Capítulo 71

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Aline.

Abro mis ojos lentamente mientras parpadeo por la luz que hay en la habitación, veo a mi alrededor hasta que finalmente me veo a mi misma tenía una bata de hospital y estaba sobre una camilla, mis ojos van hasta el hombre rubio dormido en el sofá a mi lado.

-Noan- mi voz sale nerviosa y temblorosa- Noan.

De inmediato se despierta mientras se acerca.

-¿pasa algo, bella?- sus ojos están alertas a todo lo que hago o digo- ¿te sientes mal?

-mi bebé- hablo mientras llevo una de mis manos hasta mi vientre.

-está bien- responde mientras toma asiento a mi lado- ambos están bien, tú y él lo están.

Suelto todo el aire que retenía.

-llamaré al doctor, ¿está bien?- pregunta y asiento mientras suelta mis manos lentamente y se pone de pie. Sale un poco de la habitación y después de unos segundos regresa mientras un hombre con bata blanca entra a la habitación.

-buenas noches, señora Salvatore- habla aquel hombre y respondo a su saludo- he hablado ya con su doctora, ella está de viaje en estos momentos por lo cual no pudo presentarse- asiento- usted tuvo una amenaza de aborto- comienzo y mis ojos se cristalizan- afortunadamente llegaron a tiempo y se evitó que esto se convirtiera en una tragedia- trago saliva mientras Noan toma mi mano- le he dado ya un par de instrucciones a su esposo pero es mi deber hacerlo también con usted- asiento- necesita estar en reposo, no estrés, no preocupaciones, no nervios- asiento- le comentaba a su esposo que debe de evitar el subir y bajar escaleras así como también evitar hacer actividades que requieran mucho esfuerzo, entre ellos el sexo.

-mi bebé está bien, ¿verdad?- pregunto y asiente.

-lo está- responde- pero no debemos de confiarnos, es por eso que le pido que siga al pie de la letra todas las instrucciones- asiento de nuevo- su doctora me comentó también que suelen viajar mucho, ambos coincidimos de que lo mejor es dejar los viajes en estos momentos, hasta que todo vuelva a estar bien- Noan asiente- le recetaré algunos suplementos más y podrá irse a casa.

-¿pude perder a mi bebé?- pregunto con aquel nudo en mi garganta de nuevo.

-no hubo sangrado- comienza aquel hombre mientras escribe- lo cual fue en verdad un alivio, no debe de preocuparse más en eso o pensar en eso- continúa- ahora sólo piense en que todo estará bien, su bebé está bien y necesita que su mamá también lo esté, usted es su soporte, usted es su hogar en estos momentos, y necesitamos que ese hogar sea resistente.

Asiento de inmediato.

-así será- respondo, una vez que termina la receta se la da a Noan quien agradece y finalmente ese hombre sale de aquí.

-es hora de ir a casa- Noan habla mientras lo veo acercarme una maleta- mande a traer algo de ropa para que puedas estar cómoda- asiento mientras él me ayuda a recomponerme lentamente- te ayudaré.

Sólo asiento mientras comienza a desvestirme para después comenzar a colocarme un pans y una playera junto a una sudadera.

-lo siento- hablo yo mientras él comienza a abrochar mis tenis, me mira rápidamente- perdón por haber puesto en riesgo a nuestro bebé.

Niega de inmediato.

-no es tu culpa, bella- habla- no digas eso, por favor- continúa- eres la mejor madre que nuestro bebé podría tener así que por favor no vuelvas a decir eso, ambos están bien y eso es lo único que me importa ahora, ángel- sus ojos se cristalizan, sabía que seguramente había pasado un infierno, lo jalo hacia mí y solo comienza a llorar mientras esconde su rostro en mi cuello- pensé que los perdería- mis ojos se cristalizan- fue un maldito infierno no saber lo que pasaba, te desmayaste en mis brazos, yo no sabía que hacer, solo quería que ambos estuvieran bien, pensé que pasaría lo peor.

Tomo sus mejillas con mis manos mientras hago que me mire, limpio sus lágrimas con mis pulgares mientras peino su cabello.

-estamos bien- comienzo mientras sus ojos azules me miran- afortunadamente papá estaba ahí para salvarnos- hablo sin dejar de mirarlo- lo malo ya pasó, amour, ahora sólo debemos de concentrarnos en lo que viene- asiente lentamente- tú, yo y nuestro bebé estaremos bien- asiente- y es momento de ir a casa a descansar de este día de mierda.

Asiente de nuevo, beso su labios y después de algunos minutos termina de ayudarme mientras me pongo de pie lentamente, abre la puerta y Charles entra con una silla de ruedas.

-me alegro mucho de que estén bien, señorita Aline- habla aquel hombre, sonrío.

-muchas gracias, Charles- respondo y solo asiente tomando mis cosas y sale de aquí.

Noan me ayuda a tomar asiento y una vez que lo hago solo comienza a empujar la silla para llevarnos afuera de este lugar, es así hasta que llegamos a la camioneta que espera por nosotros, me sube a esta en sus brazos y después ordena que suban la silla de ruedas, una vez que todo está listo solo Charles arranca con dirección a la mansión.

Desde el momento que llegamos puedo ser consciente de que Noan ha implementado algunos cambios, soy consciente de eso desde el momento que veo que hay seguridad en el portón principal al igual que algunos hombres resguardando a lo largo del jardín principal y en los muros de la mansión.

-¿ahora vivimos en una guarida?- pregunto al rubio a mi lado quien acaricia suavemente nuestras manos entrelazadas.

-es seguridad- responde- no dejaré que les pase nada- continúa- viviremos de esta manera hasta que todos los que nos quieren hacer daño dejen de existir.

Su voz es dura, sin duda alguna ha sufrido mucho mi guapo.

No quería hablar sobre esto, no quería saber más sobre esto, si esta era la única manera de evitar que los nervios y el estrés se apoderaran de mi estaba dispuesta a hacerlo, no pondría en riesgo de nuevo a mi bebé.

Sólo vuelvo a recargarme en su hombro hasta que llegamos a la entrada de la mansión y la camioneta se detiene, Noan vuelve a bajarme en sus brazos y una vez que dejan la silla de ruedas en su lugar me ayuda a sentar en esta y solo comienza a empujar para adentrarnos a casa.

-ordené que prepararán una habitación abajo- comienza él y solo lo escucho mientras veo que nos conduce al pasillo donde están las habitaciones en el primer piso- para que puedas estar cómoda y no debas de subir y bajar escaleras- entramos a una de las habitaciones y esta ya está perfectamente arreglada- ordenaré que traigan algo de cenar- asiento después de que me ayuda a meterme en la cama- ¿algo en especial, mi bella?- pregunta y sonrío.

-solo quiero que me abraces- hablo y sonríe lentamente mientras se acerca a mis brazos, me aferro a él y solo siento como él se aferra a mi también mientras su rostro se pierde en mi cuello.

-no puedo vivir sin ti- habla en un susurro.

-que bueno- respondo de la misma manera- porque deberás de aguantarme toda una vida.

Sólo ríe un poco mientras se aferra más a mi.

Capítulo nuevo.

Espero que les guste.

Nos leemos pronto.

-Neftali.

Tu nombre en mi pielWhere stories live. Discover now