Trabajo de Beta ~ VKookMin ~ TaeHyung, JungKook y Jimin

Capítulo 14~Vuestro Omega

-Te traeré una sudadera. -Susurró TaeHyung, apartando la mirada del rubio y alejándose de su tacto para ir hacia el cuarto del menor a por lo nombrado.

-Y yo unos calcetines. -Añadió Jeon siguiendo al más alto. Jimin se quedó en silencio viendo el salón del Beta, era cálido y hogareño; trasmitía ese sentimiento de ser bienvenido. No como su casa fría y de muebles blancos.

La pareja de Alfa y Beta entraron al cuarto donde dormían hace poco en silencio; JungKook soltó un fuerte suspiro.

-Tae. -Le llamó abriendo el cajón de su mesita para buscar un par de calcetines calientes. -En serio, démosle una oportunidad. -Cerró de vuelta el cajón y se acercó al Alfa que portaba un jersey entre sus manos. -Por mí, ¿sí? -Pidió haciendo un tierno puchero antes de ponerse de puntillas y darle un ligero beso en los labios. -Hazlo por mí.

-Está bien. -Concedió volviendo a besarlo, esta vez algo más de tiempo tratando así de controlar su acelerado corazón y la ansiedad en su lobo. Ambos salieron de nuevo al salón, encontrando al rubio donde lo habían dejado mientras jugaba ansioso con los anillos en sus dedos. -Ten. -Le ofreció el jersey caliente de color negro; Jimin sonrió de lado agradecido y se lo colocó mientas JungKook se ponía de cuclillas para ayudarle a colocarse los calcetines.

-Huele a ti. -Murmuró Jimin una vez el jersey pasó por su rostro, por instinto levantando de nuevo el cuello para llevarlo a su nariz. JungKook sonrió y besó su mejilla mullida cuando se puso en pie, TaeHyung arrugó su nariz sin saber bien que hacer o decir.

-Sentémonos a hablar. -Pidió al fin Kim, tomando asiento en el pequeño sofá de JungKook y siendo seguido por el mismo al instante.

Jimin se sentía como pez fuera del agua, en un espacio desconocido y con personas que, a pesar de no estar agresivas o acusándolo como deberían estar haciendo, lucían calmadas y lo miraban con esperanza en el brillo de sus ojos. Park supo, gracias a su lobo, que si quería ser sincero realmente con ellos debía estar cerca y relajado al sentir sus aromas.

Cansado de ser lo esperado y deseado por todos; se dejó guiar por su instinto Omega y se sintió demasiado correcto. Jimin corrió, dando cortos pasos, hacia ellos para sentarse sin pedir permiso sobre el regazo de JungKook. De lado, dando la espalda al vacío, apoyó su costado izquierdo en el pecho del pelinegro y miraba de frente a TaeHyung sentado al lado izquierdo de JungKook en el sofá.

-Necesito fuerza. -Murmura mientras sus mejillas se teñían de un leve rosa; JungKook sonrió enternecido y besó su frente apartando su cabello rubio mientras lo abrazaba por la cintura más a él. Tae lo vio todo con la mirada sería y rostro impasible; Jimin se sintió intimidado.

-No le mires así, lo asustas. -Murmuró Jeon regalando al castaño, Tae abrió sus ojos con indignación.

-¿Cómo quieres que lo mire? -Inquirió sin esperar respuesta. -Estoy muy confuso ahora mismo. -Ahora sus orbes oscuras cayeron en el Omega. -Quiero una explicación, una válida. -Ordenó porque se sentía ridículo en aquella situación.

Jimin bajó su vista a sus manos y volvió a jugar con los anillos en sus dedos, dando giros una y otra vez al de su dedo índice derecho terminó por sacarlo de él para mostrarlo a sus ambos destinados.

-¿Sabéis qué es esto? -Cuestionó levantando el anillo. -Este símbolo. -Explicó, ambos contrarios fijándose en el sello particular en el anillo.

-Un Omega puro. -Murmuró TaeHyung reconociendo el símbolo único del Omega.

-¿Qué significa eso? -Preguntó Jeon arrugando sus cejas. Jimin se incorporó un poco en el sofá, aún sobre el regazo de Jeon, y subió sus pies al pequeño espacio entre el Beta y el Alfa.