Es parte de mi vida. Marco Asensio.

Capitulo 17-Reunion con el queridísimo.

-Que te despiertes ostia.
Noto como un cojín impacta en mi cara y una risa de fondo, Yuri.

-¿Que quieres Yuri?-pregunto sentándome en la cama y estirandome.

-Tu padre quiere vernos Lexita, a los cuatro.

Ruedo los ojos y me vuelvo a tumbar en la cama, a lo que Yuri responde tirándome otro cojín. Aunque la idea de quedarme a dormir un ratito más me encanta, me levanto y me doy una ducha para activarme, tengo que tener mis cinco sentidos alerta.
No sé por dónde va a salir mi padre hoy en la reunión. Es que eso de que al final quiere que vayamos los cuatro es muy raro, normalmente suelo ir yo sola o Chad y luego le contamos al resto lo que ha pasado. A saber que cable se le ha cruzado esta vez.

Me visto y me hago una coleta, salgo del apartamento con Yuri y bajo a la barra a pedirle a Rosa algo para desayunar. Unas tostadas y un zumito de naranja, me encanta.
Termino y mientras que espero a que vengan Chad y Logan, hablo con Yuri sobre lo de ayer. Y como no me empieza a hacer un interrogatorio sobre cómo es que estoy saliendo con Marco y como es él, en TODOS los aspectos.

-¿Y lo hace bien?

-No sé Yuri, todavía no he llegado a dar ese paso.

-¿Y la tiene grande?

Escupo todo el zumo que tenía en la boca y Rosa me mira medio enfadada, la pobre fregó esta mañana el suelo y yo se lo he vuelto a ensuciar.

-Yurena por favor.

-Es que ya no me cuentas nada Lexa-contesta cruzándose de brazos-¿Es que ya no somos mejores amigas?

-Si que lo somos, lo que pasa que no siempre nos tenemos que contar todo, además, tú no me has contado que estás colgada por Chad.

-¿Que dices?-responde poniéndose roja-Para nada, son imaginaciones tuyas Lexita.

Y hablando del Rey de Roma, por la puerta se asoma junto a su fiel sirviente Logan. Nos damos un abrazo cada uno y nos ponemos a hablar sobre cualquier tontería que se le pase a uno por la cabeza. Cómo aquella vez que nos quedamos en casa de Logan hasta las cuatro de la mañana debatiendo sobre cómo tendrían que ser los pantalones para los perros, que sean solo en las patas de atrás o en las cuatro patas. Sacamos conclusiones curiosas la verdad.

-Chavales, es la hora.

Le doy el último bocado a la tostada y camino junto a mis amiguitos al despacho de mi queridísimo padre. Chad llama a la puerta y no contesta nadie. Esperamos un momento y nada. Chad va a volver a llamar pero le paro la mano y abro la puerta del despacho, paso de ser educada con él cuando no lo es con nadie.
Entramos y lo vemos hablando por teléfono, pone una cara de enfado al vernos y termina de hablar.

-¿Que es lo que pasa Luis?-pregunta Logan sentándose en una silla al lado de Yuri.
Chad y yo nos quedamos de pie detrás de los dos que se han sentado, yo detrás de Yuri.

-He estado pensando y he llegado a una conclusión.

-¿Que coño quieres?-pregunto suspirando y Chad me da un pisotón-Perdona, ¿Que es lo que le ocurre padre?

-Últimamente no ganáis en las carreras, voy a empezar a perder dinero, así que vamos a tener que aumentar el negocio.

-¿En qué sentido?-pregunta Yuri intrigada.

-Cada uno os vais a dedicar a una cosa nueva a parte del bar, las carreras y las drogas: Logan, vas a empezar a robar coches para vender sus piezas, Chad tú te vas a encargar de desmontarlos, Yuri tú una vez que estén desmontados vas a ser la encargada de limpiarlos llevando las piezas en un camión que acabo de comprar.

-Pero yo solo tengo el carnet del coche Luis, camión todavía no.

-Pues te lo sacas ya.

-¿Y Lexa que?-pregunta Logan mirándome de reojo.

-Voy a hablar con ella ahora, a solas.

Logan y Yuri se levantan y junto a Chad se van del despacho. Me da a mí que no me va a pedir algo legal y tranquilito. Miedo me da que es lo que me va a pedir si ha pedido hablar a solas conmigo.
Gira la pantalla de su ordenador y me enseña unas coordenadas y el sitio que es: el descampado donde vendemos las drogas. Y al lado viene la hora, esta tarde a las 20:00.
Que raro, no solemos vender a esa hora, suele ser por la mañana ya que por la noche está más oscuro y puede pasar cualquier cosa.

-Lo entiendo, me toca a mí ir a vender, ¿Por qué a esa hora?

Sonríe maliciosamente y se levanta de la silla, camina con las manos en los bolsillos y se pone junto a mí.
-Es a esa hora porque desde hoy se amplía el negocio.

-¿Que?-pregunto confusa-No te entiendo.

-A partir de hoy vas a hacer disfrutar a los clientes con las entregas Lexandra.

-¿No habrás hecho lo que yo estoy pensando ahora mismo verdad?
Suelta una carcajada y yo me llevo las manos a la cara. Hijo de puta.
-No me voy a acostar con nadie papá, tenlo más que claro.

-Tarde hija mía, me enfadaste aquel día y aquí está tu castigo.

-Eres un cabrón, ¡Que te quede claro que no lo voy a hacer! ¡Estás loco! ¡Soy tu hija, deberías tener un poco de preocupación por mi! ¡Pero como siempre está el dinero de por medio! ¡Te importo una mierda! ¡Ni loca hago eso!

Me doy la vuelta para irme del despacho y me agarra del brazo, me tira hacia atrás haciendo que me aleje de la puerta y se adelanta él para cerrarla con llave.
Se gira y guarda las llaves en su bolsillo.

-Veo que todavía no has aprendido la lección Lexandra-empieza a decir sonriendo cínicamente acercándose a mi-Voy a tener que recordarte lo que pasa cuando no me obedeces...

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Amores, hoy me he enterado de una mala noticia, estoy de luto.
Hoy me he enterado que al parecer que Marco tiene novia...¡Nos ha engañado a tod@s!
Pero mientras que él sea feliz con ella no hay problema, bueno casi, vale que puede que esté un poco celosa y tal, pero no problem, seguro que es buena persona y nos deja fotos de Marquito.

Sigo con exámenes, mañana seguro que no hay capitulo ya que el viernes tengo uno.
Y poquito más amores míos, ¿Que os va pareciendo la historieta?
Chau.