Red Boy [Gyuzi - JiGyu]

Capítulo 21

En un pequeño súper, un joven chico que trabajaba con su abuelo, escuchó los escandalosos cuchicheos de las personas que compraban, donde su interés y miedo creció al escuchar que la casa del pelirrojo estaba en llamas. Sin pensarlo dos veces corrió para llegar al lugar del incendio, pero se detuvo al observar en la lejanía a MingHao, salir del edificio de trabajo, cerrando la puerta y caminando tranquilamente a la dirección a la cual se dirigía.

Con paso inseguro trató de alcanzarlo para confirmar los rumores del pueblo, pues el menor se veía extremadamente tranquilo para que aquella situación fuese cierta. Pero cuando había dejado el pequeño edificio unos cuantos pasos atrás, una fuerte explosión lo hizo saltar en su puesto, para girar rápidamente y mirar el lugar buscando una explicación, ya que MingHao, acababa de salir de él.

Volteó a ver al menor y luego al edificio, para decidir acercarse y aclarar su confundida mente, sacando la llave que le había dado Woozi, abrió la puerta para toser ante el humo comprimido, que rápidamente escapó del edificio sin ventanas.

Las personas curiosas empezaron a rodearlo y él se adentró con precaución viendo las mesas de madera en llamas, tomó el extintor para tratar de apagarlas, cuando escuchó un fuerte estruendo del piso superior, se abrió pasó con el extintor para subir las escaleras para ver ambas puertas en el suelo y llamativas llamas salir de ambas habitaciones.

Decidido a salir de allí, pues imaginó que sus amigos debían estar en casa de Woozi, empezó a bajar las escaleras escuchando como caían los estantes en la planta superior, cuando faltaban pocos escalones para llegar a la planta baja visualizó a su agitado viejo en la entrada.

__ ¡¿Dónde está Woozi!?-. El viejo tosía mientras trataba de adentrarse en el edificio pero Cheol, rápidamente, le impidió el paso sacándolo de allí-. ¡Woozi está ahí! ¡Lo vieron entrar!-. Le dijo el viejo con desespero mientras era arrastrado lejos del edificio.

El cuerpo de Cheol nuevamente se cargó de adrenalina al pensar que el pelirrojo estaba atrapado en la planta superior, corrió para entrar al edificio escaleras arriba, tropezándose al escuchar una fuerte explosión en la planta baja. Asustado obtuvo estabilidad para apretar con fuerza el extintor en sus manos y empezar a apagar el fuego de las puertas que yacían en el suelo del pasillo.

La oficina estaba completamente en llamas y su corazón se encogió, empezó a apagar el fuego de la oficina buscando con la mirada alguna señal de vida, cuando un celular se hizo escuchar entre aquel caos; provenía de la bodega.

Se acercó a la bodega repitiendo el proceso que anteriormente había hecho en la oficina, guiándose por el sonido del celular, los estantes estaban amontonados y envueltos en llamas y su desesperación crecía al no encontrar a Woozi. Pudo hallar la ubicación del celular detrás de los estantes de la izquierda y se esmeró en apagar primero las llamas de estos, pero para su desgracia el extintor había dejado de funcionar.

Su desesperación y temor crecieron ante las llamas que crecían con rapidez en los estantes de su derecha y las leves llamas que aun poseían los de la izquierda, su tos no tardó en empeorar y no estaba pensando con claridad.

Se agachó como último intento, buscando en las oberturas que quedaron entre los estantes colapsados y soltó un jadeo al notar que en un pequeño espacio entre el último estante y la pared un cuerpo yacía inconsciente.

Tomando el estante con sus manos para tratar de levantarlo, soltó un gruñido de dolor al sentir las altas temperaturas que este tenía y lo pesado que era. Se agachó nuevamente metiendo apenas una parte de su cuerpo en aquella obertura tratando de alcanzar al pelirrojo, su mano rozó levemente la contraria y maldijo tratando de hacerse paso en aquella pequeña obertura.

__ ¡Woozi! ¡Woozi!-. Gritaba con desespero el joven mientras trataba de alcanzarlo, necesitaba aire fresco sino quería morir atrapado junto con el pelirrojo.

Buscando posiciones que le permitiera alcanzar a Woozi pudo tomar la punta de sus dedos y halar fuertemente de estos, mientras gritaba de dolor al estar apretado en aquel espacio. Sus duros esfuerzos dieron frutos al poder tomar la mano del joven y halarlo mientras él se arrastraba fuera del estante.

Después de unos minutos tenía el pequeño y maltratado cuerpo en sus brazos, levantándose con dificultad debido al cansancio y la falta de aire, cargó al pequeño mientras salía de la bodega y bajó con mucho cuidado las escaleras para en el último escalón agacharse apretando con fuerza el cuerpo de Woozi ante las seguidas explosiones que provenía de algún lugar de la planta baja, subió nuevamente las escaleras resguardándose de las mismas, luchando para no perder la conciencia y poder salir ambos de aquel infierno.

Miró el cuerpo de Woozi y con manos temblorosas lo examinó para comprobar que no respiraba, soltó un jadeo de desesperación mientras le tomaba inútilmente el pulso.

__ ¡Woozi!-. Gritó con el corazón destrozado y lágrimas empezaron a brotar de sus ojos, el pelirrojo no tenía signos de vida.

El piso temblaba bajo sus pies, su respiración fallaba y sus sentidos se estaban apagando lentamente, apretando el cuerpo del pequeño con fuerza se levantó al no sentir nuevas explosiones y bajó las escaleras corriendo entre los escombros y nuevas llamas que se había formado debido a las explosiones, a pocos pasos de llegar a la puerta visualizó a su asustado abuelo observarlo y tapar su boca con ambas manos.

A Cheol le faltaban pocos pasos para salir del edificio y a cierta bomba en la bodega le faltaban segundos para destruirlo por completo.  

Sam&Char