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Jungkook estaba parado frente a la ventana principal de la sala, sus ojos estaban fijos sobre el rubio de cabellos largos que jugaba y reía encantado con el agua que regaba las flores. La noche anterior no había tenido un gran día y no pudo apreciar el bello rostro de ese chico por mucho tiempo ya que su rabia lo había segado. Pero ahora que lo veía era tan increíble. Sus facciones finas con esos ojos azulados y esa sonrisa radiante, su piel cremosa y pálida, le atraía sin duda. Sin embargo no lo conocía y lo poco que sabía de él era por Seokjin, claramente debía presentarse correctamente y hablarle como todo caballero, solo que cuando estuvo dispuesto a salir una voz a sus espaldas lo frenó.

-¿Es hermoso, cierto?- dijo Seokjin parándose al lado de el mientras ambos veían a Jimin oler las flores del jardín. Jungkook asintió- ¿Te atrae cierto? Pude verlo ayer, tu brillo en los ojos al verlo, eso te pasa cuando algo te gusta.- le dijo.

Jungkook se quedo quieto, no sabiendo que responder, la respuesta era clara para ambos, Jimin era precioso eso no se podía discutir. Solamente atino a asentir.

-Él es algo... Especial, si especial. Estuvo encerrado toda su vida, no conoce el mundo exterior ni mucho menos la maldad que abunda en el. Lo criaron para ser un inocente experimento, solo le enseñaron lo que ellos querían que supiera, él es tan delicado y tierno..

-¿Sabes para qué lo utilizaban?- interrumpió ahora si mucho más interesado que ayer, coincidiendo con lo último dicho por su amigo.

-No, estoy trabajando en eso, mañana me dan la prueba de sangre. Pero siento que no es algo bueno, el lugar daba miedo, parecía como que no quisieran que algo malo le ocurriera y eso me tiene muy confundido.

-Vaya... ¿No hablaron, los que los tenían secuestrados?- preguntó está vez.

Jin negó.

-Ni una sola palabra, solo negaciones y el dichoso "quiero un abogado". Sea lo que sea lo descubriré y ellos estarán preso de igual forma.

-No se nada de eso, pero si supiera te ayudaría- sonrió- ¿No tiene padres, familia..?- divagó.

-No lo sé, en unos cuatro días más podre saberlo, y si no tiene se quedara conmigo, al igual que Taehyung. Les he agarrado mucho cariño y Namjoon los acepto.

-Me alegro, se que lo lograrás, eres el mejor doctor que conozco- alago, Jin rió y palmeo su espalda alentándolo - bien, iré a hablarle.

-Suerte- canturreo yendo a la cocina- ¡Me van a quemar la cocina, no!- grito desde allá a Namjoon y a Taehyung, quienes habían tenido la grandiosa idea de hacer un pastel. Jungkook rió negando.

Abrió la puerta y salio viendo la espalda de Jimin, sus ojos no pudieron evitar pasearse por todo el cuerpo contrario, para estar encerrado tenía una buena alimentación, sus piernas eran fuertes y formadas, tenía un trasero rendondo y apetecible, su piel cremosa estaba perfectamente cuidada, lo impresionaba.

-Hey- lo saludo llegando a su lado.

Jimin lo miro con mejillas rojas por el sol, tenía un poco de calor y sudaba también, jamás había sentido algo así era tan refresca vivir, le sonrió tímidamente.

-H-hola..- respondió con voz aguda, no sabía porque pero su voz salía menos ronca que antes, le asustaba pero no le tomaba mucha importancia. Jungkook le mostró una pequeña sonrisita.

Fenómeno➸Kookmin©Where stories live. Discover now