010 - i

20.3K 2.5K 1.3K
                                    







No hay forma específica para describirlo.

Jimin está jodidamente avergonzado.

Se la ha pasado con las mejillas sonrojadas, los ojos puestos en cualquier punto de la habitación, y, de vez en cuando, levantándola para dar pequeñas miradas furtivas hacia una persona en específico, lo cual no debería estar haciendo ahora si se pone a pensar en el lugar y la circunstancia que se encuentra: una reunión de altos mandos.

Estaba seguro que su cerebro intenta recordarle eso, pero el enfoque se pierde en algún punto de su mente cuando siente esos ojos sobre él.

Es demasiado fácil saber que Yoongi le estaba mirando, porque siente como si quemara en cierto punto, y eso no hace más volverlo incómodo, expuesto, tragando duro por los nervios cuando siente su garganta seca, como si fuera la presa de algún depredador mirándolo a la lejanía, esperando por cualquier movimiento antes de atacar.

No puede evitar pensar en todo lo que habían pasado, una ola de recuerdos, de hace días atrás llegan a él y le arden la piel, específicamente en la zona de su cuello.

Quería concentrarse, pero su imaginación está constantemente golpeándolo, y Jimin ahora está levantando la vista sólo para que sus ojos se encuentren con los del alfa, notando de pronto que hay una sonrisa suave deslizándose por el rostro de Yoongi, claramente, prestando nula atención a la reunión.

Jimin le hace una mueca como "eres el líder ¡¿Podrías por favor ignorarme y prestar atención?!"

Pero es obvio que Yoongi no lo entiende, ni lo escucha y en realidad, Jimin ni siquiera hace caso a sus propias palabras. Es interesante la forma en como ambos se miran, pareciendo olvidarse del resto, es realmente interesante ver a Jimin no encontrando la fuerza ni los motivos para desviar la mirada del rostro ajeno, como si estuviesen compartiendo un secreto único entre ambos, aunque bueno, sí existe un secreto.

Entonces Jimin siente otra mirada encima de él, y cuando gira sobre su costado puede notar a Jin observándole con ojos juzgadores y con una ligera pizca de enojo en sus cejas fruncidas, como si estuviese tratando de decirle que parara su mierda y prestara atención de una buena vez.

Su rostro arde muchísimo más que antes, y quiere abofetearse de lo tonto y desconcentrado que es, así que simplemente se dedica a maldecirse a sí mismo antes de volver a colocar atención a lo que estaba ocurriendo a su alrededor.

Es ahí cuando lo nota, cuando levanta la mirada y ve que no es solo Yoongi quién lo mira. Jimin los reconoce, son los capitanes Chanyeol, Yongsun, Seungcheol, quienes se encuentran sentados justo frente a él.

Y Jimin sabe, sabe lo que ellos ven, no es su rostro en sí, sino que es el parche que cubría parte de su cuello, donde debajo, llevaba una nueva marca, una que cicatrizaba lentamente.

Los lobos son una raza preocupada por los de su alrededor, sienten el peligro y son bastante intuitivos, y a pesar de que Jimin no parecía presentar algo que causara preocupación, es obvio que un parche, justo en la yugular de su cuello, iba a causar intrigas.

Nadie sabía sobre la mordida, solo su familia y la mano derecha del líder, pero ambos habían acordado que no tenía sentido alguno mencionarlo porque no estaban celebrando nada. No era intimidad, no eran una pareja, no era un acto de amor, no era algo de lo que se sintieran orgullosos.

ÓNICE #1; yoonminWhere stories live. Discover now