1 | Todo lo hice por ti

23 - Jamás deje de amarla

—¿Qué?—mi madre abrió los ojos cómo platos, ahora tenía miedo.

Mi prima se puso frente a mí con el mismo rostro de mi madre.

—¿Es una broma, Matteo?—pregunto ella.

Empecé a pensar que esto fue una mala idea, pero a la vez no. Son mis hijos, son sus nietos, llevan la misma sangre maldita sea.

—No—dije—. Ellos son mis hijos.

—¡Son ellos!—dijo mi padre—. Mili, ¡son nuestros nietos!

¿Qué?

Sol sonrió a mi padre.

—¡Son ellos!—escuché a mi madre, entonces ahora el sorprendido era yo—. ¡Todo el tiempo fue cierto!

¡Lo sabía! ¡Ella lo sabía! ¡¿Cómo cojones lo sabia?! ¿Todos lo sabían?

No me dí cuenta en que momento, ella ya abrazaba a los niños con los ojos llenos de lágrimas. Mi padre estaba a un lado.

Salí de ahí y subí a la que es mi habitación, me dí cuenta que Flor venía detrás mío.

—¡Ellos lo sabían Flor!—grité—. ¡Ellos lo sabían y jamás me dijeron nada! ¿Que clase de padres le ocultan algo así a sus hijos?

Sentía rabia, furia y todo eso.

—Yo ni siquiera sabía que te veías con Luna después de lo de Emilia.

—¡Es qué no volví a verla! ¡Ella jamás me dijo que teníamos dos hijos!—grité—. ¡Pero eso no es lo importante ahora!

Me dí media vuelta.

—¡Mis padres lo sabían!—grité.

—Cálmate—dijo ella caminando hacía mi—. Ponerte de esa manera no arregla nada, Matteo.

¿Es qué acaso así es siempre? ¿Nos piden que nos calmemos cuando ni siquiera saben la mierda que nos sentimos? Que alguien te mienta duele, pero que sea tu propia familia duele más.

—Creó que alguien llegó—dijo Flor pero no puse la mínima atención.

Cerré los ojos y solamente quería estar solo, pensar mis cosas solo, entender porqué o buscar una razón para ocultarme eso.

Cuándo abrí los ojos, no estaba flor, pero unos pasos se acercaban y eran pasos de una mujer porqué ahora aprendí a identificar el sonido de los tacones.

En un instante el rostro de Luna apareció y al verme en esta forma inmediatamente se acercó a mí.

—¿Que sucede?—preguntó acomodándose a mi lado.

–¿Vos le hablaste a mis padres alguna vez para decirles algo de los niños?

Fuí directo, ¡quería aclarar mis dudas ya!

—Una vez ella me habló, que sabía algo, pero yo negué todo—dijo y me veía de manera rara—. Mencionó que me preguntó primero para que al momento de decírtelo, fuese cierto y no solamente te ilusionaras. Sol me dijo que subiste molesto, ¿fue eso?

No puedo negar que ahora me sentía más calmado, pero el hecho de que me mintieron y jamás me mencionaron nada no se me quita de la cabeza. de cierta forma tal vez lo hicieron para protegerme, para proteger mis sentimientos.  Sabían que si me llegaba enterar de eso habría nacido en mi la ilusión más grande que jamás hubiese tenido en toda mi vida pero como Luna lo negó, fue algo que decidieron callar durante tanto tiempo creyendo que solamente era mentira, tal vez algo les decía que era cierto y que con el tiempo comprobarían y eso pasó hoy.