Grown Up [Maylor]

«53»

Los días y meses fueron pasando. Roger estaba cómodo en su trabajo, mientras que Brian estaba terminando la universidad de forma exitosa. Era de los mejores de la clase y sus profesores aseguraban que sería un excelente astrofísico.

Y así los meses pasaron. Brian estaba alistándose para su ceremonia de titulación. Se acomodaba el traje, cuando sintió que Roger lo abrazaba desde atrás por el cuello y besaba su mejilla.

— Estás muy lindo, Bri —le sonrió.

— Y tú estás precioso —le respondió y se dio vuelta para tomar su cintura—. ¿Me ayudas con la corbata, por favor?

— Claro —sonrió y obedeció anudándola y acomodándosela para luego darle un piquito en los labios—. Estoy tan feliz por ti...

— ¿De verdad?

— Claro que sí, amor —sonrió tiernamente—. Estoy muy orgulloso.

— Yo te di un regalo cuando egresaste —dijo acercándolo más—. ¿Me darás algo?

— Claro que sí —aseguró—. Me gustó mucho el disco. Y los pantalones también.

— Te quedaron de maravilla —aseguró—. ¿Y qué vas a darme?

— Sabes que me gusta sorprenderte —sonrió misteriosamente.

— Y tú sabes que me cuesta esperar.

— Tendrás qué hacer un esfuerzo —besó su mejilla—. Tranquilo, te va a encantar.

— Cualquier cosa que venga de ti va a encantarme —dijo con seguridad.

— Quizás sea algo exagerado con esto.

— Lo dudo —dijo—. Vamos, dime.

— Quiero sorprenderte —sonrió un poco.

— Está bien, mi amor —accedió con una sonrisa—. Voy a terminar de arreglarme, ¿tú estás listo?

— Sí —sonrió—. Te esperaré en la sala.

— Está bien.

Tras un rato, Brian estuvo listo y ambos partieron en auto. El rizado fue a sentarse con sus compañeros.

— ¡Will! —lo llamó.

— ¡Bri, hola! —exclamó este saludándolo—. Bueno, oficialmente seremos astrofísicos. ¿Qué te parece?

— Pues genial —respondió obvio—. Pensé que no iba a lograrlo.

— ¡Claro que ibas a hacerlo! —repuso Will.

Entonces el chico se colocó a tensar, Lainey caminaba hacia ellos con una sonrisa, y los saludó a ambos con un beso en la mejilla.

— Finalmente nos graduamos —les sonrió a ambos.

— ¡Sí! —exclamó William—. Nos darán —Lainey lo miró extraño—. E-El título. Ya sabes. El cartón.

— Sé lo que es el título —rió un poco.

— ¿Y cómo has estado? —preguntó Brian.

— Genial —respondió ella—. Muy emocionada por ahora, comencé a buscar trabajo ya... presentaré el currículum la próxima semana.

— De seguro te darán —dijo William. Lainey volvió a mirarlo raro—. E-El empleo...

— Eso espero —rió un poco, se notaban a kilómetros los nervios del chico—. De todas formas, si no lo hacen, buscaré más lugares. He encontrado varios.

— Hey, fuiste la mejor de la clase —dijo Brian—. Van a contratarte.

— No voy a poner eso en el currículum —rió un poco—. Pensarán que soy una especie de altanera arrogante.