Capítulo 32

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Narrador omnisciente
19:30pm 1992

“Levantemos nuestras botellas en alto y brindemos porque aún estamos vivas y juntas, nada de lo que suceda en nuestras vidas podrá separarnos”

Este era quizás el comienzo de una maravillosa historia, ¿Qué puede salir mal?














En la casa de la señora Mildbreath. Dos peliverdes enloquecidas buscaban estilos de ropa para que la menor de los Blight pudiera verse "Increíble"
Palabras de su hermana mayor.

—¡Pero abuela esa ropa es horrible! —Se quejó Emira alejando la ropa que su abuela había elegido para su hermanita.
La cual consistía en un tipo de vestido con tela de lino rosa claro.

—¡Pero que dices, Emira! —Exclamó la señora —Esta ropa en mis tiempos era la onda

—¡Abuela! —Volvió a quejarse —Tus tiempos de adolescente fueron como en los años cuarenta y Elvis nisiquiera había cantando por primera vez.

—¡Pero nuestra ropa estaba en la onda!

—¡Pero es una pijamada! ¡No una reunión con una banda de mafiosos! —Y allí comenzó la disputa de familia

—¿Y crees que ese estilo de ropa que le mostraste no la hará parecer una drogadicta o una hippie? —La abuela se miró las uñas al ver como la mayor de sus nietos abría la boca ofendida.

—Al menos no se verá como si estuviera apunto de ir a una fiesta de té con señoras de sesenta años. —La mayor de los hermanos adoptó la misma pose que su abuela materna.

Algo que todos los Blight estaban de acuerdo, incluso Odalia Blight. Era que Emira Blight y Elizabeth Mildbreath eran muy parecidas; mental y fisicamente. Osea, su forma de hablar y de expresarse; aunque no pareciera, la señora Elizabeth era muy sarcástica y usaba mucho la ironía en sus conversaciones aunque fuera muy poco creíble, ella puede ser muy dulce. Uyyy pero si te agarra...

¿En que estaba? ¡Ah sí!
Eran como dos gotas de agua. Solo que una tenía ojos dorados, mientras que la otra los tenía de un color verdoso mezclado con azul.

—¡Pégale abuela! —Animó Edric con el puño en alto. Bueno, él vestía el avejentado estilo de ropa que su abuela decía que era "La onda". Mientras que la menor de los peliverdes, estaba bastante ansiosa por no saber que ponerse y que llevar a la pijamada que estaba invitada, literalmente se iba a quedar sin uñas si seguía de esa manera.

—¡Manoplas dile que esa ropa es muy fea! —La llamó su hermana

—¿Pueden dejar de discutir por tonterías? —Preguntó la menor con pesar —Emira, ese estilo tuyo es de la década pasada.

—¡Já! —Se burló la más anciana de los tres

—¡Oye! —Exclamó Emira un poco ofendida

—¡En tu cara, Em! —Victoreó Edric mientras chocaba sus manos con su abuela

«Son todos un par de niñitos.... » —Pensó la pelimenta menor con ironía

—Y tú, abuela. Tus gustos son de hace cuarenta años... —Se rasquó la nuca bastante nerviosa, esperaba que su abuela no se ofenda y le tire su zapatito de goma por la cabeza

—Pero es hermosa. Como la música de Elvis —La miró haciendo un puchero

«Aveces no puedo creer que mi abuela sea una señora de sesenta y dos años y no una adolescente de dieciséis años con problemas de pubertad » —Volvió a pensar la menor de los Blight

El Deseo De Amar Para Siempre | LumityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora