Parte 9

1.3K 90 14
                                    

Lo sabia, sabía que él quería matar a mi bebé, lo tenía planeado antes de decírmelo, no puedo permitirlo, no puedo dejar qué lo haga.

¡No te lo voy a permitir!

Es mío, no voy a dejar que me quite lo único que me queda de él, de Ethan. Moriría si le pasa algo a esta criatura. Kendall esta enfurecido, sus ojos me miran como si fuera un fuego intenso, como si intentará quemarme con su mirada, pero no dejare que eso me amedrante, estaré firme con la decisión que tome de cuidar a mi futuro hijo/a.

Pongo mi cabeza en alto en señal de autoridad y valor.

─No voy abortar a lo único que me queda de él... ─mi voz fue firme─, para poder hacer eso, tendrás que matarme primero.

Kendall se puso más rojo de lo qué ya estaba. Pero no me importa, no voy a dejar que ahora quiera salirse con la suya, es mi bebé y yo, solamente yo, puedo decidir que hacer con esta criatura.

─¿Acaso me estas retando Lady Di?, ¿crees que no voy hacerlo?, ¿qué solo son palabras? ─Kendall preguntaba apretando los puños.

Sorbí mi nariz. 

Lleve mis manos a mi vientre.

─Esto que está aquí adentro ─toque mi vientre─, es una criatura que no será tocada por tus garras ─mis lagrimas rodaron por mi rostro─, no voy a dejar que lo toques.

Kendall paso sus manos por su rostro, se veía desesperado.

─¡No lo entiendes! ─gritó─, ¡Solo quiero que seamos felices tu y yo, sin intervenciones! ─Kendall dio un paso hacia mí.

Retrocedí, tengo miedo de qué quiera intentar algo en contra de mí.

Quiere que seamos felices, pero eso no puede ser, yo jamás seré feliz con él. Pero debo proteger a este bebé, debo hacer algo rápido, sino voy a perderlo, tendré que hacer lo que Ian siempre me dice, debo jugar su juego, si quiero ganarme su confianza, siempre quiero poder hacerlo.

Pero es difícil, es difícil hacerle creer al asesino de la persona que querías, que realmente es a él a quien quieres, pero si algún día quiero ganarme la confianza de Kendall, debo convencerlo de que quiero estar con él.

Suspire algo fuerte y lo mire intensamente a los ojos.

─Pero..., podemos ser felices aun ─susurre─, no importa que este embarazada, podemos intentarlo y ser felices juntos. Poder olvidar todo lo malo que paso aunque parezca imposible.

Mis ojos no se despegaron de Kendall ni un segundo, quiero saber si me cree, quiero saber si realmente cree el algo mis palabras.

Kendall me miro extraño. Hizo una mueca de confusión, me miro atento y se irguió.

─¿Por qué ese cambio tan repentino?... ─preguntó─, ¿crees que soy un maldito estúpido?

Una fina capa de sudor cubrió mi espina dorsal. Debo parecer convencida de mis palabras, debo hacer que esto sea real.

─Lo que digo es cierto, podemos ser felices los tres ─estaba desesperada─, podemos criar juntos a este bebé, no sabes si esto es una oportunidad de hacer las pases.

Kendall solo se quedó mirando mi rostro, no podía leer la expresión de su cara, era como si me analizara e intentara buscar algo culposo en mí.

Los segundos pasan y no dice nada, ya esto me está incomodando mucho, quisiera que diga algo, porque no puedo más con esto. Kendall resopla con mucho ruido y se va alejando de mí.

¿Qué significará esto?, ¿Se aleja por qué tengo razón... o... porque nunca apelé a su lado humano?

¡KENDALL! ─grite fuerte─. ¡Dime algo! ─exigí.

Sobreviviendo a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora