Eterno cachorro (KookMin) (Omegaverse)

Capítulo 23~ Post Fiesta (Parte 3)

JungKook había conducido su carísimo coche hasta las afueras de la ciudad, a una zona alejada de las luces que siempre bañaban las noches de Seúl.

-¿Te gusta? -Le pregunta una vez apaga el motor a Jimin mirándolo observar por su ventanilla las estrellas. Este asiente emocionado.

-¿Podemos salir fuera? -Pregunta girándose para ver ilusionado y con brillo en sus ojos al contrario. Kook sonríe y baja el techo plegable de su deportivo. Jimin sonríe sin más amplio haciendo desaparecer sus avellanados ojos. JungKook echa el respaldo de su asiento del todo hacia atrás y con agilidad y fuerza de Alfa carga fácil al Omega hasta tumbarlo sobre su cuerpo. La pequeña espalda delgada y blandita de Jimin queda recostada sobre el fornido y grande pecho de Jeon. -Mira, esa es la osa mayor y allí está la constelación de Hércules. -Comenta señalando hacia uniones de estrellas.

-¿Te gustan las constelaciones? -Cuestiona rodeando entre sus brazos el plano vientre de Jimin.

-Estudié mucho sobre la madre luna y las estrellas para saber porqué era un cachorro sin aroma desde pequeño, después lo hice porque seguía siendo un cachorro a tanta edad. -La vergüenza es palpable en su tono de voz al confesar aquello. Kook con cariño acaricia su estómago sobre la ropa.

-No, Mochi, eres perseverante. -Alaga inclinando su cabeza para ver el perfil delicado del Omega sobre él. -Buscabas una razón a ello, con la ciencia de la Luna.

-Al final terminó gustándome, sigo leyendo sobre ella. -Susurra relajado al no sentir burla en JungKook sino orgullo. -Hay muchas historias. Creo que podría dedicarme a la interpretación de la luna y las estrellas.

-¿Y por qué no estudias esa carrera? -Pregunta ilusionado con el tema, adora la inteligencia de las personas. -Sé que es complicada y por eso hay tan pocos aurores, pero tú ya tienes un gran camino labrado. -Jimin lo escucha entrelazando sus manos con las grandes del Alfa. -Además podrías aportar desde tu experiencia con la falta de aroma.

-¿Tú crees? -La emoción de sus palabras calando en su corazón. Pocas personas sabían su amor por las constelaciones y su estudio privado de ellas. Por lo que, uno de los pocos que sabía, lo apoyara era gratificante. JungKook asiente escondiéndose en su cuello antes de besarlo.

-Mi Omega; tierno, inteligente y sexy. -Susurra rozando sus labios contra el foco de aroma. -Si mi lobo ya ama al tuyo déjame decirte que el humano va en camino de enamorarse también. -Sus corazones acelerados se escuchan perfectamente en el silencio de la noche y el lugar.

-Mi Alfa ya tiene al humano y al lobo enamorados. -JungKook sale entusiasmado y sorprendido de su escondite.

-¿Cuándo te enamoró mi personalidad? -Cuestiona, hacía menos de una semana que salían juntos y no habían podido ni pasar más de una hora juntos.

-Cuando con diez años empezaste a llevar chocolates que TaeHyung odiaba a casa para compartir con él porque sabías que a mí me encantaban. -El Alfa se vuelve a esconder sonrojado, sonriendo, sobre la tibia piel de su cuello haciéndole cosquillas.

-¿Cuándo te diste cuenta de eso? -Su voz suena temblorosa, el Omega ríe por haberlo avergonzado.

-Eras muy obvio dejándolos siempre lejos de vosotros cuando justo yo pasaba por allí. -Se encoge ligeramente de hombros obligándolo de nuevo  abandonar su cuello. Con cuidado, y con ayuda de Kook, comienza a girarse para quedar cara a cara con el castaño.

-Solo quería mimarte, siempre voy a querer mimarte.

Esa confesión adorable para Jimin y sincera para JungKook termina con un beso lento y delicado. Sus labios se sentían encajar a la perfección, al igual que sus cuerpos uno sobre el otro. Ellos eran perfectos juntos.