17.

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Segundo impacto.






Hoy es el día, sin duda alguna hoy es el día en el que algo grande se presentaba. No era un evento, no era un concierto internacional, no iba a hablar el presidente, era una pelea. Una pelea en el cuadrilátero clandestino más famoso, se dice que esta debajo de el gran Korakuen hall, un sitio donde solo los que están dispuestos a poner su vida en la línea pueden ir.

La gente ha visto un centenar de peleas, boxeo, muay thai, taekwondo, karate, kick boxing; de todo. Pero siempre ha habido esta incógnita: ¿y si pelearán sin reglas?, todos esos tipos “fuertes”, adiestrados en algún arte marcial, ¿y si se enfrentarán sin alguna restricción?. Las artes marciales se hicieron en un principio para defenderse, en un ambiente hostil y brutal, y creo que no soy el único cuando digo que me gustaría ver tal cosa en acción. No escucharlo de que tuvieron una pelea callejera, no, sino verlo con mis propios ojos, algo que se podría considerar un combate real.

Para eso existe ese lugar, creado por el capricho de un hombre rico, que tenía el mismo deseo que muchos, la arena clandestina iba a abrir sus puertas una vez más para mostrarle al mundo la esencia de una pelea brutal. Hoy era ese día, y todos lo presentan, principalmente ellos.

Si, ellos.


Baki, el campeón indiscutible de la arena clandestina, caminaba por los pasillos del Korakuen hall, se veía calmado, pequeño, sereno, pero en el fondo estaba desesperado y curioso, sentía mucha emoción, quería ocultarlo, no quería mostrarse así ya que también tenía una expectativa pesimista sobre este tal “Ohma”. Reconoce que debe ser fuerte al derrotar a Hanayama, pero...

¿No creé que está llegando muy lejos?

La pregunta apareció en su mente unos días atrás al saber del conflicto que se iba a generar ahí. Ohma Tokita era un tipo lleno de misterios, los yakuzas lo respetan y odian, se dice que luego de su pelea con Hanayama se metió en varios problemas en otros distritos, existen muchos rumores sobre él, pero hay uno entre todos ellos que inquieta un poco al joven Hanma, y es ese sobre la “transformación”.

Cada vez que preguntaba le decían casi lo mismo, que su piel se volvía roja, que votaba humo de su cuerpo, que hubo una explosión. No sabe que tipo de técnica es esa, no sabe que esa “transformación” y tampoco tiene alguna idea de ello. Pero, por lo visto, ese rumor debe ser cierto, lo deducia por las personas que le habían contado sobre ello y a quienes le contaron sobre eso.

Espero al ascensor, mientras lo hacía trataba de no confundirse con preguntas sin respuesta, todavía creía que era una locura el que pelearán con su hermano, pero no iba a juzgar a nadie, todavía no ha visto de lo que es capaz de famoso busca pleitos. El ascensor llegó, se abrió y se llevó una grata sorpresa al ver a Retsu ahí, ambos se sonrieron desde que se vieron.

—Supongo que no soy el único curioso.—entró.

—Yo pensaba lo mismo, hasta que te veo.—dijo.

—Tengo el presentimiento de que nos encontraremos a muchos amigos nuestros haya abajo.

—Tienes razón.—dijo.—Bueno, tampoco es que haya muchos capaces de retar a Jack.

—Ajá.—suspiro.—... Me pregunto...—Retsu lo miro, Baki sonrió de lado.—... Solo quiero saber que tan fuerte es como para hacer eso.

Ashura. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora