Capítulo final.

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Y en otra vida...

8 meses después.

~Flashback~

—Me siento cansada.— Murmuró cabizbaja tomando la pelota negra y lanzándola al techo con suavidad.

—¿Te duele la cabeza?— Preguntó Angélica.

Grace asintió y detuvo la pelota, se sentó en el mueble y miró sus zapatillas negras con atención.

—¿Crees qué algún día pueda salir de aquí?— Preguntó Grace aún con su vista fija en sus zapatillas.

—Has mejorado, y sé que pronto saldrás de aquí.— Dijo Angélica quitándose sus lentes de leer.

—Abuela, dime la verdad.— Dijo Grace viéndola fijamente.— Mi madre Cassandra se ha recuperado totalmente ¿No?

—Sí, Grace.— Sonrió orgullosa.

—¿Y entonces por qué sigue aquí?— Preguntó confusa.

Angélica se levantó de su asiento y caminó hasta la ventana de su oficina admirando el atardecer caer en Londres.

—Porque te ama.— Murmuró bajando la cabeza.— Cassandra no saldrá de aquí sin que tú lo hagas.

Grace sintió culpa al saberlo y sólo respiró hondo y caminó hasta su abuela, colocándose a su lado admirando el atardecer de Londres.

—Aveces se me hace difícil creer que puedan amarme.— Murmuró Grace colocando su mano en el vidrio.— Lo que fui no me enorgullece, y lo que soy ahora es un túnel oscuro sin final.

Angélica acarició su mejilla con suavidad y le sonrió.

—Pues créelo pequeña Grace.— Dijo su abuela con una sonrisa sincera.— Tú familia te ama, te adora, y sólo quieren verte salir de aquí siendo la mejor versión de ti.—Grace la miró y su abuela tomó su mano.— Te amamos Grace, quién fuiste, quién eres ahora, y quién serás en el futuro, no importa, sólo recuerda que te amamos a pesar de las cosas, a pesar de las circunstancias, siempre te amaremos.

Grace bajó la cabeza y su semblante se relajó, soltó el aire que estaba reteniendo y abrazó a su abuela sabiendo que había necesitado ese abrazo desde hace mucho tiempo, pero su inseguridad por demostrar amor hacia sus familiares le era difícil.

~Fin del flashback~.

Grace caminó junto a una enfermera hacía el jardín de la clínica, cuando llegó al lugar la enfermera se retiró y Grace caminó lentamente observando las flores con atención.

—Otra vez tú.— Dijo una voz detrás de ella y se volteó para ver a un chico dos años mayor que ella, era moreno y un poco más bajo que ella.— ¿Quieres galletas? Acabo de robar unas cuantas en la cafetería.— Dijo mostrando la bolsa transparente con las galletas adentro.

Lucas era un chico de Portugal, pero su familia se mudó a Londres cuando él tenía 5 años de edad, pero a los 19 años perdió a toda su familia en un accidente automovilístico y el único que sobrevivió fue él. Desde entonces Lucas ha sido diagnosticado con trastorno depresivo mayor, los primeros días que ingresó a la clínica buscó suicidarse dos veces, y las dos veces George lo detuvo, aunque lleva más tiempo que Grace internado, se le ha visto mejorando desde hace 2 meses.

—No entiendo tú manía de robar galletas.— Dijo Grace agarrando una galleta.— Puedo decirle a George que nos traiga cuando queramos.

Se sentaron en un banquillo del jardín mirando a las personas que estaban al frente de ellos.

¿Te quiero a ti? ¡No! ¿En tú mirada? ¡Menos! #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora