El Deseo De Amar Para Siempre | Lumity

Capítulo 11

Amity Blight
22:18pm

¿Qué deja como moraleja?
Una abuelita puede parecer tierna y dulce. Pero jamás la hagas enojar porque ten por seguro que va a patearte el trasero, sin importarle si rompe su cadera

—Ten, querida —Mi abuela habló sacandome de mis pensamientos mientras se acercaba dulcemente hacia mi hermana para entregarle una taza que aparentemente tenía té en su interior. Emira solo le dio un asentimiento en manera de agradecimiento, Edric se mantuvo a su lado brindándole un abrazo mientras sollozaba con su cabeza en el hombro de Emira

¿Y yo? Mantuve mi mirada fija en ella, tratando de saber que es lo que pasa por su mente... desde que la sacamos de allí, Emira no ha dicho más que una palabra.

Momentos atrás...

—¿A donde vas, Abuela? —Grité corriendo por las escaleras para llegar a su lado

—Tu madre esta vez se ha equivocado y de la manera más fea del mundo ¡Esto no voy a permitirlo! —Su tono de voz ya no era uno dulce o tierno, se trataba de uno molesto y lleno de furia —¡Edric! ¡¿Donde está esa habitación?!

—E-En el final del pasillo —Mi abuela asintió y caminó rápidamente hacia el lugar que mi hermano acababa de indicarle

—Emira... Soy yo, tu abuela. No te preocupes cariño, voy a sacarte de ahí —Le habló dulcemente a través de la puerta -Traiganme la llave de esta habitación o los tres la abriremos a patadas

—Creo que la segunda opción suena mejor —Dije un tanto emocionada por saber que al fin mi hermana saldría de ahí —Mamá jamás deja sus cosas si nosotros estamos en la casa

—Bien, entonces... ¿Qué esperan? Ayudenme a abrirla —Dicho eso, se alejó un poco de la puerta para poder golpearla

—Dejamelo a mí, abuela. Podrías lastimarte —Edric intervino antes que mi abuela levante su pierna para patear el objeto de madera. Intercambió de lugar con mi abuela e hizo el intento de abrir la puerta con una patada —¡AUCH! —Se quejó sosteniendo su pie mientras daba pequeños saltitos. Mi abuela rió y le hizo un ademán para que se aleje

—Dejaselo a las damas, querido. Puedo parecer debil, pero en mis años de adolescente era la chica más ruda de las isles —Se sacó sus lentes y se los dio a mi hermano para que los sostenga- Amity, ven cariño —Me acerqué a ella a paso lento y tomó mi mano indicando que me prepare para patear e intentar abrir —1.. —Comenzó una cuenta regresiva —2... —Tragué la saliva que se acumulaba en mi boca preparándome mientras cerraba los ojos —¡3! —Gritó dando la orden para que ambas pateemos la puerta. Esta se abrió dejando a boquiabierto e indignado Edric

—Yo la abrí un poco —Dijo él

Abrí los ojos y miré rápidamente hacia en interior de la habitación
—¡Em! —Entré a la habitación a la velocidad de la luz —¿Emira? —No podía verla a causa de la escasa iluminación.
Cerré los ojos y los abrí tratando que se adapten a la luz —Vinimos a sacarte... —Caminé lentamente tratando de identificar las cosas que había en mi camino; choque con varios objetos que no pude identificar, en un momento sentí chocar mi pie con algo bastante grande —¿Emira...? —Mi mirada caminó por la figura del objeto que acababa de chocar

—¿A...Mity? —La voz temblorosa de mi hermana se hizo presente. Me levanté lo más rápido que pude, haciendo que me de un pequeño mareo a causa de eso.

—¡ABUELA! ¡EDRIC! ¡AQUÍ ESTÁ! —Los llamé pidiendo ayuda —Em.. No te preocupes —Me agaché para abrazarla y demostrarle en ese solo acto que no volvería a dejar que le pase lo mismo