana, sexualmente atraída hacia una persona que la sociedad desaprobaría pero eso no implica que tengas un trastorno mental, ni que deba encerrarte en un Psiquiátrico-