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¡Nana!

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¡Nana!

¡Señorita Nana!

¡Nana!

—Esa mujer no está en ningún lado —se quejó el rey rubio, sentado sobre su caballo mientras que los guardias se esparcían por el bosque en busca de la mencionada, gritando su nombre

El bosque estaba colmado de guardias, caballos y demás siervos buscando a la costurera que, no había dejado ni un solo rastro por alguna parte.

El rey se sentía frustrado, aunque estaba aquí por su propia voluntad, no estaba del todo contento con buscar a una simple costurera. Pero, tenía algunas motivaciones en mente en este punto.

—Obligatoriamente debe estar por aquí, si no está en ningún lado de la capital y tampoco fue hasta el pueblo, debe haberse quedado por aquí —Dijo la princesa Inés, ubicada junto al rey también sobre su caballo.

Esta miraba hacia los alrededores con atención, frunciendo el ceño mientras sujetaba las riendas del caballo, observando el área detalladamente y, mirando a los guardias moverse por el bosque llamando por el nombre de la costurera.

—¿Cree que se haya perdido? —Preguntó el rey Min a la que estaba a su lado, mirando los diferentes puntos donde había antorchas en movimiento por todo el bosque, siendo claramente sus guardias con las antorchas en la mano en busca de la chica.

—¿Ella solía estar mucho por aquí? —Le respondió con una pregunta la castaña clara, mirando de reojo al rubio.

La princesa tenía un mal presentimiento, por lo que sabía, esa costurera llevaba toda su vida en el palacio, debía conocer todos los alrededores y las áreas cercanas. ¿Existía realmente la posibilidad de que se hubiera perdido en su propio hogar?

Le preocupaba más que se hubiera lastimado o, tal vez, el golpe en la cabeza, si terminó afectando su bienestar más de lo que pensaron.

—Sólo algunas veces, ella siempre ha estado metida en el palacio —Respondió el rubio, mirando al príncipe Kim buscando junto a los guardias.

Ella asintió lentamente, tal vez sí se había perdido.

—Entonces tal vez sí se perdió, seguro no conoce el lugar y estará en...-

¡¡AYUDA!!

Se escuchó un grito a lo lejos, lo que seguramente fue una voz femenina, hizo a todos estremecer y sobresaltar.

Los guardias reaccionaron casi al instante ante el grito de auxilio y, no tardaron en mirarse entre sí, señalando la misma dirección de dónde parecía haber venido aquel grito desgarrador.

The Min Dynasty [Min Yoon-Gi]Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon