¿Qué pasaría si la persona más importante en tu vida te olvida? ¿Si los momentos a los que te aferras nunca existieron? Solo quedarías perdido en el tiempo. Jungkook es mucho más que solo alguien a quien Taehyung ama, es por quien lucharía incluso e...
Ups! Ten obraz nie jest zgodny z naszymi wytycznymi. Aby kontynuować, spróbuj go usunąć lub użyć innego.
“Taehyung” era el único nombre que se repetía en mi cabeza durante la cena. Taehyung y su espalda alejándose entre las frías y oscuras calles de Seúl. No giró, no me miró y yo decidí que lo mejor era disfrutar de la comida caliente en un restaurante de calidad en vez de irme con él, ignorando la escena estúpida que Park Jimin me había hecho en medio de la calle. Puede que me hubiera muerto de frío, que estuviera temblando al recorrer aquellas calles vacías, que conocía a la perfección, pero la calidez de su mano, las risas y nuestras conversaciones alejarían el helado ambiente a nuestro alrededor. Siempre lo hacía, sentirme en calma sin importar la situación. Él tenía razón, soy superficial y cruel.
—No comiste un bocado desde que llegamos. —Jimin aún sonaba algo molesto aunque trataba de ocultarlo— ¿Estas bien? ¿Fue por lo que te dije?.
Lo escuchaba a la perfección, pero sinceramente no tenía ganas de hablar. Estaba tan decepcionado de mi por como dejé a Taehyung en plena noche y en como me dejé manejar por el idiota delante mío que no tenía el orgullo para levantar la mirada.
—No… estoy cansado, solo es eso.
—¿Queres que te lleve a tu casa?.
—Si.
—Claro. No podía ser diferente.
Tomó de un solo trago el malbec de su copa y revoleó los ojos en señal de molestia, pero no me importó, estaba bastante enojado como para importarme un capricho de un niño mimado. Pagó la cena, que si no hubiera gastado parte de mi dinero en la película y Park no hubiera elegido un lugar tan caro, hubiera podido pagar mi parte para no deberle nada. Ya en el auto me dediqué a esquivarle la mirada interrogadora que decidió mostrar. Tomé mi celular tecleando un S.O.S a mi mejor amiga, quien ni siquiera leyó el mensaje y finalmente, completamente rendido los últimos mensajes de la noche.
Estoy yendo a casa, ¿podrías abrirme?. Por favor. || 22:54
Taehyung🍃:
Tenes llaves. || 22:54
Por favor Tae. || 22:55
Lo siento mucho. Si soy toda esa mierda que dijiste de mí. || 22:56
¿Qué estará haciendo Taehyung, habrá cenado o puedo llegar y cenar juntos?. ¿Estará jugando con la Play o escuchando música? Me dijo que cuando está solo le gusta…
—Kim Yugyeom. —me detuve para mirarlo, sorprendido de lo que había pronunciado— Todo esto es por él ¿verdad?.
—¿Qué?
—Todos estos días en los que estas raro ¿Es solo por él? —volteó a mirarme con una media sonrisa molesta, sarcástica y dolorosa tanto para él como para mi— Te acercas a Taehyung, te alejas de mi, ya casi no hablamos sobre lo que nos interesa, ¿es por él? ¿Por él tenes miedo a estar en una relación?.
—Jimin no hagas esto por favor.
Quería decirle que paré, que no quería que esa herida se abriera, pero no me escuchó.
—No entiendo como es que seguís pensando en él, me esfuerzo noche y día para ser mejor para vos, trato de darte todo lo que tengo, los mejores restaurantes, la mejor ropa, planifico las mejores citas.
—No necesito esas cosas, Park.
—¿Park? ¿Soy tu novio y me llamas por mi apellido? ¡wow! Sos un novio perfecto, Jeon.
Su sarcasmo dolía, ¿en qué momento dejó de ser esa persona tierna y comprensiva? El Alcohol te cambia o solo muestra como eres en realidad. En cuanto noté que frenó frente a mi casa quise abrir la puerta, pero le puso seguro.
—Quiero bajar.
—Quiero que hablemos.
—Yo no, Park.
—Yo si.
Sostuvo mi muñeca unos segundos para que me quedara, no me dolía sino ya estaría noqueado sobre el volante, lo único que buscaba era evitar conflictos.
—Bien, podes decirme todo lo que quieras. —suspiré pesado antes de continuar— No soy atento, tampoco soy cariñoso, a veces no me doy cuenta de los sentimientos de los demás, tampoco cuando lastimo. Pero soy sincero y directo con lo que me sucede, vos sabías lo que pasaba y fuiste quien eligió quedarse. Yo no te obligué a nada. —tomé mi campera y quité su mano de mi muñeca— Abrime.
—¿Y vos realmente pensas que lo que haces está bien? —apretó el volante y comenzó a gritarme— ¡¿Tan bien te cogió Yugyeom para que sigas pensando en él?!.
Mis nudillos comenzaron a doler cuando se estrellaron sobre su piel, por meterse en mi vida sexual, por retenerme en el auto como si fuera su perro, por exigir de mi algo que sabe no llegará a la fuerza, por esas razones su labio sangra sin parar. No soy alguien que utilice la violencia para solucionar su vida, sin embargo he llegado a sentir miedo de Jimin.
No tardó mucho en abrirme la puerta del vehículo quitándole el seguro, salí maldiciendo por la impotencia que me generaba el saber que alguien como él me haya infringido una decepción casi tan grande como el miedo. De pronto todos esos malditos pensamientos que solía tener regresaron, quizás si destruyó la vida de las personas que me rodean, quizás si soy lo que Jimin dice y lo que Taehyung piensa de mí, quizás por eso Yugyeom buscó a alguien más y Lisa ha dejado de responder mis mensajes.
Luego de entrar por la puerta de mi casa cerré la puerta a mi espalda comenzando a soltar eso que no quería que alguien viera de mí, las espesas lagrimas ahogándome y el peso de mi cuerpo cayendo sobre el suelo, mi cabeza entre mis piernas. Todo era difícil, todo era jodidamente difícil y mi madre no estaba para mi, como nunca estuvo.
—¿Jungkook? —su maldita voz otra vez viendo mi miseria— ¿Pasó algo? ¿Por qué lloras?.
—No es nada, solo…
—¡Jungkook abrime por favor, lo siento! ¡Quiero que hablemos!. —la voz de Jimin sonaba temblorosa y apagada.
—¿Qué te hizo?.
Por primera vez desde que nos conocimos la oscuridad en los ojos de Taehyung aparecía, se acercó a mi y tomó el picaporte de la puerta.
—Taehyung no es necesario. En serio.
—¿Jungkook que te hizo?.
—Nada, lo juro. —dije pegándome a la puerta para evitar que abriera.
—Movete Jungkook. —sus venas se marcaban en la mano que ejercía presión sobre el picaporte— Qué te muevas, dije.
—No te metas en mis asuntos, solo discutimos.
—Jeon no voy a pedírtelo bien una vez más, alejate de la puerta —su tono profundo y ronco de verdad me intimidaba.
Taehyung abrió la puerta de un solo tirón encontrándose con Jimin, todo en el demostraba la versión más agresiva y protectora que podía conocerse de Kim.
Y por alguna razón, me gustaba sentirme protegido por él.
—¿Qué queres?.
—Tengo que hablar con Jungkook, tengo que pedirle perdón —trató de entrar, pero Taehyung se lo prohibió— Solo unos minutos Tae, por favor.
—Mañana. Él no puede atenderte ahora.
—Acaba de entrar, no soy idiota. —Taehyung lo hizo retroceder dando pequeños empujones con su mano.
—No tenes permiso para verlo. Otro día Park, no estas bien, tenes que volver a tu casa. —Jimin rodeó el cuello de Taehyung poniendo todo su peso sobre él y susurrándole algo al oído que no pude escuchar— Lo digo en serio Park, —se volteó para poder entrar a casa de nuevo— No estas bien.
—¡¿Yo no estoy bien?! —se impuso Jimin en un tono quebradizo como si fuera a llorar— Vos no estas bien, siempre atrás de él como si fuera lo único que queres en el mundo. —cortó su habla por unos segundos para taparse el rostro y comenzar a llorar con más intensidad— ¿A mi no me queres Taehyung? ¿Solo él te importa?.
Taehyung retrocedió un paso tratando de volver a entrar por la puerta.
—Jimin c-creo que es mejor que vuelvas a tu casa, pero en taxi. —arrebató las llaves del auto que Jimin tenía en la mano derecha y con la otra comenzó a llamar un auto para que se fuera seguro.
Decidí que salir no era necesario, había un aura extraña entre mi novio y mi primo que me dejaba alejado del momento, era una extraña tensión entre ellos y por más estúpido que suene me dio celos. Luego de que Taehyung ayudara a Jimin a subir al auto y pagara por adelantado el servicio caminó decaído hasta la entrada. Lo vi pasar, aún con esa cara de pánico sobre lo que no pude escuchar. Las preguntas se acumularon, él está parado frente a mi, dándome la espalda, noto sus nervios y el sudor de su nuca desaparecer dentro de su remera, la curiosidad pica en mi lengua y no quiero preguntar, pero es necesario.
—¿Qué pasa entre Park y vos, Kim? —crucé mis brazos ofendido, lo que aumentó cuando él sonrió.
—¿Estas celoso de mi? —rió— Increíble, sos increíble Jungkook. —se dio media vuelta intentando dejarme solo.
—¿A dónde vas?.
—Que te defienda de un Jimin borracho no quiere decir que lo de hoy no me dolió.
Subió los primeros tres escalones, pero no lo dejé continuar.
—¿Qué te dolió Kim? ¿Qué dijera que sos mi primo, mi mejor amigo, casi mi hermano? ¿Tanto te dolió eso frente a tu amigo? ¿Por qué?.
En un movimiento rápido tapó mi boca con una de sus manos y me estampó en la pared de la escalera.
—Estas colmando mi paciencia Jeon. No vuelvas a repetir esas palabras, por favor.
Cualquiera pensaría que fue una situación violenta, pero fue todo lo contrario, su mano derecha tapó mi boca sin hacer demasiada presión mientras empujaba mi cuerpo contra la pared, pensé que me estrellaría contra ella, sin embargo fue detenido por su otra mano antes de impactar. Su tacto entre mi espalda y la pared beige de las escaleras se sentía como si fuera fuego, mientras sus labios pronunciaban palabras que para mi se escuchaban alejadas y sueltas debido a lo que me mantenía hipnotizado. Los observé ser relamidos a milímetros de su mano, lo único que los alejaba de mis labios. Eran lisos, no muy finos, vuelve a relamerlos y su mirada cambia, sus dedos pierden fuerza sobre mis labios y terminan acariciándome, es difícil competir con esta versión de Kim, solo logra que quiera bajar mi mirada y obedecer a cualquier pedido suyo.
—No llames a mi puerta, quiero estar solo.
Finalmente suelta mi espalda y quita la mano de mi boca perdiéndose en el final de las escaleras.
No sé qué hiciste Taehyung, pero mis sentimientos están tan confusos que deseo volver a conocerte, para no privarme.
