Capítulo 58

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Noan.

Llegamos a Francia, ayudo a que Aline suba al auto y después subo también, mierda, las llamadas no dejaban de invadir mi teléfono, estaba siendo una mierda todo esto.

Miro a la pelirroja a mi lado, está nerviosa, justo estoy terminando la llamada cuando hablo hacia ella.

-¿pasa algo?- pregunto mirándola rápidamente para después atender otros mensajes.

Ella voltea hacia mí, veo como traga saliva.

-sé que ya tienes muchos problemas en este momento- comienza- pero no puedo quedarme tranquila después de esto- me pasa su teléfono mostrándome algo, lo acepto y miro la fotografía que hay aquí, estamos ella y yo en la cama, fue el día que regrese de Italia y ella había dejado la casa de sus padres.

-¿quién te la ha enviado?- pregunto con molestia, ¿por qué toda esta mierda debía de juntarse hoy?

-no lo sé, Noan- responde- es un número privado.

Entonces, recuerdo la fotografía que había recibido en donde Aline estaba junto a otro hombre, el día que salió con quienes eran sus amigas.

Estoy a punto de hablar pero me callo y solo miro mi celular para atender otra llamada dejando así el tema a un lado.

-llevanos al club central, Charles- ordeno y asiente mientras continúa conduciendo.

-¿iré contigo?- pregunta Aline.

-no dejaré que andes sola por ahí después de que hay alguien que está acechandote- respondo mientras saco un arma y la guardo en la pretina de mi pantalón, ella sólo ve mis movimientos- sea quien sea se va arrepentir de meterse en donde no le importa.

-Noan...

-no me pidas que me calme, porque no lo haré- comienzo, mi voz ha sido dura aún cuando no pretendía eso- no me pidas que me relaje o que lo deje pasar- continúo- porque no haré esa mierda- ella sólo me mira al decir cada palabra- estoy harto de que se metan conmigo, de que se metan contigo, de que intenten sabotear todo lo que hago, sea quien sea se está buscando una cita con la muerte y lo voy a complacer- intenta decir algo pero vuelvo a interrumpirla- así que no intentes persuadirme que no voy a ceder, no esta vez.

Traga saliva lentamente y solo asiente.

-llegamos, señor- anuncia Charles, bajo del auto, antes de cerrar la puerta me dirijo a la pelirroja.

-quiero que te quedes aquí- comienzo mirándola- no quiero que te pongas en peligro, ¿puedo contar con eso?

-por supuesto- es todo lo que responde.

Cierro la puerta y ordeno a Charles que la vigile, en camino a este saco mi celular y hago una llamada.

-Jacob Coupe- escucho del otro lado después de unos tonos.

-soy Noan- comienzo- me avisaron que intentaste contactarme pero no estaba en Francia- explico.

-claro- comienza aquel hombre- sólo era para avisarte que comenzarán los juicios- escucho con atención- Max y Danielle serán los últimos en recibir condena, era para informarte eso, si quieres estar presente puedo darte el día y la hora después de que lo confirmen.

Me mantengo en silencio unos segundos, quería estar ahí pero al mismo tiempo no podía hacerlo, no podía tomar el coraje necesario para ver a Max después de todo.

-¿Noan?- la voz de Jacob me trae a la realidad de nuevo- ¿estás ahí?- pregunta, llegó a la entrada del club y me detengo antes de entrar, había algunas personas que aún seguían haciéndose cargo.

Tu nombre en mi pielWhere stories live. Discover now