Capítulo 42

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- Y este es nuestro cuarto.

Poché abrió la puerta y Calle quedó boquiabierta al ver que la peliazulada había redecorado el espacio.

Las paredes seguían siendo blancas como cuando se lo mostró por videollamada, pero ahora había un par de cuadros colgados, fotos de ellas en las mesitas de noche, un sillón individual mirando hacia la ventana y una repisa con diferentes libros que Dani supo que eran de su novia.

- Cambié unas cosas para hacerlo más nosotras - María José sonrió y le tomó la mano - ¿Te gusta?

- Me encanta - Daniela le dio un beso en la mejilla - de verdad esto se siente como llegar a mi propia casa.

- Y mira esto.

Poché caminó hacia un interruptor sin soltar a Calle y cuando lo apretó un letrero neón iluminó la cabecera de la cama.

- Home - Dani lo leyó - lo amo.

- Y yo te amo a ti - la peliazulada se puso de puntitas y le dio un beso en la nariz - ¿Quieres ver el balcón en persona? Si creíste que la vista era increíble cuando te la mostré por video, te vas a querer morir cuando la veas con tus propios ojos.

Las chicas caminaron hacia la ventana, Poché la abrió y Calle sintió que estaba en una película. Estaba bastante oscuro, pero toda la costa estaba iluminada por el reflejo de los edificios y Dani logró distinguir la torre Glòries a varios kilómetros de ellas.

- Si yo fuera Claudia viviría aquí todo el año - la morena comentó sin quitar la vista del paisaje.

- Lo mismo le dije - María José rio con ternura - ¿Quieres ver el cuarto donde vamos a poner tu piano?

- Mmmmmm - Calle le soltó la mano, la tomó por la cintura y la apoyó contra el barandal del balcón - creo que tengo un par de cositas que hacer antes de eso.

- ¿Ah, sí? - Poché alzó una ceja y le pasó las manos por detrás del cuello - ¿Y qué cositas serían esas exactamente?

- Mmmmm no sé ... a lo mejor un poquito de esto.

Daniela le dio un beso en el cuello y luego acercó la boca a su oreja.

- Otro poquito de esto - le susurró antes de morderle el lóbulo.

Las piernas de María José temblaron y Calle la agarró con más fuerza.

- Y quizás un poquito de esto - Dani la miró a los ojos y empezó a bajar las manos lentamente por su espalda.

- Ok, suficiente - Poché le tomó ambas manos y la arrastró al cuarto - a la cama, señorita.

- ¿Así de directa? - Calle la molestó.

- Llevo semanas esperándote y no pienso perder un solo segundo, así que sí - la peliazulada se quitó la camiseta - así de directa.

Daniela sintió de inmediato cómo la temperatura corporal le empezó a subir. Siempre que Poché tomaba un rol más autoritario del normal, el cuerpo de Calle reaccionaba de formas extrañas.

- ¿Te vas a quedar ahí parada mirándome o vas a hacer algo? - María José preguntó a forma de reto cuando terminó de desvestirse.

Dani rio de forma coqueta y caminó hacia donde estaba la peliazulada. Conectó sus labios con los de ella sin aviso y la guió hasta que sus piernas chocaron contra el borde de la cama.

- ¿No crees que estás muy tapada? - Poché le desabrochó el pantalón.

- No sé ... ¿Tú qué crees? - Calle se mordió el labio sin quitarle la mirada de encima.

VAS A QUEDARTE || CACHÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora