Keira Cooper solo ha conocido el amor una vez y le fue arrebatado por la persona que debió protegerla; con los años no solo ha madurado su personalidad sino también ha crecido su rencor y su odio hacia ella por lo que se esforzará por encontrar un h...
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FREDEK.
—Lo que piensas debe ser muy importante desde que no has notado mi entrada —dijo Richard sentándose con desparpajo—. Quieres que bebamos y me cuentas.
Negué antes de acomodarme en la silla.
—No me pasa nada —respondí con la misma frialdad de siempre—. Solo pensaba en unos asuntos.
—Asuntos con nombre de mujer —replicó—. No quiero meterme donde no me has dado permiso, pero que ya una vez dije que esa mujer no era la correcta.
—Ya estás metiéndote —farfullé con desgana—. Y tampoco eres mi papá para decirme lo que hago mal y ya.
—Sé que no soy tu padre —contestó incapaz de dar por terminado el asunto—. Pero sin temor a errar creo que esta vez debes reconocer que te has equivocado. No es malo ni inhumano. Lo malo es creer que no lo haces nunca.
Hubo un silencio en el que no supe que decir porque miles de sentimientos se mezclaban.
—Creí que no era mala —dije a modo de defensa—. Pero como siempre, estoy listo para todo menos para las mujeres. Fin de la discusión.
Di unas palmadas al escritorio y después cambié el tema viendo a mi amigo sonreír.
—Así no se hace. —Siguió con el tema—. Evadir solo te hará más daño. No sé lo que haya pasado más lo que me has contado a grandes rasgos, pero apuesto mi vida a que fue ella la que lo hizo mal. Creo que tu problema es querer de más y no es malo, Dios sabe que no, pero con la mujer correcta.
—Pues viendo las cosas dudo que haya una siguiente —dije con los dientes apretados.
—¿Estás negándote a querer a otra? —dijo ofendido—. ¡Por Dios! Eso es un disparate. No todas son como Keira.
—No soy ningún masoquista. —Mi enojo comenzaba a resurgir—. No lo hice una vez, no voy a hacerlo ahora. Solo quiero decir que se acabo el romantizar a las mujeres como pequeñas víctimas. Es todo. ¿Dime una cosa? Blair te traicionó, ¿cuál es la diferencia?
Mi amigo sonrió y se envaró.
—Golpe bajo —dijo señalándome.
—Tú has empezado —respondí.
—La diferencia es que Blair no lo hizo a propósito —dijo haciendo una pausa—. Me dolió, por supuesto, pero ella no lo hizo para lastimarme. Se quedó callada por miedo. Keira te ha lastimado una y otra vez sabiendo lo que hace. Te ha herido por egoísmo. Esa es la diferencia. Puede justificarse de mil formas pero no nos hagamos tontos, la realidad es esa.
—Nunca te ha gustado —aseguré.
La puerta se abrió de nuevo dejando ver a mis hermanos y para sorpresa de todos a la hermana de Richard.
