Parte 21

705 55 21
                                    


No veo su rostro a su totalidad, solo la parte de su boca, es una chica, y tiene una sonrisa hermosa. no sé quién es, ni vestigio tengo de su nombre.

Solo se queda ahí y me sonríe, por sus pocos razgos sé de antemano que no es Jade, no tienen ninguna similitud. Yo no me muevo, ni digo nada, siempre es así. Siempre es lo mismo. Veo su boca moverse, pero no la oígo.

Acaricio su mejilla y  pequeñas gotas caen en mi mano, a pesar de que he intentado verla a los ojos, no puedo, no sé porque no puedo verla. Es como si fuera prohíbido.

Esta llorando, pero.. ¿Por qué?, no le he dado ningún motivo, una suave brisa sopla y parte de su cabello negro revoletea juguetón por su rostro. ¿Cabello negro?, ciertamente no es Jade.

Ella sigue llorando y moviendo los labios, pero no la oígo, ni siquiera puedo decifrar lo que dice.

─¿Quién eres? ─pregunto.

Mis ojos se abren de repente, siempre es el mismo sueño, tres noches consecutivas tengo soñando lo mismo, y no encuentro explicación. Me rompo la cabeza intentando recordar quien podría ser pero nada viene a mi mente.

La única razón por la que no le menciono nada a Jade es porque no creí que sea algo relevante, pero ya que tengo tres noches haciendo el mismo sueño, creo que debería comentarselo, tal vez esa chica es alguna amiga nuestra.

La habitación está a oscuras, miro a mi costado y Jade tiene su cuerpo pegado al mío, ella me abraza con amor, ella me ha cuidado y ha sido muy atenta, pero apesar de todo eso, en mi corazón solo hay gratitud hacia ella.

He intentado de mirarla como un hombre vería a una mujer, pero no tengo sentimientos de amor hacia ella. tal vez solo necesito más tiempo, Jade es una buena persona, y creo que por ahí empiezan las cosas.

La abrazo más a mí y le regalo un beso en la frente. 

No te preocupes, haré todo por amarte."

***

Me remuevo en la cama estirando los brazos, y me impresiona que no me he topado con el cuerpo de Kendall, tanteo en la cama, tratando de dar con él, pero no lo consigo.

Abro los ojos, y me doy cuenta que estoy sola en la cama.

Me apoyo de mis codos, y enfoco la vista lo más que puedo para buscar a Kendall en la oscura habitación, la cual solo es alumbrada por la luz de la noche.

Pero no doy con él, hasta que miro hacia el balcón. Esta ahí, apoyado de espaldas, y esta fumando, es extraño, en el tiempo que tengo aquí, él no ha hecho eso. Me quito las sabanas, esta tan concentrado en sus pensamientos, que no capta ningún movimiento mío, a pesar de que esta de frente a la habitación.

Hace mucho frío, ya no llueve y el frío cala hasta mis huesos, no sé como puede estar ahí afuera sin nada en el torso, solo usa unos jeans. Me abrazo a mi misma para darme calor.

Camino unos cuantos pasos hacia él, hasta que se percapta de mí. Sus ojos se abren en sorpresa, bota el cigarrillo, y pasa sus manos por sus mejillas.

¿Estaba llorando?

¿Te pasa algo? ─pregunto colocandóme al frente de él.

Este solo niega, y me da la espalda.

─Ah, no sabía que lloras porque te gusta ─, suelto de pronto.

─Vete a dormir ─es lo único que me contesta.

Suspiro leve, por alguna maldita razón me importa su estado, creo que es por la curiosidad de saber que le pasa, tengo días viéndolo extraño, ya va la segunda vez que lo veo así de triste, la primera vez fue cuando me dijo que él sabe que he cambiado.

Sobreviviendo a tiWhere stories live. Discover now