Mi Capitán, Trafalgar Law ( Tu x Law )

Una batalla apasionante -cap.51

Llegar al campo de flores de Doflamingo fue difícil, atravesamos hasta más miembros de la familia de Donquijote,  más que nada fue gracias a Zoro quien se quedó luchando con Pica y a Bartolomeo quien hizo una escalera hasta dicho campo, dónde estaba Rebecca, la chica pelirosada quien tenía la llave de mis esposas. Lo peor de todo es que a cada segundo aparecia un cascanueces gigante tratando de aplastarnos con su mandíbula y no fue en el último segundo en el que uno nos atrapó a mi y a Mugiwara-ya, en su boca y justo en aquel momento Luffy tomo la llave que tenía Rebecca.

Fue cosa de segundos en dónde Mugiwara-ya pudo liberarme.

-- Room...

Dije  para abrir un campo y partir el cascanueces en miles de partes  con unos simples cortes de mi Kikoku (así se llama la espada de Law por si algun@s no sabían)

Al llegar al lugar nos dimos cuenta de que Rebecca no estaba sola, había un combate entre Diamante y Kyros, el soldado de una pierna.

-- ¡Por fin los alcanzamos --Dijo Luffy a duras penas por la cantidad de kilómetros que había corrido.

-- ¡Y por fin soy libre! --grite emocionado por quitarme aquellas esposas molestas.

-- ¡Hemos llegado al cuarto nivel, dónde está Mingo --grito Luffy -- y en dónde está...

-- ¡Dónde está _______!  -- Grité.

En el momento en que íbamos a entrar al castillo, Diamante trato de detenernos, pero Kyros, el soldado nos cubrió la espalda para que Mugiwara-ya y yo pudiéramos rescatar a _________ y derrotar a Doflamingo.

-- vamos Mugiwara-ya, no hay tiempo que perder --dije mientras caminaba a paso apresurado al castillo que estaba detrás del campo de flores.

-- ¡Si! -- grito Luffy animado como siempre.

En lo que íbamos corriendo hacia el castillo, en un descuido de Kyros, Diamante nos atacó. Pero gracias a mi habilidad "Shambles" aparecimos en las puertas del castillo.

-- ¿Llegamos? -- pregunto inocente Luffy.

-- Si, por fin llegamos -- Respondí.

-- ¡Que habilidad tan útil! -- Dijo Luffy quien se levantaba del suelo ya que se tropezó al usar "Shambles"

-- Si, pero también me agota. Tal ves el que tuviera puestas las esposas de Kairouseki... Y que me cargases hasta aquí no fuese tan malo después de todo, pude acumular energías --mientras le explicaba a Mugiwara-ya usaba nuevamente mi habilidad pero en mi, para quitarme las balas que me había disparado Doflamingo en la entrada del coliseo. Y al mirar las balas ví de que eran de plomo -- ¡Ese bastardo uso balas de plomo a propósito!

Pero fue cosa de segundos hasta que la Luffy quiso hacer todo a su manera, quería meterse al castillo, gritar como feriante y gritar el nombre de Doflamingo para pagarle el trasero.

-- ¡Patearle el trasero a alguien es tu respuesta a todo! --le grité a Luffy.

-- ¡¿Y eso que?! ¡Es más fácil así!

Y en lo que discutíamos, apareció una pequeña niña, llorando, tenía cabellos celestes, llevaba una canasta de uvas y una corona de juguete.

Se había acercado a nosotros llorando del miedo, al parecer por lo que contaba había perdido a sus padres. Nos pidió ayuda, pero me parecía sospechoso de un principio...

-- no le prestes atención --Le dije a Luffy, pero la niña entro a romper a llorar aún más fuerte.

-- ¡Este tipo me cae mal! -gritaba la niña.