Mundos Paralelos

Capítulo 20

Alrededor de Naruto ya se reunían un grupo de ninjas importantes. Habían intentado llegar a tiempo. Algunos jadeaban agotados. Otros solo vinieron absorbidos por la desesperada corrida de los demás. Y al ver la escena propuesta, comenzaron a acongojarse de recordar sus propias perdidas personales. Todos tenían alguien para enterrar al día siguiente.

Naruto en tanto, besó la mano de Tenten que aun sostenía con su propia palma. Mientras Sakura gimiendo de dolor, usó suavemente sus dedos para cerrar los ojos de la chica. El rubio colocó el brazo sin vida sobre el cuerpo que aún era sostenido por la pelirosa. Se puso de pie y cubriendo su rostro con ambas manos se alejó a un rincón oscuro. Todos lo miraban asustados. ¿Podría contener el dolor? ¿Soportaría la carga de odio que lo embargaba? El cuerpo de Naruto comenzó a temblar. Como atacado por constantes espasmos. Cayó duramente de rodillas al suelo. Sus brazos estaban cruzados en su vientre. Tosía y realizaba arcadas profundas como si el oxígeno no penetrara en sus pulmones. Se estaba asfixiando con los sentimientos del profundo dolor y rencor. Durante toda su vida, Naruto Uzumaki sufrió muchos momentos de decepciones y dolor. Pero lo que estaba experimentado en ese momento, era solo comparable a que alguien le estuviera arrancado el corazón a la fuerza. Abriéndole el pecho, la sangre salpicando y la sensación de perder un gran trozo de su alma.

El resto de los presentes se alejaron de la posición de Naruto un par de pasos. Como si el zorro demonio se manifestara frente a ellos. No había sin embargo, señales del chakra rojo. Solo el ahogo que era en definitiva, una representación de sentimientos que no le permitía la facultad de respirar. Casi un minuto después, cuando muchos temían que los efectos de la cercana batalla hubiesen actuado sobre Naruto para destruirlo, su cuerpo dejo de temblar. El rubio se puso de pie, giró para enfrentar a todos con una determinación reconstruida y fue directo hacia Sakura. La miró duramente, y no había ni rastros del dolor o las lágrimas que debería estar derramando.

- ¿Dime cómo era?- dijo Naruto con voz helada como la muerte.

-¿De quién hablas?- le contestó Sakura con voz quebrada.

-Sabes de quien hablo… -dijo Naruto áspero, con terrible dureza.

Sakura no respondió, simplemente agachó la cabeza evitando mirarlo. Estaba desesperada sí, pero no había perdido el juicio. Todo el mundo sabía que preguntaba por el asesino de Tenten. Naruto no se detuvo ante el silencio de la pelirosa. A continuación se acercó a Rock Lee y Kakashi realizando la misma pregunta. Lee lloraba amargamente, ni siquiera podía articular palabra. El ninja copia elevó la vista hacia Tsunade, que con la mirada le prohibió hablar. Naruto giró hacia Tsunade y su avance fue tan agresivo que por un momento pareció que la atacaría. Pero no, paso de largo a la posición de la Godaime, todo para llegar frente a Sai. El pálido pelinegro garabateaba un pergamino apoyado en su propia rodilla. Desde que Tenten dejó de respirar que Sai estaba concentrado en su dibujo. Se puso de pie y encontró a Naruto. El rubio tenía una mirada asesina. Pero Sai, sabía que no era dedicada a él. Naruto reformuló la pregunta y no parecía en sus cabales. Sai tampoco respondió con palabras. Solo y simplemente le entregó el pergamino abierto.

Su dibujo era perfecto, algo increíble si se considera que solo vio a ese hombre una vez y por escasos segundos. Pero Naruto pudo notar una cicatriz surcando la cara en diagonal desde la barbilla hasta la oreja opuesta. Eso lo identificaría. Sai acercó su cara a la del rubio y susurró algo en su oído. La única respuesta que recibió fue la mano de Naruto posándose brevemente en su hombro. Luego dio un par de pasos alejándose de Sai.

Todos comenzaron a llamarlo, a hablarle. Sakura se pudo poner de pie y se corrió acercándose a él. Presentía que algo terrible estaba por ocurrir. Shikamaru que había observado toda la escena le lanzó un par de objetos alertando al rubio con sus gritos. Naruto recibió lo que el pelinegro había lanzado sin siquiera dedicarle la vista. Sakura estaba cerca de abrazarlo por la espalda. Lo llamaba, quería retenerlo, no quería perderlo. Pero sus brazos se cerraron en un destello dorado. "Hiraishin no jutsu" .Naruto Uzumaki el nuevo "Relámpago dorado de Konoha" había dejado el campo.