||Twenty||

9.4K 1.3K 719
                                    






No bebas las latas que estén cerca a ti cuando comes por accidente algo picante


Es un poco peligroso cuando vienes caminando a mi lado...
Delirio a escondidillas
¿Dónde crees que me encontrarás?
Chico, sostente con un poco más de fuerza porque estoy.. cayendo desde atrás.

«Alexandra Savior - Howl»


***

Mientras Yuuji intentaba contactar a Ijichi, me mantuve parada a su lado, dando cortos vistazos a Junpei. Estaba detrás de nosotros, a tres metros de distancia para que no nos oiga. La cálida luz del atardecer otra vez le daba, pero ahora era diferente. Admito que siento algo diferente en él. Aunque esté sentado, manteniendo la mirada en el suelo, he notado que cuando yo aparto la mirada, él la levanta lentamente y siento una curiosidad activa además de la mía. No parece tímido como lo conocí. ¿Hmm? Giré más mi rostro.

Pero me entretuvo ver a la pequeña maldición que aún yo tenía sobre mi mano, ésta estaba inclinada completamente hacia el frente con los brazos extendidos en la palma de mi mano, me pareció gracioso verlo de esa forma como lo hacen los esclavos ante un rey. Pero sabía que lo hacía por las amenazas que le di por si escapaba. Puede que odie a las maldiciones, pero ésta tiene el parecido a un extraterrestre de una de mis películas favoritas. Así que es pasable.

—Ijichi no contesta. —suspiró Yuuji, y volví a verle mientras él guardaba su móvil. Ya era la quinta vez que marcaba a Ijichi y no contestaba. No puede ser que aún no atrape a la maldición. Negué mentalmente. Aun así, siento un poco de respeto a él por soportarnos. Sonreí suave.

—¿Deberíamos preguntarle nosotros mismos? —propuse, señalando con los ojos a Junpei. Nanami me dijo que no baje la guardia a pesar de que Junpei tenga un aura de ser alguien tranquilo, no dejarme llevar y no tener una confianza absoluta cuando apenas le conozco, o podría ser la única misión que obtenga de él—. ¿Algo tipo como Bob Esponja preguntándole a Don Cangrejo?

—Eso es muy rudo, Alice. —negó Yuuji, sosteniéndose el mentón.

Ambos vimos a Junpei, que había levantando la mirada hacia nosotros. Se veía demasiado indefenso para tener algo que ver en esto. Aún así, seguí:

—¿Qué tal como los hombres de negro sacándole información al perro Frank?

—Sigue siendo rudo. —Yuuji me miró, soltando una suave risa—. Mejor hay que soltar las preguntas directamente.

—¿Y si no responde?

—Le hacemos cosquillas.

—Buena idea, Yuuji. —palmeé su hombro.

Nos pusimos frente a él, más cerca. Su mirada se alzó hacia nosotros, curioso pero algo pensativo y dudoso.

—El otro día murió gente en el cine que visitaste —empezó Yuuji con las preguntas, extendiendo su mano para que le diera la maldición, entonces lo sostuve de sus alas y se lo di—. ¿No viste nada raro? ¿Algún bicho feo como este?

Junpei me miró.

—¿No era un muñeco de E. T.? —recordó, aunque percibí que desde el principio no se lo creyó. Sentí la mirada de Yuuji.

—¿Le dijiste que era un muñeco? —me susurró.

—Odio dar explicaciones, y más si se trata de maldiciones. —le susurré de vuelta.

—Bueno, ahora te explico que no es un muñeco. —aclaró Yuuji, viendo a Junpei de nuevo—. Son.. —se detuvo un momento para ver a la maldición, que también hizo lo mismo con sus enormes ojos. Yuuji arrugó un poco su frente—. Solo bichos raros. —terminó diciendo. Al menos no era la única en no saber explicar las cosas—. ¿Entonces los viste? —continuó.

𝗝𝘂𝘀𝘁 Me • Jujutsu kaisenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora