ENCONTRÉ MI ONE PIECE (AcexLectora)

26. Venganza

Yara abrió los ojos pesadamente y se encontró a si misma acostada en una camilla en la enfermería. A su lado izquierdo estaba Ace sentado en una silla y apoyado en la cama, durmiendo. A su lado derecho y un poco más alejado estaba Marco, durmiendo también.

Se movió con dificultad bajo las frazadas, despertando a su esposo.

-¡Yara! -exclamó despertando- ¿Estás bien? ¿Como te sientes?

El jaleo también despertó a Marco, que se acercó rápidamente.

-Bien, estoy bien -respondió- Solo me duele un poco la cabeza.

Marco procedió a tomarle el pulso y puso su mano en su frente para chequear la temperatura.

De un segundo a otro, Yara recordó todo lo que había pasado.

-¡Thatch! -exclamo ahogada- ¿Dónde está? ¿Está bien?

Ace y Marco se miraron angustiados y nerviosos, sin saber que decirle.

-No...-dijo comenzando a llorar- No puede ser...

Ambos la abrazaron.

-¡No! -lloró- No pude salvarlo, no pude...

-¿Quién hizo esto? -preguntó Marco al borde de las lágrimas.

-Fue Teach -sollozó la chica- Tenía poderes de una fruta del diablo, debió robar la de Thatch...y lo...lo mató -cubrió su cara con su mano, sintiendo las lágrimas caer sin cesar- ¡No pude salvarlo! -gritó- Estaba vivo. Estaba vivo cuando lo encontré. Y no pude...no pude enfrentarme a él, no podía creer que había hecho eso. Podía matarlo, pude matarlo en el momento y mi cuerpo no me respondió, no pude pelear. ¡Soy una mierda!

-No, tranquila...-le dijo Ace intentando secarle las lágrimas.

-Perdónenme, perdóname Thatch...

Los tres lloraron por mucho rato, intentando apaciguar el dolor que ardía en sus pechos. El dolor de perder a un amigo, casi hermano, a manos de una feroz traición.

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Barbablanca, quien se había enterado de los sucesos horas atrás, dio la orden de no salir a buscar a Teach. Ace se opuso.

-¡Soy su comandante a cargo! Iré por el y vengaré la muerte de Thatch, esto no puede quedarse así -decretó Ace.

-No me desobedezcas mocoso -dijo tajante su capitán.

-Es mi deber, padre -dijo Ace retirándose- No puedo dejar que se burlen de ti de esta forma.

Yara, quien estaba presente en ese momento, se sentía culpable. Si alguien debía ir tras Teach, era ella, por haberlo dejado escapar y asesinar a su amigo.

-Acompáñalo -le dijo Barbablanca.

-¿Eh?

-Que lo acompañes. Sé que también quieres ir, no estoy de acuerdo, pero si va alguien prefiero que vayan ambos. Convéncelo de que no vaya, y si no resulta, cuídalo y que no haga nada estúpido.

-P-padre...-suspiró Yara, tenía razón- ¿Y tú? Debo cuid...

-Tengo enfermeras y Marco puede encargarse, haz que se quede o ve con el.

-Lo haré.

Dicho esto, fue a su habitación, donde encontró a Ace de espaldas armando un pequeño bolso.

Este volteó a verla.

-No intentes detenerme, por favor -dijo y volteó otra vez, continuando con lo que estaba haciendo.