Mi Chico Favorito.

-XXII-

Un par de ojos de color amarillo con esclerótica completamente negra se abrían poco a poco. Estos se veían cansados y sin mucha vida. Estaban un tanto enrojecidos y con enormes ojeras muy notables, parecía que la persona dueña de estos hubiera estado llorando de amargura toda la noche y que no haya podido dormir nada o muy mal.

*RIIIIIIIIIINNNNNNNG*

Sonó el despertador. Al parecer se había despertado antes de que esté sonará. Observó con furia el muy molesto aparato y de un rápido movimiento...

*CRASH*

Lo arrojó por la ventana.

—Maldita cosa ruidosa —dijo Mina con mucha molestia.

Se quitó las sábanas y reveló que estaba completamente desnuda, quién sabe por qué. Algo en ella no estaba bien, ya que tomó una toalla de color blanca que estaba por allí y se la puso alrededor del cuerpo y de muy mala gana salió de su habitación con rumbo al baño.

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El agua helada recorría todo su cuerpo y bajaba por este haciendo un largo viaje hasta el suelo en donde se dejaba llevar por el drenaje.

Ella mantenía sus ojos cerrados mientras apoyaba su cabeza contra la pared. Sus brazos estaban colgados como si no tuviera intención de moverse. Cosa que no podía hacer por más tiempo ya que era día de escuela.

De la nada apretó los dientes con fuerza mientras se mantenía inmóvil.

Seguramente era un recuerdo de algo que pasó recientemente.

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Kirishima había sido sacado de su casa a la fuerza y ahora era jalado de la mano por Mina por toda la calle. Este se dejaba llevar literalmente, ya que la chica de rosa hacía que el pelirrojo arrastrará sus pies por la acera, aunque él no sabía exactamente a dónde era llevado.

—Eh... Mina, ¿A dónde me llevas? —Preguntó con una sonrisa nerviosa.

Esta se detuvo de repente. Al instante no dijo nada, simplemente se mantenía inmóvil dándole la espalda al chico al cuál le empezaba a inquietar dicho silencio de la chica.

—Eh... ¿Mina? —La llamó.

Esta se dio la vuelta de una forma feliz y fugaz y con una enorme sonrisa de felicidad enmarcada en su rostro.

—¡Iremos a pasear cómo nunca lo hemos hecho en la vida! —Gritó esta de forma escandalosa.

Su grito tubo tanta fuerza cómo uno de Present Mic ya que Kirishima se movió un poco hacia atrás. Quedando su cabello más alborotado que de costumbre.

Tardó un poco en reponerse y cuándo lo hizo dijo con una sonrisa.

—Hey eso es genial hermana —dijo de forma amistosa.

—Sip, esa soy yo, Mina Ashido la mejor y más confiable amiga del universo —bromeó esta. Se puso al lado de su amigo y pasó un brazo sobre su hombro y lo abrazó de forma cariñosa, atrayendolo hacia ella cómo lo hacía desde hace años.

—"Ya veras Kirishima, después de lo que te haré vivir el día de hoy, serás un hombre hecho y derecho..." —Pensó de forma traviesa la chica.

Se había pasado la semana entera buscando en internet "¿Cómo ayudar a tu amigo a ser hombre y no un maricotas afeminado amante de los hot dogs". Si, con esas palabras la buscó.