CAPÍTULO VEINTE

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Camila aparcó en el 1611 NW de la 12th Avenue, justo en la imponente estructura del Jackson Memorial Hospital, una entidad no lucrativa pero que contaba con uno de los mejores centros de Trauma de la región.

Subió unas cuantas escaleras hasta llegar al Mezzanine y se dirigió rumbo a los ascensores.

-Lauren- La llamó sorprendida al observarla apretando el botón del elevador.

-Camila- Casi le da un infarto de la impresión. Había manejado peor que Cruela de Vil persiguiendo a los 101 dálmatas solamente para adelantársele a su hermana y ser la primera en hablar con Karlie. -¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar en la clínica?- Preguntó quedando como idiota pero ahora mismo le daba igual quedar como quedara, su reloj marcaban menos de Las cinco y media de la tarde y Camila terminaba su última consulta a las seis...¿Cómo era posible que hubiesen llegado a la par?.

-Cancelé mi última cita para venir corriendo a ver a Karlie- Respondió tan quitada de la pena como si fuera lo más obvio. -Pero...¿Y tú? ¿Qué haces por aquí?- Ese cuestionamiento tenía mucho más sentido, ya que Jauregui y Kloss no eran precisamente cercanas.

-Yo...- Se Rascó disimuladamente la cabeza, como si frotara una lámpara mágica y de ella fueran a brotar las ideas o mentiras necesarias que la sacaran del paso bien librada. -Pues lo mismo que tú, también quiero saber cómo está Karlie- Mintió descaradamente.

-¿En serio? No pensé que te preocuparas por ella- Sonrió toda contenta de que Lauren se interesara por la salud de su amiga.

-En realidad no somos muy cercanas, es sólo que...- "Piensa cabeza piensa" Se repetía una y otra vez a sí misma. -Bueno, con todo lo que ha pasado, ya sabes, su accidente inesperado y todo eso, lo grave que estuvo, pues me hizo recordar a Lucy, sé que no tiene relación una cosa con la otra pero simplemente sentí la necesidad de venir- "Lauren...¿De verdad estás utilizando la memoria de Lucy para seguir ocultando toda tu maldita mierda?" Sí. Eso era exactamente lo que acababa de hacer.

-Sé como te pone hablar sobre ese tema- Camila deslizó con suavidad su mano por la espalda de Lauren, acariciándola con ternura
-No necesitas profundizar en eso si no te sientes lista-

La Ojiverde tuvo que apretar con fuerza los dientes para que Camila no se diera cuenta del efecto que producía en ella su toque y sus palabras tan tiernas. Sabía Perfecto que las cosas que Camila le decía no eran producto de la apatía o el desinterés, todo lo contrario, sabía que era sincera, prudente y comprensiva.

Y eso no ayudaba en absoluto.

Todo lo contrario, cada vez se enamoraba más de ella.

¿Por qué tienes que ser tan perfecta? Se moría por preguntarle. -Gracias por entender- Fue lo único que atinó a decir, en cambio. Era mejor permanecer callada, al menos así evitaba seguir mintiendo patológicamente o en su defecto seguirla cagando y propiciando acercamientos altamente peligrosos.

-Bueno, ya quita esa cara- Le pidió con esa sonrisa tan hermosa que solamente Camila Cabello poseía -Te alegrará mucho saber que Karlz ya despertó, de hecho salí corriendo tan rápido como lo supe, ¿Cómo ves que la loca apenas despertó y ya me texteó? Me escribió que tenía algo urgente que decirme-.

A Lauren Jauregui se le encogió el estómago, pero no de forma agradable. Con todo y su miedo a las alturas, ni siquiera había sentido tanto vértigo al lanzarse de la tirolesa aquella fatídica mañana en Los alrededores de Santiago De Chile. -Seguro querrá contarte del accidente, aún no se sabe lo que sucedió exactamente...¿O sí?-

-Mmm nop, no que yo sepa, pero creo que esto va relacionado con trabajo, o dicho de otro modo, va sobre Chelsea Briggs y el contrato, ella no quería que firmara y presiento que se va a enfadar mucho-

EL HUBIERA SÍ EXISTE  (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora