Capítulo 67-No es tarde.

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Miramos a la camilla y vemos a Chad sonriente...¡ESTA DESPIERTO!

-¡CHAD!
Me suelto de Marco y me tiro encima de Chad abrazandole.

-Por fin estás despierto, no sabes lo mucho que me has hecho falta Chad. Te quiero mucho, he estado viniendo....

-Todos los jueves a las 18:00-responde sonriendo quitándome las lágrimas-Lo sé, podía escucharte-mira a Marco y le guiña un ojo-Veo que has vuelto al final con Asensito, hacéis buena pareja.

-Una larga historia-dice Marco sonriendo rascándose la nuca-¿Cómo estás Chad?

-Bien supongo, quiero salir de esta cama de una vez, estoy harto...Xama, ¿Cómo está Yuri?

Sonrío y me separo de él para abrir la puerta de la habitación, llamo a Yuri y le digo que venga con Tania.
Nada más pisar la habitación y ver a Chad despierto, empieza a llorar fuertemente y cae de rodillas al suelo.

-Mi niña-dice Chad sonriendo cariñosamente-Levanta del suelo anda, que aunque estemos en un hospital seguro que está sucio.

Yuri se levanta y se tira encima de Chad abrazandole mientras que llora. Marco me abraza por la espalda y nos quedamos viéndolos.

-Chad lo siento-dice Yuri sentándose-Por mi culpa has estado así.

-Fue culpa mía, por cabezón. Quería bajar esas cajas por cojones...¿Y esa niña tan guapa no será quién creo que es?
Tania se acerca a la camilla y le da la mano a Chad.
-Pero mira cuánto has crecido pajarito, la última vez que te vi estabas en mis brazos dándote un biberón.

-Que ojos más bonitos tienes-dice Tania mirando a Chad.

-Son para verte mejor-contesta y nos empezamos a reír-¿Nos vamos hoy de fiesta?

-Chad amor, tienes que descansar-dice Yuri acariciándole la cabeza.

-¿Más aún? Llevo dos años descansando, ¿No llega con eso?

Nos quedamos un tiempo más hablando con ellos. Llamamos a la madre de Chad y cuando entró por la puerta, de la emoción se desmayó, tuvieron que ponerla en el sillón de al lado de la camilla. Logan también vino en cuanto se enteró, se va a quedar esta noche con él para ponerle al día.

Nos vamos del hospital y Marco nos lleva a casa, Tania se ha quedado dormida. Es casi de noche, nos hemos pasado todo el día en el hospital hablando con Chad, contándole como han pasado las cosas y demás.

Marco para el coche delante de la casa y espera para que me baje.

-Lexa, ya hemos llegado.

-Aparca el coche en el garaje Marco, no lo dejes aquí fuera.

-Pero si tengo que volver a casa-responde confuso mirando a la carretera.

-Ya hemos llegado, estás en casa.

Sonríe ampliamente y me da un beso en la mejilla, aparca el coche en el garaje y lleva en brazos a Tania.
Quiero que esta noche esté conmigo, esta y todas las demás de mi vida. Recuerdo cuando me despertaba y lo veía a mi lado dormir plácidamente, aunque estuvieras haciendo ruido con un taladro no se despertaba, lo comprobé un día y fue cierto.

Lleva a Tania a su cama y le pone el pijama, yo mientras me quedo embobada viéndole. No hay nada más bonito que ver al hombre de tu vida junto a tu hija.
La tapa y le da a Lupi, salimos de su habitación dejando la puerta encajada, todavía le tiene un poco de pánico a la oscuridad, pero poco a poco.

-¿Y ahora qué?-pregunta tímido rascándose la nuca-¿Dónde duermo?

-Donde siempre.

Le cojo la mano y lo llevo a la habitación. Al entrar se queda mirando la decoración, hay un par de fotos de Tania y mías, y una de él con Tania en brazos. Abro el armario y saco del último cajón una camiseta suya vieja, de las que tenía cuando estábamos juntos hace dos años.

-¿La sigues teniendo?-pregunta sonriendo levemente al verla-Creia que habías quemado toda mi ropa.

-La gran mayoría se la di a tu padre, pero me quedé con algunas. Esta fue la primera que me puse cuando me quedé a dormir aquí por primera vez.

-Cuando te recogí en la calle y llovía a chuzos...y nos emborrachamos esa noche-dice nostálgico mirando la camiseta-Que buenos recuerdos.

-Marco, ¿Por qué has vuelto?

-Porque me cansé de Italia, en casa como en ningún sitio-responde riendo-Y porque no estaba ni Tania ni tú.

Sonrío tiernamente y le doy un abrazo. Mis manos pasan por su cuello y las suyas por mi espalda, de arriba a abajo.

-De Italia me llevo a grandes personas, conocí a un empresario un poco engreído, pero me daba buenos consejos y siempre que me veía de bajón me sacaba de fiesta para intentar animarme y para que no hiciera ninguna tontería. Él fue quién me animó a volver a España.

-Le voy a tener que dar las gracias, ¿Como se llama?

-Rodrigo Rizzo, si vamos de viaje a Italia te lo presentaré, al principio te caerá mal pero es buena persona.

Asiento y me acerco a darle un beso que recibe con mucho gusto.
Hoy ha sido un gran día, Chad ha despertado y por fin parece que he arreglado las cosas con Marco. ¿Que somos ahora? ¿Novios?... Da igual, creo que estamos juntos y que va a ser muy difícil separarnos. Con el tiempo he madurado más y gracias a Tania tengo muchísima más paciencia.

-¡Yo quiero un abrazo!

Nos giramos y veo en la puerta a Tania en pijama agarrando a Lupi.
Marco se agacha y abre sus brazos, Tania sale corriendo hacia él y Marco la coge en brazos.

-¡Por fin mis papis están felices!

Marco y yo sonreímos y le damos un beso cada uno en la mejilla.

-Tu haces que seamos más felices cosita-digo sonriendo dándole la mano-¿No tienes sueño?

Niega sonriendo y señala un cajón de la cómoda de la habitación. La miro con una ceja levantada y junta sus manitas pidiéndome.
Ruedo los ojos y saco de la cómoda una caja.

-¿Que es eso?-pregunta Marco extrañado.

Tania se baja de Marco y se sube a la cama, coge la caja y empieza a sacar álbumes de fotos y dos cajitas muy pequeñas.
Marco y yo nos sentamos en la cama junto a la chiquitina y empezamos a ver las fotos. Hay fotos de todo tipo y lugares, en el bar de Luis, en el Bernabéu, Valdebebas, con Isco y los demás, con Chad y el resto...
Tania coge una de las pequeñas y la abre. Es el pingüino que me regaló Marco aquel día. Al verlo abre los ojos asombrado y sonríe.

-Lo sigues teniendo, creía que lo habías tirado.

-Nunca lo haría, por mucho odio que te tenía, es un regalo-digo sonriendo cogiendo la otra caja para dársela-Pues cuando abras esta vas a flipar.

Marco ríe y coge la caja, la abre y le empiezan a brillar los ojos.
Es el anillo con el que me iba a pedir matrimonio.

-Aquel día si fue una locura, menos mal que llegaste e hiciste que no lo hiciera.

-¿El que papi?-pregunta Tania intrigada-¿Ibas a comer césped? Mami me dice que no soy una vaca.

-Que va cielo, iba a saltar pero no lo hice-dice Marco riendo y mirándome-Mami estaba allí para que no lo hiciera.

-Mami es muy buena, ¿A qué es bonito el anillo?

-Si, es precioso-dice Marco sonriendo mirándolo-Una pena que al final no llegara para lo que era.

-Nunca es demasiado tarde-digo sonriendo y abre los ojos-Yo no te dije que no.

Marco sonríe ampliamente y se pone de rodillas delante mía.

-Papi, ¿Que haces?

-Lexa, ¿Te quieres casar conmigo...de una vez?-pregunta sonriendo y asiento-Prometo que nada de secretos de verdad.

Me pone el anillo y yo me lanzo a darle un beso, a lo que Tania pone cara de asco.
Nos separamos y Tania se tira encima nuestra para que la abracemos.

Ellos dos son lo que más quiero...son parte de mi vida.

Es parte de mi vida. Marco Asensio.Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