Trabajo de Beta ~ VKookMin ~ TaeHyung, JungKook y Jimin

Capítulo 46~Deseaba

Jimin estaba encantado, las paredes de colores pasteles le relajaban y su matrona había resultado ser un encanto. Sentado en la camilla, tras tener una revisión exhaustiva en su parte íntima, sus novios volvieron a entrar a la sala donde la doctora les sonrió a los tres.

JungKook fue el primero en llegar junto a su Omega, besando su frente y sosteniendo una de sus pequeñas manos junto a la suya izquierda. TaeHyung se colocó tras el respaldo de la camilla de Jimin, dejando que la huella caliente de su mano derecha estuviera reposando en el pecho del Omega y que su mano izquierda entrelazara sus dedos con la derecha de Jeon.

La barriga de Jimin fue descubierta e impregnada en ese gel transparente que realmente no estaba tan frío como siempre lo pintaban. La matrona observaba atenta lo que veía en la pantalla y ejercía presión en ciertas partes del vientre hinchado del Omega causándole a este malestar e incomodidad.

-Son dormilones. -Bromeó la mujer. -Pero aquí están. -Jimin parpadeó varias veces con su vista fija en la pantalla, dos cachorritos bebés, de lado y encogidos como si quisiera abrazarse a sus piernas, estaban dibujados en ondas negras, grises y blancas. -¿Queréis escuchar sus latidos?

-Sí. -TaeHyung fue el único que pudo hablar mientras sus novios estaban perplejos viendo aún la pantalla. Tras la doctora pulsar un par de botones, ese sonido característico de estar bajo agua, agua chapotear y golpeteos frenéticos descompensados por ambos cachorros los inundó.

-Los quiero, los amo mucho. -Habló bajo Jimin, rompiendo el silencio y refiriéndose a sus bebés. JungKook asintió de nuevo, inclinándose para besar las mejillas húmedas por las lágrimas de su Omega.

-No llores amor. -Pidió TaeHyung llegando también para besarlo.

-Son de alegría, no lo puedo evitar. -Susurró con hipidos el rubio. JungKook apretó sus finos labios y retuvo sus lágrimas no queriendo alterar más al Omega, TaeHyung por su lado rio enternecido y sobrecogido por los sentimientos.

-¿Quieren saber el sexo o quieren sea sorpresa? -Preguntó la matrona apreciando tener el ángulo perfecto.

-Sorpresa. -Dijo TaeHyung.

-Dígalo. -Dijo al mismo tiempo JungKook. Ambos destinados vieron a su novio Omega ver a sus cachorros aún embobado. -Mejor sorpresa, tan solo que estén sanos. -Murmuró finalmente, no había nada más importante que eso.

-Están bien, corresponden al tiempo estipulado del embarazo y no hay ningún problema en las pruebas realizadas. -Alegó la mujer. -Tienen a unos mellizos muy sanos ahí dentro. -Sonrió, Alfa y Beta le devolvieron el gesto, pero Jimin seguía viendo la pantalla.

Mientras que TaeHyung trataba de contener a su lobo eufórico que ansiaba aullar alegre y hacerle gritar lo feliz que era, JungKook aguantaba las lágrimas y las inmensas ganas de su lobo por buscar mimos en su Alfa u Omega. Sin embargo Jimin estaba en el limbo.

El limbo de finalmente ser consciente del todo de que al haber tenido esas deliciosas experiencias cargadas de deseo, lujuria, fetiches, amor, cariño y dulzura... A raíz de eso tenía dos cachorritos creciendo dentro de él.

Y aunque llevaba tiempo emocionado con la idea, aunque nunca quiso ni se planteó renunciar a ellos por sí mismo ni por el amor que tenía a sus novios; ahora de veía más real y cierto que iba a ser papá. Y en vez de asustarse o ponerse nervioso, estaba calmado y en paz; como si todo ese amor que siempre se guardo, ya que sus padres nunca lo quisieron recibir ni dar, ahora estuviera resurgiendo de sus cenizas con el mayor ímpetu y certeza.

-Sacaré un par de copias de la ecografía por si quieren guardarla o mostrarla a alguien. -Habló de nuevo la mujer. -Sí tienen alguna duda o pregunta que hacerme yo...