Capítulo 5~No lo toques

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Maratón 3/3 Para llevar mejor la cuarentena del coronavirus ❤️

Los hermanos estaban abrazados, las grandes manos de Kim alzando a Park ligeramente por su caderas y las pequeñas del rubio enredadas en el cabello negro de su Hyung relajándose con el aroma que desprendía su el mismo

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Los hermanos estaban abrazados, las grandes manos de Kim alzando a Park ligeramente por su caderas y las pequeñas del rubio enredadas en el cabello negro de su Hyung relajándose con el aroma que desprendía su el mismo.

Jimin inspiró más fuerte, queriendo embriagarse más del aroma familiar llevándose una gran decepción. Habían más aromas cerca de ellos que desconocía pero que podía identificar como de Alfas. Fue idiota por su parte querer definir esos olores, pues lo sintió de nuevo. El césped recién cortado y húmedo entrando por sus fosas nasales y llegando directo a su pecho. Su lobo, desaparecido, apretó en su centro.

Los nervios lo invadieron de golpe, tenía incluso miedo de ser expuesto así. Jeon JungKook estaba ahí, después de tres años sin noticias de ese estúpido Alfa que lo había sacado a bailar en la boda de su hermano mayor y le había alagado robándole el sueño durante meses. Tembloroso rompió el abrazo con su Hyung y se escondió tras su espalda.

-¡Pero qué cosita tan adorable! -Grita YunHo acercándose a los hermanos para tratar de volver a ver su rostro sonrojado.

-¡Aigo! Hacía años que no veía al pequeño Jimin, estás hecho un hombrecito. -MinGi se inclina de lado buscando también ver más del rubio que rehuye de un lado a otro de los Alfas.

-¡Ah! Incita a apretar sus mejillas. -SeongHwa lo lleva al límite cuando trata de tocarlo. El cachorro corre guiado por ese pequeño pesar en su pecho a esconderse tras el aroma que tanto había amado y odiado a la vez.

Los cuñados Kim abren sus ojos sorprendidos, los Alfas se incomodan y Jimin se acerca más a esa ancha y musculosa espalda que lo protege del resto tras soltar JungKook un gruñido protector.

-¿Acabas de gruñirnos? -Se queja y pregunta asombrado SeongHwa.

-No lo toquéis. -Advierte, en sus pupilas dilatadas se puede percibir el enfado de su Alfa interior.

-¡Jeon! Te lo agradezco, pero es mi hermano, yo puedo defenderlo. -Se queja Kim tratando de llegar al rubio. Jimin ansioso por seguir cerca de Jeon rodea su torso con sus pequeños brazos pegando así su pecho a la espalda del más alto.

-Kim, no lo vuelvo a decir. No lo toquéis. -La tensión era palpable, el Omega de Jin estaba asustado por la voz de Alfa de Jeon e intranquilo por su cachorro cuñado.

Los Alfas estaban sorprendidos y no dejaban de mirarse buscando una razón lo suficientemente coherente para aquello. Tae por su parte deseaba arrancarle la traquea a su mejor amigo por su actitud.

-¿Quién te crees que eres para retarme así con mi hermano? -Lo increpa de primera. -¿Vas a entrar en celo? ¿Es eso? -El azabache mira al pelinegro impasible y sin responder. Su lobo es quien está poseyendo su cuerpo ahora mismo. -¡Jimin es un cachorro! ¡¿Qué mierda te pasa?! ¡No es tuyo!

Todos, absolutamente todos los músculos del cuero de Jeon se tensan. Jimin tiene aún más miedo, ese revoloteo en su pecho le pide que relaje al Alfa en sus brazos. Ni si quiera sabe como hacerlo, su madre y Jin Hyung siempre sueltan sus feromonas para calmar a sus Alfas. Mas él no es Omega, JungKook no es su Alfa y no tiene aroma. Pero quiere hacerlo, desea tanto poder hacerlo.

Jeon, encerrado en su interior, se queja de la estupidez de su Alfa. Está armando un espectáculo por su capricho con ese cachorro rubio. Su capricho de aroma a gominolas, dulce olor de frutas y azúcar en forma de gelatina. Sus ojos se cierran y abren en segundos, siente como su lobo se calma y vuelve a cambiar posiciones con él.

-Minnie... -El susurro de su mejor amigo lo hace salir de su placer de dulce olor. -¿Estás...? ¿Eso es tu aroma?

Jeon se suelta del agarre de Park, se gira para encararlo y verlo a los ojos pequeños y almendrados. El pequeño tiembla y frunce su ceño confuso por ese aroma que emana de él, JungKook le sonríe tratando relajarlo y el rubio parece leer su mente.

Sus lobos lo acaban de gritar en voz alta, pero parece que nadie de su alrededor quiere darse cuenta.

Ambos son destinados.

Destinados separados por los cuñados Kim intranquilos por ese aroma tan dulzón que no saben identificar y que emana de su pequeño cachorro.

Eterno cachorro (KookMin) (Omegaverse)Where stories live. Discover now