¿Evans?... No, Peverell y ¿Serpientes?

Capítulo 42

Harry caminaba por los pasillos con su hermana a su derecha, Rómulo y Hermione a su izquierda con los merodeadores tras ellos, Harry debía admitir que estaba más atareado de lo que esperaba, e incluso Lily ya había debido de jalarle o empujarle para evitar que chocase contra alguien mientras escribía en un pergamino lo que les habían pedido, el negocio había empezado como un pequeño proyecto, lo comentaron via carta con su tía y parecía encantada con la idea, así que ahora, con solo semana y media en labor, ya estaban recibiendo peticiones de casi todo el  colegio.

— Malaquías Jefferson de Hufflepuff pidió pastel de banana y chocolate, piensa tener un picnic con su novia —Le recordó Hermione que se había vuelto una de las partes más cruciales en la operación, gracias a su mente y memoria maravillosa, que adoraba en cualquier vida en la que se encontrasen, como los alumnos no parecían haber captado que no podrían memorizar más de 100 pedidos sin tener pergamino a mano, la joven bruja sí había podido memorizar casi la totalidad de los pedidos.

— No olvides pedirle pastel de cuádruple chocolate, no vaya a ser que necesitemos comprar a Remus… —Proclamó Rómulo antes de recibir un codazo de parte de la bruja que con la mirada le dijo que había problemas, un escaneo rápido le hizo ver que su tía McGonagall estaba suficientemente cerca y había parado oído ante sus palabras— Para invitarle a Remus para ayudarle a recuperarse cuando se enferme, mira que tiene mal sistema inmune ese muchacho —Tras unos segundos dubitativos pareció que se creyó su mentira y siguió su camino.

— Yo sigo pensando que no está bien todo esto, tenemos que esperar mucho para recibir golosinas —Musitó Peter por lo bajo, aunque el trio dorado sí que lo había escuchado.

— Yo solo sé que le robare de su dotación privada a Harry —Declaró Sirius con una sonrisa ganándose un golpe juguetón, o al menos así lo interpreto el Black, de parte del chico de ojos esmeralda, los merodeadores vieron a cierto alumno que había pasado a su alumno con cierta prisa, James emitió una leve tos, Sirius asintió a su lado mientras Remus volteaba a verlo para después asentir, por último los tres vieron a Pettigrew y este asintió tembloroso.

— Chicos, nos olvidamos algo en los invernaderos, nos encontramos con ustedes en la sala común en un rato —Señaló James con una sonrisa antes de darse la vuelta acompañado por el resto de los merodeadores

Harry solo enarcó la ceja antes de compartir una mirada con los otros dos miembros del trío de oro, estos solo le devolvieron un gesto de confusión, para ninguno de ellos había pasado desapercibido el intercambio de parte de los merodeadores, lo que no entendían es qué es lo que tramaban hablar con Severus Snape como para seguirlo cuando pasaba apurado a su próxima clase.

Y tampoco tenían tiempo de averiguarlo, de todas formas, sabía que Severus estaría más que gustoso de contarle lo que pasaba sí ellos le hacían algo. 

Mientras tanto...

Los merodeadores en cuanto se alejaron lo suficiente de sus compañeros leones comenzaron a correr detrás de Severus, lograron arrinconarle tras un par de minutos, sabían que no se detendría si le llamaban, no después de lo que había ocurrido cuando se encontraron con esos alumnos que le habían golpeado, por lo que James y Sirius debieron de apurar el paso para cerrarle el avance bloqueando el seguir mientras que Peter y Remus bloqueaban la salida.

— ¿Ocurre algo, Potter? —Preguntó con una mirada que advertía que no esperaba nada bueno, cierto era que habían llegado a una especie de tregua pero ninguno de los dos había olvidado su pequeña disputa en el tren lo que había provocado una relación tensa que tal vez tardarían en relajar.

— Seamos directos, queremos que nos digas el nombre de quienes te atacaron el otro día y nosotros nos encargamos de hacerles una broma —Sentenció James directo, sabía que más que amigos eran más bien conocidos, pero era amigo de los Evans y prefería limar asperezas como había hecho con Harry.