Capítulo 90

19K 1.7K 1.4K
                                    

-¿A dónde me llevas?-.

-Has ido a ese lugar- contestó riéndose -no te asustes-.

Alcé mis cejas -eso me hace preocuparme más-.

Volvió a reír -____, haba en serio, no te asustes, no es la gran cosa realmente, además no es como si fuera a matarte-.

Ladeé la cabeza -bastante justo, pero ya en serio ¿a dónde vamos? Puede que no lleve mucho tiempo aquí en Swellview pero sé que nunca he estado aquí- miré a mi alrededor -reconocería este lugar-.

-Solo, sigue caminando-.

Después de habernos ido de la Capi Cueva, con Ray a nada de asesinar a Schwoz solo por el simple hecho de haber destruido su katana, Henry y yo salimos de ahí lo más desprevenidos que pudimos, tratando también de no involucrarnos, ya que si lo hacíamos, se convertiría en una guerra de nunca de terminar, algo que en serio no era necesario.

Como sea, cuando salimos de Junk N' Stuff, Henry había comenzando con el tema de ir a su lugar misterioso, cosa que me estaba dando un poco de escalofríos ya que íbamos por un rumbo que nunca había pisado por Swellview, y más porque era un camino lleno de tierra, y con como si estuviéramos escalando alguna colina, porque sin duda era un lugar alto.

Habíamos estado caminando por más o menos 15 minutos, mas sin embargo, si soy completamente sincera, parecía una eternidad.

-De acuerdo- paré mi paso en seco -¿a dónde vamos?-.

Él volteó a verme y dejó de caminar -es una sorpresa, lo verás cuando llegamos-.

-Henry, hemos estado caminando por minutos-.

-Y te toca esperar más, andando-.

Suspiré -tan solo, dime en que parte de Swellview estamos, creo que puedo ver Neighbour Ville desde aquí-.

-No es Neighbour Ville, es solo las afueras de la ciudad, ya sigamos, ya casi llegamos-.

-De acuerdo-.

Creo que en definitiva debía comenzar a hacer más ejercicio, al menos volver a tenis como en San Diego, solo que aunque quisiera, el trabajo en la Capi Cueva, y Junk N' Stuff, era demasiado demandante, más que nada por el adulto inmaduro de Ray... si.

En fin, Henry y yo estuvimos caminando durante cinco minutos más, pasando entre ramas, aún un poco de tierra, y una enorme cantidad de árboles, hasta que por fin él chico rubio que venía frente a mí se detuvo en una zona donde no había absolutamente nada, solo unas placas enormes de metal frente a nosotros, con unas barras del mismo material deteniéndolas, las cuales me daban una idea del lugar donde podíamos estar.

Y que para nuestra buena suerte, hacían que el cálido viento de verano se detuviera.

Fruncí mi ceño un tanto concertada ante la situación, mientras que Henry se giraba hacia mí con una enorme sonrisa en su rostro.

-Ya llegamos- dijo él con emoción.

Asentí -¿dónde estamos?-.

-Pues, no había venido aquí desde que tenía 14, cuando recién había comenzando a ser Kid Danger- empezó a decir tomando mi mano -y no había regresado desde entonces-.

Con mi mano entrelazada con la suya, con cuidado nos dirigimos al otro lado de donde estaban las placas de metal, dando vista a lo que jamás creí ver en toda mi estadía aquí, causando que una ola de escalofríos apareciera por mi columna, una sonrisa involuntaria, y por último el sentimiento que había estado en mi cuerpo desde el día de la cena con el novio de Piper.

My Girl || Henry Danger [#1]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora