Capítulo XXXIV: Me gustas mucho, Han Solo.

3.4K 184 20
                                    

—Por favor, Ronnie, te lo ruego, ándale, amiguita —implora mi mejor amiga, Gloria con cara de cachorrito aplastado. Suspiro, y ruedo mis ojos—. Por fi, por fi, por fi. ¡Yo te pago la gasolina, por favor! ¡Vero! ¡Verito! ¡Amiga mía!

— ¡Qué no! —Bufo con enojo. Gloria se echa hacia atrás en mi silla de escritorio, que le ha dado la vuelta para verme, cruzándose de brazos con exasperación. Estoy acostada en mi cama, y simplemente pensando en cómo matar a una amiga sin que me duela a mí en el proceso. Ya, ni es para tanto, pero no estoy de humor para que me rueguen.

Odio a los hombres. Esto parece un jodido deja vu.

— ¡¿Por qué no?! ¿Qué saldría mal, eh? —Este es el lado oscuro de Gloria, mi amiga rubia, que nunca se ha dejado ver en estos meses. La conozco muy bien, y sé que quiere que nos escapemos, pero no quiero salir sabiendo que Sarah no está ahí, porque anda sensible todo el día y su madre le ha prohibido salir de casa a parrandear, y no la culpo.

En unos días es su cita con el doctor, ¡y pronto veré al bebé!

Me siento para ver mejor a Gloria que hace un puchero aún cuando sabe muy bien que puedo echarla de mi casa si quiero. Pero, me contengo, gruñendo en voz baja.

—Uno, tu novio salió de viaje por el puente de primero y segundo de noviembre. Dos, tú apenas y estás acostumbrada al alcohol como yo. Tres, no tenemos disfraces, y carajo, ni siquiera es nuestra tradición Halloween, no tenemos por qué si quiera hacer una fiesta sobre ello. —Voy contando con mis dedos, con molestia—. Cuatro, posiblemente me cruce con Dante, y mierda que no quiero eso. Y cinco, no estoy de humor. Estoy en una jodida pelea con mi jodido novio —Suelto un ruidito de desesperación. Gloria me da una mueca aburrida.

—Maldita sea, no porque mi novio esté de viaje deba privarme de divertirme un poco. Lo amo, y todo, pero, Dios, no es como si fuera a engañarlo. Además, no creo que Dante vaya a ir a la fiesta —alza una ceja por un segundo. Frunzo el ceño.

— ¿Qué quieres decir, Gloria?

—Que Caleb es quien organizó la fiesta en su antigua casa, Vero, así que no creo que esté de "mal humor". Pero, ya tengo nuestros disfraces —se encoge de hombros. Me quedo con la boca abierta, sin saber muy bien qué pensar. Esto me está tocando lo huevos inexistentes. Pensé que estaría de luto el canijo, ahora... siento furia. Después de un minuto en completo silencio, aprieto los dientes.

— ¿Cuál es mi disfraz, dices? —Pregunto con una sonrisa tensa.

Gloria aplaude como si hubiera ganado la lotería, un momento después sonríe demoniacamente haciéndose hacia atrás, observando su obra maestra.

— ¡¿Qué carajos es esto, GLORIA?!

Me veo al espejo una vez más con expresión horrorizada, mientras Gloria ríe a carcajadas que de sus ojos salen lágrimas. Bien, es humillante, y estoy llena de... ¿pelos? ¡Ni siquiera sé qué personaje soy! ¡Es como si fuera todo un mono! Mi amiga rubia deja de reírse al darse cuenta de que yo no lo estoy haciendo, por más aguafiestas que me vea, me importa un bledo. Me vistió como un maldito payaso... o ¿un mono poseído?

—Ríe un poco, querida. ¿No sabes en serio de qué película es? —Pregunta Gloria con una ceja levantada, incrédula. Niego con la cabeza, quitándome la máscara bien peinada—. ¡Eres Chewbacca de Star Wars!

— ¡Sí, pero una Chewbacca puta! ¡Esta falda es jodidamente corta, Gloria! —Reprendo mientras trato de bajarme la falda que apenas y me llega a la mitad del muslo—. Ni me van a dejar salir de casa con esto. ¡No mames, Gloria, mi madre me matará!

—Claro que sí saldrás de aquí, no seas aguafiestas. Tu mamá me dio el visto bueno —Le quita importancia con un ademán, y va por su mochila donde al parecer trae su disfraz.

Desafiando a Dante (Desamores #1)Where stories live. Discover now