Capítulo 9

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(Editado)


Si se pasa por el vasto y exquisito jardín, se puede llegar a la residencia trasera del palacio. Las grandes y singulares casas estaban divididas en patios, donde vivían las concubinas de la familia real.

La mansión del Rey Jing fue originalmente la residencia de la nobleza de Lin'an, un país rico y enemigo. Toda la mansión ocupaba un área muy grande y era extremadamente lujosa y exquisita. El tribunal huyó ahí y los magnates confiscaron muchas propiedades por temor a no poder salvar sus vidas.

Desde entonces, ese lugar se convirtió en la residencia del Rey Jing.

A diferencia de la alta burguesía, que tenía varias generaciones en la misma casa, el Rey Jing no podía permitirse vivir en la gran mansión. Por lo tanto, aunque había muchas casas en la parte de atrás, la mayoría de ellas estaban vacías, por lo que muchas de ellas habían quedado desatendidas.

En un rincón, al caer la noche, algunos restos de lámparas se encendieron en un patio que había estado en mal estado durante mucho tiempo.

Con un chirrido, la puerta de la casa se abrió de golpe.

La criada, cargando una caja de comida, cruzó el umbral y entró a grandes zancadas. La sala principal no era muy grande y no se había limpiado desde hacía tiempo, así que cuando entró, había polvo por todas partes y era un poco asfixiante.

Frunció el ceño con disgusto, aceleró el paso, se acercó a la mesa de la habitación y volvió a poner el recipiente de comida sobre la mesa con un fuerte golpe.

"La comida está aquí, maestro, sírvase usted mismo". Su tono era frío y gélido, y la palabra "maestro" llevaba un matiz que resultaba extremadamente duro en la tranquilidad de la noche.

La persona en silla de ruedas en la habitación no le respondió.

La criada ya había visto que ese hombre no sólo era un lisiado, sino también un mudo. Mientras nadie le tocara, no reaccionaría a ninguna intimidación.

Naturalmente, era el saco de boxeo perfecto.

Esta doncella solo había estado en el Palacio Jing durante unos meses y finalmente tuvo la oportunidad de servir al maestro.

Aunque había varias personas en la casa eran maestros, había grandes diferencias, por ejemplo, la casa de la señora Xu no era un buen lugar para ir.

Durante mucho tiempo había querido encontrar una manera e intentó por todos los medios servir en el patio de la dama Gu, pero no esperaba que le asignaran al discapacitado.

¿Qué bien podría obtener al venir aquí? El propio lisiado vive en una casa destartalada que tiene goteras.

La criada estaba llena de resentimiento y cuando vio la silla de ruedas, se sintió infeliz.

Al ver al hombre lisiado guardar silencio como de costumbre, se burló y dijo: "Me temo que aún no lo sabe. Tan pronto como se mudó al mediodía de hoy la criada de la señora Gu fue al despacho del Rey para presentar una queja". El Rey lo escuchó y dijo de inmediato: "Voy a ir a la habitación de la señora Gu esta noche ".

Huo Wujiao permaneció inmóvil.

La voz de la sirvienta era un poco aguda: "¿Sabes qué clase de persona es Lady Gu? ¿Crees que el Rey te dejará libre si golpeas la punta de su corazón? Cuando el Rey te castigue, nosotros también estaremos implicados. Yo también tengo la mala suerte de que me hayan asignado un patio tan lamentable, y en mi primer día aquí me he encontrado con un incidente así."

Después de hablar, dio un resoplido frío, se dio la vuelta y salió.

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