Capítulo V: Una jodida novela de Wattpad.

5.7K 283 17
                                    

Suspiro, con ganas de soltar mis lágrimas que no tardan en nublar mi vista, aún con la vista del techo de mi habitación, mientras estoy acostada en mi cama. Esto es demasiado. Lo sé, mi madre parece que no piensa más que en sí misma, y es que el divorcio de mi padre, el no poder tenerlo un minuto más es lo que más le dolió, a su orgullo. Pero, es tan inmadura que me dan ganas de gritarle que deje de ser tonta, porque mi padre ya no va a regresar.

Estoy tan enojada conmigo misma, como con mi madre, porque pude haberla detenido y no lo hice. Eso es lo peor. Pero, ni siquiera me escucha a mí, no sé por qué me siento tan mal. Seguramente llega en una semana, y si se tarda más días, y no me contacto con ella, tendré que llamar a la policía. Y el pensamiento de que llegue a ese nivel, sólo me hace enojar más con mi madre, que sigue atascada con mi padre, que ya hasta se va a casar y mudar a otro país.

Tomo una almohada y la lanzo con toda la fuerza que tiene mi brazo, llena de furia y rabia que empieza a aparecer después de un día sin noticias de mi madre, como ya estoy acostumbrada, pero el enojo nunca cambia.

Escucho el portazo de algún carro, y sé que seguramente es mi tía Olivia, que no sabe dónde se guarda su hija, más sí la llama para saber si comió e hizo los quehaceres de la casa. Desde que Regina se fue de casa, todo se ha vuelto gruñidos y portazos al otro lado de mi casa. Ni siquiera mi mejor amiga me ha llamado, mandado un texto o algo. Nada. Y eso me enoja todavía más, que aviento otra almohada.

Me paro de mi cama, y corro la silla de mi escritorio hasta la ventana de mi habitación. Estoy harta de ver el techo blanco de mi habitación. Se suponía que esta semana, llegando de Monterrey, para cerrar —por fin— las vacaciones de verano, y empezar con quinto semestre de bachillerato, con Regina en otro grupo. Y Dante también entra al bachillerato, sólo que a tercer semestre.

Miro el árbol verde que tapa la visión hacia una parte trasera de la casa, aunque no es tan importante cuando puedo ver perfectamente al cuarto de Dante, donde puedo ver que en la cama yace un libro de uno de mis escritores favoritos, Blue Jeans, y también veo la chaqueta que pertenece a Dante, una negra que su hermana le regaló en su cumpleaños número dieciséis, me acuerdo cuando Regina me la mostró y yo le di el visto bueno. Acuesto mi rostro en el marco de la ventana y admiro cómo las hojas verdes pegan unas contra otras por el aire que hay ese día en C.

— ¡No, mamá! ¡Vete a la mierda, ¿bien?! ¡No puedo creer lo que acabas de decir! ¡No es su culpa! ¡Nada de lo que pasó a mí es culpa de ella, y no puedes simplemente culparla por estúpidos pensamientos tuyos! —Dante entra a su cuarto, haciendo que la puerta se aporre contra la pared de la fuerza con la cual la abrió. Mi tía Olivia llega detrás de él con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

— ¡No me levantes la voz, Dante! ¡Sigo siendo tu madre, no ninguna de esas amiguitas que tenéis! ¡Y me importa también una mierda lo que opines! —Bajo un poco mi rostro, para que no me vayan a ver, metiendo mis narices donde no me incumbe—. ¡Escuchad lo que te digo, y después sacas tus jodidas especulaciones, gilipollas!

— ¡¿Gilipollas yo?! —Se empieza a reír Dante, irónicamente—. ¡Jódete, mujer! ¡Eres una vil perra que no sabe nada! ¡Yo pasé por ello, no tú! ¡No saques conclusiones tú que nada que ver, joder!

— ¡Fuera! ¡Lárgate y no vuelvas, imbécil! ¡No puedo permitir estas groserías! —Nunca los había escuchado gritarse como verdaderos españoles. A veces pensaba que el acento se les había perdido, pero al parecer no. O casi todo no.

Dante sale de su cuarto como un rayo, no sin antes agarrar la chaqueta negra, sin mirar a su madre y murmurando groserías inentendibles. Mi tía Olivia se ve tan rota cuando él deja la habitación y se pone a sollozar, tapándose el rostro y sentándose en la cama de Dante, y se topa con el libro que leía Dante, y con furia lo lanza al otro lado de la habitación.

Desafiando a Dante (Desamores #1)Where stories live. Discover now