Capítulo 72

406 46 26
                                    

Amity Blight
Mansión Blight.
31 de Diciembre, 1993

Querida Amity,

Espero que te encuentres bien al momento de abrir esta carta. Primero, me gustaría desearte una feliz navidad y un prospero año... me hubiera encantado poder decírtelo a la cara, pero desde que regresaste de tu viaje he sentido que me has estado evitando un poco...
Y si te soy sincera, eso es un poco doloroso para mí, porque aunque no podemos estar juntas en este momento, quiero que sepas que no puedo dejar de pensar y sentir algo por ti.

Cada vez que pienso en tu sonrisa, siento que el mundo se detiene por un momento y todo parece estar en perfecta armonía. Tu presencia siempre ilumina mis días, y aunque no puedo tenerte a mi lado en este preciso instante, el tan solo pensarte es como si realmente lo estuvieras.
No me preguntes la razón de por qué estoy escribiendote una carta casi todos los días en vez de decirte estas cosas a la cara, porque no lo sé... solo sé que es la única manera de decirte lo que siento sin ponerme nerviosa.

Te extraño.

Con amor, Luz.


En esta noche oscura y tranquila, la cual se supone debería ser una alegre y cálida... en medio de la tristeza que me embarga, busco consuelo en mi peluche favorito, el que ella me regaló con cariño en San Valentín...

Un recuerdo que se siente tan ajenos...

Lo abrazo con fuerza, anhelando encontrar alivio en su suavidad y calidez. Sin embargo, a pesar de su ternura, el dolor que siento en mi alma es tan abrumador que ni siquiera el apapacho reconfortante de mi peluche parece ser suficiente para mitigarlo.
Mis lágrimas caen sin freno, mojando suavemente el peluche, como si quisieran compartir mi carga emocional. Miro fijamente sus ojos bordados, buscando un destello de consuelo en ellos, pero en este momento de desolación, su mirada tierna no logra disipar la pesadez que siento en el pecho.

Es como si la soledad se hiciera presente de forma tangible, envolviéndome en un abrazo frío y desolador. El peluche, aunque querido y lleno de significado, no puede llenar el vacío que siento en mi interior. Es testigo silencioso de mi aflicción, pero por más que lo abrace con todas mis fuerzas, el dolor no se va.

Y es que quizás soy un poco masoquista, porque nuevamente vuelvo a leer la carta que he estado leyendo una y otra vez desde que todos fueron a dormirse hace ya varias horas.

«Menuda fiesta eh... » pienso con tristeza.

Mientras más leo las cartas que ella me envía, más culpa siento... de esas culpas que te hacen querer esconderte debajo de un puente. Desde que regresé de mi viaje no ha hecho más nada que preguntarme qe me sucede, no me presiona ni me abruma con preguntas, pero cuando pienso en lo que sucedió en Inglaterra y que probablemente eso será parte de mi futuro, me lastima.
Y es que ella me mira con una ilusión que por más que lo desee, no puedo corresponder libremente.

También se me parte el corazón cuando ella trata de besarme y mi mente se abruma con los recuerdos de lo que pasó en esa noche de Inglaterra. No deseo que eso me suceda, porque alguien tan dulce como lo es Luz no merece que mi mente recuerde cosas tan horribles cuando ella me toca. Pero de verdad no puedo evitarlo por más que quiera, es como si mi cuerpo se petrificara y mi mente se trasladara nuevamente a aquella oscura habitación en un país desconocido.

Lo cierto, es que desde aquel día, mi padre no permite que él esté solo conmigo o por lo menos a menos de cinco metros. Y sorprendentemente, mi madre observa a John con un poco de desprecio, no tanto como mi padre, quien en el momento que lo supo, enloqueció y mamá tuvo que darle un tranquilizante para que no se abalanzara contra el estúpido de mi prometido.

El Deseo De Amar Para Siempre | LumityWhere stories live. Discover now