Capítulo 13

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Ding ding
Ding ding
Dejo los libros del colegio que estaba completando encima de la mesa y volteo a ver a mi celular.
Me siento en la cama y lo reviso. Tengo un mensaje nuevo

Evan: Te veo en 45 minutos

¿Qué? Evan había salido muy temprano para arreglar unos papeleos en la ciudad. Y me dice por mensaje que me va a ver en 45 minutos? ¿Dónde? Aquí en la mansión?
Estoy a punto de escribir el mensaje, cuando mi celular suena de nuevo

Evan: En la plaza Six, que está frente al shopping.

Arrugo el ceño, porqué me quiere ver allí?
Mi celular suena por tercera vez

Evan: Por cierto, es una cita :')

Uffaaa, código rojo, código rojo, ¡código rojo!
¿Cómo se supone que me voy a arreglar con tan solo 45 minutos? ¡Es una cita y no tengo ni una hora!
Rápidamente voy a mi armario y empiezo a rebuscar entre mis ropas. Una de las ventajas de vivir con Evan es que cada semana renuevan las ropas de mi armario y lo único que debo hacer es buscar que ponerme sin preocuparme si ya me lo puse antes. En realidad no me importaría tampoco ponerme algo repetido, me criaron para ser humilde y eso es lo que soy.
Lo suave de una tela me saca de mis cavilaciones y lo retiro del perchero.
Es una vestido verde agua, con tiras en los hombros y un broche en medio del pecho. Paso mis dedos a través de éste y disfruto de su suavidad. Es de seda.
El vestido es hermoso, casual para una cita y muy femenino para llamar la atención de Evan.
Instintivamente me doy una palmada mental. ¿Desde cuando se supone que yo busco impresionar a alguien? Pfff, estúpido.
Sin esperar más voy al cuarto de a lado y presiono el botón, al instante se abre una puerta camuflada y me muestra la variedad de zapatos, zapatillas, tacones altos y muchos calzados más.
Me decanto por unos tacones altos blancos, que hacen juego con el broche del vestido y porque recuerdo que tengo unos pasadores para el cabello del mismo color para combinar
Echo un vistazo más al lugar y suelto una risita.
Este lugar es magnífico, en realidad es de personas de muy alta sociedad
Mientras me voy al cuarto de baño, pienso: Vivir aquí es magnífico claro, pero también es bastante incómodo.
Me quito la ropa rápidamente y entro bajo la ducha. El agua tibia relaja notablemente mis músculos y hombros tensos.
Es bastante incómodo porque siempre me andan diciendo como debo ir vestida para desayunar, almorzar y cenar. Me censuran por la forma en que como y me obligan a usar millones de cucharas, tenedores, cuchillos y demás. Osea, ¿para que se supone que ponen cuchillos y tenedores a lado de la sopa de pollo, siendo que no se va a utilizar? Es ridículamente estúpido. Mientras que Evan siempre sabe para que sirve tal o cual utensilio. Es frustrante.
Já, y ni siquiera todavía pensé en mis doncellas. Sí, exactamente, tengo doncellas que están a mis disposición, es como si la familia de Evan es como una clase de familia real y pensar en eso me da escalofríos.
Ellas casi siempre están revoloteando a mi alrededor esperando cualquier orden mía, es decir, ¿en serio? Yo nací pobre y aprendí a valerme por mi misma desde pequeña, pero que un día tenga a personas a mi disposición es algo que sale de mis manos.
Ellas también me enseñan como debo caminar y hablar. Con decencia, elegancia y sofisticación
Puff, como si yo tuviera esas cualidades.
Si no fuera porque le rogué muchísimo a Evan de que por lo menos me dejen ducharme sola, ellas estarían aquí lavandome el cabello y haciéndome masajes.
Un rubor potente de alza a mi rostro, jamás he dejado que nadie me vea desnuda. La ducha es algo demasiado personal y el pudor que tengo me impide dejar que ellas me vean o ayuden en la bañera.
Evan solo arqueo las cejas en señal de diversión ante mi petición, pero en sus ojos vi vacilación.
¿Porqué no quería dejar que haga por lo menos una cosa sola? Fue como ver algo de miedo, pero es ridículo, ¿de quien se supone que va a tener miedo?
Salgo de la ducha con la toalla, me seco el cabello y me visto.
Al terminar me miro al espejo, los tacones realzan mi figura, como si perteneciera a la familia real de verdad. El vestido me hace parecer esbelta. Pero falta algo. Miro mi cabello. ¡Eso es! Mi cabello.
Encuentro la secadora y arrugo el ceño. Yo no lo puse aquí.
Pongo los ojos en blanco
-Jaida, Jane!. - grito a la habitación. - sé que están aquí por algún lado
Poco a poco veo como se mueve la puerta del armario y salen dos jovencitas con cara de arrepentimiento
-Lo sentimos ama. - dice Jane.
-Supimos que look quería usar para su cita y quisimos ayudar. - dice Jaida
Instintivamente Arrugo el ceño.
-¿Cómo sabían que tenía una cita?
La cara serena de Jaida se descompone en una casi imperceptible sonrisa, mientras que Jane no oculta su felicidad y me sonríe completamente
-El joven amo nos contactó cuando salía, antes del amanecer y nos pidió que la vistiéramos porque iban a ir a una cita. - responde Jaida
-Exactamente ama. - secunda Jane
Jaida y Jane son las doncellas que están a mis disposición, no es que sean malas y por eso no quiero que estén al pendiente de mí, sino que son prácticamente de mi edad y son tan elegantes, pulcras que me incomoda que me enseñen como comportarme y que me vistan
Jaida es la mayor, tiene el cabello castaño en comparación a mi cabello rubio, casi ceniza y cejas muy buen perfiladas, es seria y se toma muy en serio su trabajo. Mientras que Jane es la menor, es idéntica a su hermana ya que son gemelas pero es lo opuesto a Jaida en cuestión de personalidad.
Jane es divertida y muy loca, siempre es muy alegre, no trata de ser sutil como Jaida y a veces se le pasa la boca de tanto hablar. Mientras que Jaida es muy callada y reservada
-Ya les dije que no soy su ama. - respondo algo contrariada
-Pero pronto.. - dice Jane pero calla abruptamente cuando Jaida le da un codazo un poco disimulado.
-Au!.-se queja mirándola con el ceño fruncido
-Calla!. - Le dice Jaida
Sin esperar a que Jane se pase más de boca la agarra por el codo y me mira
-Si no tiene más trabajo para nosotras. - dice Jaida aún con el agarre en el codo de Jane. - nos retiramos ama
Asiento con el ceño fruncido y rápidamente desaparecen de mi vista con murmullos de queja por parte de Jane y censuras por parte de Jaida.
Me quedo sola en el cuarto, Evan les mandó prepararme?
Mmmm, no lo sé, tengo un feo presentimiento
Sin esperar más conecto la secadora y apuro a mi cabello a secarse.
Termino y pongo ondas para que caigan libremente por mis hombros.
Sigue faltando algo: pasadores
Busco en el cajón y los encuentro. Me los pongo y tadaa!
Perfecto.
Saco mi celular y reviso la hora.
Me quedan unos minutos
Agarro mi bolsa, me lo pongo y abro la puerta.
Salgo sin siquiera mirar mi camino porque voy poniendo mi celular en el bolso.
Casi caigo hacia atrás por chocar contra un cuerpo duro
-Lo siento.- murmuro automáticamente
Y los brazos que me sostenían me sueltan
-No pasa nada. - dice. - no pensé que alguien saldría justo en este momento
Lo miro y la respiración se me atasca en la garganta
Esta vestido de calle, informalmente, pero los dientes blancos y esa sonrisa es hipnotizante. Esos ojos azules bailan con los míos y aparto la mirada
-¿Donde ibas tan deprisa?. - pregunta Ean curioso
-Tengo que ir al parque. - susurro
Pero al instante me arrepiento
Sus ojos saltan de la alegría y el entusiasmo.
Tengo que ir al parque junto a Evan, pienso pero ya es tarde. Ya abrió la boca para hablar
-Te acompaño. - me dice entusiasta y me ofrece un brazo como un caballero de antaño
-Ehhmmm. - dudo, como le digo que tengo una cita con Evan?. - yo..
-Qué?. - pregunta confuso
-Debo ir junto a Evan. - digo tímida. Y es el momento exacto en donde veo que el brillo de sus ojos se apaga y por un momento su sonrisa también.
Veo la decepción y la tristeza en él. Pero como recordando su fachada sonríe, puedo identificar perfectamente que es una sonrisa falsa, ni siquiera le llega a los ojos. Y ya no tiene brillo
-Está bien. - dice asintiendo.
Baja su brazo y está a punto de irse. Inmediatamente me siento culpable.
Yo le hice eso, yo le puse triste. Y yo lo debo arreglar
Evan no se va a enojar si es que lo llevo conmigo no? Ni siquiera es un almuerzo, simplemente es una salida al parque. Me muerdo los labios nerviosa y no registro cuando mis labios se mueven sin mi consentimiento
-Puedes venir con nosotros, solo es el parque. - digo esperando ver su gesto
Vuelve a estar como la primera vez que lo conocí, radiante y con ojos azules traviesos
Asiente feliz y me ofrece de nuevo su brazo.
Evan lo entenderá cierto?

