Jeon JungKook es uno de los pocos de su casta, sí, Jeon JungKook es un beta. Uno de los maravillosos y preferidos hijos de la madre Luna.
Para Jeon siempre fue complicado adoptarse a su vida. De pequeño fue el niño del que nadie quería ser amigo, d...
El siguiente capítulo contiene escenas para mayores de 18; leer bajo vuestra responsabilidad. Dichas escenas estarán desarrolladas entre los emojis 🍋🍋🍋 y 🐙🐙🐙. Sin nada más que añadir, después de tres días aquí la actualización ❤️ gracias siempre por el apoyo 😘
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Era la última noche en la casa de los Kim para el trío destinado. Los días habían pasado de forma lenta y rápida a la vez; lenta cuando las hora de calor azotaban con fuerza y rápidas al compartir momentos como la familia unida que eran.
La ida a la ciudad para vender la fruta recolectada por JungKook, Woozi y los trabajadores fue bonito y muy entretenido. Jimin pudo pasar más rato con Felix en el interior de una cafetería con aire acondicionado, hablando de baile, música y sus futuros bebés. JungKook pudo interactuar más con sus suegros y cuñados los cuales fueron a por fruta para sus hogares. TaeHyung recogió a sus hermanos menores de la universidad e instituto para llevarlos a comer junto a sus novios.
Fue un día expléndido que terminó con una brisa fresca entrando por la ventana del cuarto que compartían. Una brisa fresca idéntica a la de esa última noche tras días felices en un lugar que los tres denominaban hogar.
Jimin entró al cuarto envuelto en un batín hasta sus rodillas; acaba de darse un baño de agua refrescante tras el calor pasado. TaeHyung, que estaba tumbado boca arriba en el colchón tan solo portando unos bóxer, dejó de lado su móvil al el Omega entrar. JungKook, que estaba sentado a horcajadas sobre TaeHyung y también en ropa interior, dejó de hacer caricias de cosquillas al pecho y abdomen del Alfa.
-¿Qué hacéis? -Preguntó Jimin yendo hasta su cajón en la mesita para buscar unos calzoncillos.
-Nada. -Respondió JungKook, sus ojos quietos en el cuerpo de Jimin cuando este se deshizo del albornoz. -Minnie, ven. -Pidió extendiendo su mano izquierda, saliendo del regazo de TaeHyung y tirando del Omega hasta el colchón.
-¡Kookie! -Se quejó cuando fue tumbado al lado de Tae y en la misma posición.
-Solo quiero besarte la barriguita con nuestros cachorros. -Murmuró con una sonrisa tierna, bajando a hacer lo dicho. Jimin se dejó hacer viendo solo el cabello azabache húmedo por la ducha anterior a la suya rozar su estómago.
-Pero es raro. -Murmuró avergonzado al procesar que esa perspectiva de JungKook ya la había vivido pero con otras connotaciones más sexuales. -Déjame que al menos me pongo ropa interior. -Pidió haciendo puchero, TaeHyung sonrió disfrutando la situación.
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-¿Por qué? -Preguntó, hablando seguido sin dar tiempo a responder. -¿Y si te quiero besar entero? -Cuestionó con sorna, bajando sus besos hasta la pelvis del Omega, bordeando su miembro para besar con chupones y lamidas los muslos blancos y musculosos de Jimin.
El Beta dio un ligero mordisco al músculo interno, casi a la altura de la ingle del mayor y sacándole un jadeo sonoro a este que le hizo reír suspirado. Su aliento chocó contra la intimidad de Jimin, esa rosada entrada me llamaba a ser profanada de nuevo. Así que no lo dudó y besó, con saliva, lengua y un profundo chupón al separarse de la piel arrugada, la entrada del Omega.
