Capítulo 22

15.5K 1.5K 108
                                    

Los meses avanzaban dejando a su paso muchos sinsabores pero también muchos buenos momentos

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

Los meses avanzaban dejando a su paso muchos sinsabores pero también muchos buenos momentos.

    No tenía idea de donde había estado Sebastian pero hacía tanto que no lo conocía que parecía que fuéramos dos conocidos meramente.

    Blair por su parte pasaba por un mal momento al estar separada de Richard. Se había equivocado y lo cierto es que no sabía como ayudarla. Si bien era cierto que había hecho mal también tenía un punto válido pero bueno no todos podían estar de su lado.

    En cuanto Fredek y a mí todo parecía estar normal, al menos toda la normalidad que era posible tener entre nosotros.

    Seguíamos siendo una pareja dentro de la casa y cuando estábamos en familia pero nunca en la calle o en eventos, la realidad era que ante los ojos de todo el mundo eramos dos personas desconocidas. Se había especulado sobre que él mantenía una relación con alguien cuando la prensa lo había fotografiado comprando flores y posteriormente publicada. Flores que yo nunca recibí y él nunca aclaró para quién habían sido.

    No cuestionaba nada de su vida y aunque últimamente hablaba demasiado a su país no quise inmiscuirme y preguntar algo que todos los días me decía que no debía importarme o al menos me lo repetía a cada instante para no sucumbir.

    Los mensajes seguían llegando pero había decidido callar porque no pretendía hacerlo partícipe de nada que no le concerniera y tampoco permitir que se apoderara de mi voluntad mandando más gente sobre mí, suficiente tenía con los hombres que apenas toleraba me siguieran a todos lados para soportar un encierro.

    Parecía que no había encontrado nada o al menos no me había dicho, sino que solo me había dado custodios que no obedecían ninguna de mis ordenes sino solo las de él.

    En la relación hacia algún tiempo que no eramos la pareja sexual sino que ahora parecíamos más una pareja de hogar. Lo veía cada noche y solía abrazarme, besarme, cenaba conmigo y sobre todo conversábamos nuestra cotidianeidad. Fredek era completamente mío tanto como yo lo era de él. Era evidente que siempre estábamos juntos y disfrutábamos de cada instante. Habían fines de semana en los que me iba con él a algún lugar a disfrutar y esos días se habían convertido en recuerdos imborrables, así pues también pasábamos horas leyendo, viendo alguna película o simplemente hablando de cualquier cosa.

    Cada mañana despertaba a su lado y aunque seguíamos viviendo separados lo real es que pasábamos mucho tiempo juntos y cuando no lo estábamos siempre teníamos una excusa para llamarnos o escribirnos.

    Angeline seguía siendo su amiga y aunque él se excusaba diciendo que le compadecía verla sufrir por su hermana, eso no quitaba el hecho de que siempre estaba dispuesto ayudarla y ella siempre estaba dispuesta a hacer todo por conseguir lo que sea que quería conseguir pero la odiaba por pretenderlo a él y aunque lo negara me dolía el pecho de solo pensar que tal vez un día ella se convirtiera en la chica de Fredek.

Amor de habitación (Serie Amores 2)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora