·•Una fogata atípica•·

1.9K 175 44
                                    

Ella seguía con la mano en mi pierna. Soy nueva en esto ¿Qué debo hacer?

Para mal o para bien esa duda se solucionó cuando Estella miró a Eva, castigandola con la simpleza de una mirada.

Eva suspiró moviendo así su flequillo negro, retiró la mano de mi vestido, a lo que Estella sonrió. Lo curioso de esto es pensar en si ya pasó esto alguna vez, porque Estella parece estar acostumbrada a presenciar estos comportamientos en la mesa.

- Allison, Clara y Tiana. Ustedes son las nuevas aquí, por lo tanto les tendré más paciencia. Lo único que les pido es que se comporten, llevo años trabajando aquí, no ocurrió ningún accidente aún, ni espero que ocurra. Daré un par de indicaciones, Eva, te pido por favor que no tengas contacto físico con ninguna de las chicas, sueles ser muy... Cariñosa.

- Si claro... Cariñosa - Musitó Eva. Se tomó unos segundos para mirarme y sonreír, a lo que yo miré hacia abajo de los nervios que me generó.

- Celeste, cada años mejoras, eres una de las candidatas más fuertes, se nota que estás esforzándote, te felicito. Por el otro lado Soraya... Necesitas controlar la boquita, ningún hombre te va a querer así, menos el príncipe Agustín.

- ¿Quién dijo que busco a un hombre?

- Que chistosa es usted Soraya... Posee un sentido del humor tan particular - Respondió Estella, quién buscó otra presa para atacar con la palabra - Doreen, no es reina aún, así que le pido que deje de actuar como una, nada de esclavizarme este año, no es quién ¿Está claro? - La castaña giró los ojos, ahora Estella nos miraba a las nuevas con una sonrisa - Recuerden, son el futuro del reino, sin presión - Claro, sin presión, igual ¿para qué fingo?, como si me importara gobernar.

- ¿Podemos irnos? - Inquirió Tiana, nerviosa, aparentemente no disfrutaba de nuestra compañía.

- Claro que sí, vayan a la sala del segundo piso, hay mucha tela, aprenderán a coser por su cuenta.

- Seremos reinas, ¿Para qué queremos coser? Tendremos alguien que lo haga por nosotras, más bien, por mí - Pronuncia Doreen.

- Siempre es bueno agilizar la mente, aunque sea con estas tareas. Ahora vayan.

Nos paramos de las mesas, cada una por su lado, excepto yo y Clara, que ante la desconfianza que nos generaban las otras nos manteniamos pegadas.

¿Coser? Yo solo sé comer, no coser, por cierto, ¿Cuándo vamos a comer? Me ruge el estómago del hambre. Presiento que el resto de los días también serán así.

Sabía que la escalera era ancha, supimos caber las siete y subir al mismo tiempo, con algunos empujones y arrimones por parte de Eva, pero pudimos subir.

Una vez en la sala pude apreciar el trabajo que se había puesto en la misma.

Todo era mármol y más mármol, realmente algo maravilloso.
Mi casa tenía toques de mármol, pero no nos podíamos dar el lujo de cubrir nuestra casa con ese material. Aquí no escatimaban en gastos, excepto con la comida.

Había un gran sillón, con otros tres individuales, justo para las siete.

Tomé algo que parecía para coser, y con solo el silencio de la fogata comencé a imitar lo que Clara hacia, que desde mi perspectiva de novata parecía correcto.

En el banco grande estaban Celeste y Soraya, las que salieron juntas de la habitación, parecían ser amigas y enemigas a la vez, por un lado criticaban todo lo que la otra hacía, "Cosiste muy profundo" "La tela que elegiste es terrible" Y cosas por el estilo, y por el otro lado estaban muy pegadas, casi encima una de la otra.

No sé si era la única que lo notaba, pero además Soraya tocaba constantemente el cabello rubio de Celeste, puede ser por la envidia, ya que el de ella es negro y corto, quizás solo le gustó su cabello, pero es confuso, además Celeste parecía avergonzada y le sacaba la mano constantemente.

Tiana estaba en el asiento individual, como Clara y yo, cosía con destreza y rapidez, demostraba conocimiento en ello.

Eva no tenía idea de lo que estaba haciendo, lo de manos traviesas era cierto, sus manos hacían cualquier cosa, terminó destrozando la tela.

Doreen miraba con asco las agujas, si bien no era tan mala tampoco se destacaba.

El único ruido tal como cuando entramos siempre fue el fuego, la madera quemada, las cenizas cayendo, era un paisaje muy lindo.
Sin duda la decoración era rara, una estufa de madera en un segundo piso, que estaba decorado con materiales tan caros, y esto no se veía precisamente algo de valor, tenía un tubo que sacaba el humo hacia el exterior.
Es como que no debía estar ahí. Quizás el frío de la habitación era insoportable, porque no hay razón estética para hacerlo así.

Contemplé mucho la leña, hasta dejar de coser y simplemente descansar, la tarde se hacía presente. Estuvimos mucho tiempo sin cruzar ni una sola palabra, pero incómodo no sería la definición de ese momento, más bien, acogedor.

- ¿Queda mucho? - Preguntó Doreen.

- No hay una hora exacta para terminar - Respondió Tiana, en susurró.

- Espera... ¿Esto termina cuando cada una quiera? - Eva no necesitó de una respuesta al ver la cara de obviedad que tenía Tiana, seguramente era la única que sabía eso, puesto que todas tiramos un suspiro al aire. No había sido una actividad horrorosa pero definitivamente prefería comer en vez de coser.

- ¿Por qué no lo dijiste antes? - Doreen parecía molesta, se dirigió a Tiana de esa forma tan poco... Amigable. Ella por su lado se disculpó, pensó que ya sabíamos, la mayoría ya era vieja aquí y asumió que ya conocían del tema, pero no, resulta que es una nueva norma, de la cual solo Tiana sabía por haber estudiado antes de venir aquí... Que preparada.

- Bueno... Vamos - Soraya tomó de la mano a Celeste y se levantó, la última mencionada le sacó la mano bruscamente.

- Chicas, vine el año pasado, y el pasado, y el pasado, ¿Aún siguen con su papel de "No somos lesbianas y mucho menos mantenemos relaciones en la habitación de Celeste"? Ya no es creíble - Mencionó Eva. Con razón salían juntas de la habitación. Aunque parecen polos opuestos, una es muy correcta, parece que en serio quiere el puesto, y la otra es alguien que cuestiona las reglas, raro.

- No sé de qué hablas - Respondió Celeste.

- De Celeste lo espero, ¿pero de ti Soraya?... Puedes más que una mentira - Siguió Eva, Soraya evadió la palabra. Miró a Celeste, parecía decepcionada y salió de la sala.

- ¿Viste lo que haces? Ahora mi... Amiga... Está enojada conmigo - Celeste la siguió apurada, pero sin correr, parece que en serio no quiere quedar afuera del juego.

- Bueno, no sé ustedes pero ahora que se fueron las que ya están comprometidas sugiero de empezar a quitarnos las prendas, ¿Qué dices Tiana? Me gustan tímidas - Tiana pareció sufrir un colapso, tiró lo que sea que estaba cosiendo, muy lindo por cierto, y se dirigió a la sala con las demás.

- Eva deja de comportarte así, ningún año te funciona, acéptalo.

- Doreen déjame hacer lo que mejor hago, ligar - Dicho eso Doreen se alejó fuera de la habitación, con Clara no queríamos quedarnos en la habitación, lo supe cuando la miré, pero no sabíamos qué escusa dar.

- Nuevas... Soy Eva, aunque seguramente eso ya lo saben... Si me necesitan mi habitación está en el tercer piso.

Y con eso se retiró.

Entonces el rumor no era tan falso después de todo.

♔ Casa De Princesas ♔Where stories live. Discover now