(...)

Vamos en su auto y estoy sorprendida.
Simplemente no pensé en cómo podría haber llegado a la mansión y ahora lo sé.
Tiene un Audi RS7 de color rojo intenso, y no sé pero creo que va perfecto con su personalidad
Va parloteando sobre motores y autos que simplemente puedo asentir y sonreír. La verdad es que no conozco nada de automóviles y como él dice las cosas pienso que están en chino
Ni idea de tanta importancia tiene la marca ni la potencia pero como Ean habla es muy importante
De repente mi mente vaga lejos, un sentimiento sombrío se pega en mi pecho y me sacudo imperceptiblemente, no lo suficiente por lo visto
Ean me mira preocupado
-Te pasa algo pequeña?. - pregunta prestandome toda su atención. - lo siento estuve hablando mucho y no te escuché
Estoy a punto de abrir la boca para tranquilizarlo cuando veo la plaza
-Llegamos. - digo alegre y le sonrió para tranquilizarlo
Ean parpadea y también me devuelve la sonrisa
Aparcamos y bajamos del auto
Caminamos un poco y veo a Evan sentado en un banco
Voy corriendo junto a él y me tiro a sus brazos. Él se levanta y me atrapa fácilmente
-Evan. - digo y transmito toda la emoción que tengo de verlo. Por más que ya tenemos meses de novios igual me sigue emocionando.
Evan me devuelve la sonrisa y sus ojos verde monte me acogen con mucho amor.
Su mirada se posa a alguien a mi lado y me suelta bruscamente
-Que hace él aquí?. - pregunta amenazadoramente, toda alegría abandona su cuerpo y siento como el ambiente se tensa en segundos
-Vine a acompañarlos hermanito. - dice Ean y le da una media sonrisa maliciosa mientras arquea ambas cejas.
Los dos en segundos se retan con la mirada, el ambiente es tan denso que apenas puedo respirar.
¡Cristo! ¿Qué acabo de hacer?

El ContratoWhere stories live. Discover now