La joven stripper y la doctora. (2°Historia)

Capítulo 31. El jacuzzi

Al día siguiente Daniela se levantó muy contenta. Ya había acabado los dichosos y tediosos exámenes y sabía perfectamente que le habían ido muy bien, como siempre. Además había ido a ver a Patricia al hospital y lejos de enfadarse con ella o avergonzarse, ésta se había mostrado muy contenta por verla, y hasta se atrevería a decir que la había visto orgullosa de ella. Porque para cogerle de la mano nada más la vio, darle un súper beso e ir hasta la cafetería de la mano con ella, incluso delante de la enfermera de urgencias que se paró a hablar con Patricia sobre un paciente. 

En ese momento pensó que Patricia le soltaría de la mano, pero no lo hizo. Eso llenó de orgullo a Daniela. Eso le demostraba que era importante y especial para la doctora. 

Decidió salir a correr para relajarse ya que no tenía ningún plan ni nada que hacer durante la mañana. Esa mañana en especial hacía algo de calor. Ya estaba pensando que por la noche no tendría mejor plan que bañarse a la luz de la luna en su jacuzzi. Pero de repente pensó en Patricia, y ese momento le encantaría compartirlo con ella. Por lo que estuvo pensando durante el rato que estuvo corriendo, si escribirle a la doctora invitándola a bañarse con ella. Igual era muy precipitado y Patricia le diría que no, o tal vez no querría verla todos los días. Pero a ella le apetecía muchísimo verla y bañarse con ella. De sólo pensar en tenerla encima de ella en bikini, con sus pechos pegados a los suyos, sus labios rozando los suyos, sus ojos azules buscando a los suyos...El corazón le empezó a ir mucho más deprisa y su entrepierna, mientras seguía corriendo, comenzó a humedecerse. Menos mal que esa humedad se mezclaba con el sudor y nadie podría notar tal humedad. Las mallas que llevaba esta vez eran grises y cualquiera podría ver que estaban mojadas. Sonrió para sus adentros. 

Patricia, mientras tanto, se encontraba trabajando en el turno de mañana. Estaba muy cansada porque el día anterior había estado en el turno de tarde y apenas tuvo tiempo de descansar lo suficiente. Y para colmo no paraba de pensar en la visita que le hizo Daniela al hospital. Le había encantado verla ahí. Le había hecho mucha ilusión. Tanta que cuando le dijeron que una tal Daniela preguntaba por ella y que la estaba esperando en la sala de espera, lo primero que pensó es que le había pasado algo a la joven. Y cuando la vio en perfecto estado esperándola en la sala de espera, casi le da algo de la alegría que tenía encima. Ojalá todos los días Daniela fuera a buscarla al hospital. En toda la mañana no dejó de pensar en la joven. No podía quitársela de la cabeza. Y los pacientes que iba atendiendo la notaban feliz y muy sonriente. Y es que tenía motivos para ello. Estaba perdidamente enamorada de una jovencita que la llevaba loca.

Daniela llegó a su casa exhausta. Lo primero que hizo fue desnudarse, poner música clásica por toda la casa, y después acabó metiéndose directamente en la ducha. 

Cuando acabó de ducharse, por fin se animó a escribir a la doctora. Aunque borró unas veinte veces lo que le iba a escribir, lo cambió otras tantas veces y finalmente dejó lo que pensaba mandarle porque sabía que si seguía dudando en lo que tenía que escribirle, podía pegarse todo el día escribiendo y borrando para luego no mandarle nada.  Y eso acabaría por frustrarla. 

"Hola Patricia, ¿Qué tal tu turno?. Espero que esta noche hayas descansado lo suficiente y ahora estés dando lo mejor de ti. Como siempre haces. Me preguntaba, si esta noche no tenías ningún plan, si te gustaría bañarte conmigo en mi jacuzzi. Prometo que me comportaré"

Patricia estaba en la cafetería con María y Lola cuando notó su móvil vibrar en el bolsillo de su bata.  No sabía si mirar el mensaje de WhatsApp que le había llegado pero de sólo pensar que podía ser Daniela la que le había escrito, lo sacó rápidamente del bolsillo y se dispuso a mirar el mensaje. Conforme lo iba leyendo sus mejillas se tornaron rojas, y sus labios sonrieron inconscientemente, lo que llamó la atención de sus amigas.