27. Baile a la media noche (o cuando el título hace sentido)

38 9 11
                                    

Antes de leer: Lean escuchando "A line without a hook" o los demando(?

Paimon estaba sentado sobre la cama y yo sobre el sofá, era extraño que estuviéramos tan lejanos uno del otro en su habitación

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Paimon estaba sentado sobre la cama y yo sobre el sofá, era extraño que estuviéramos tan lejanos uno del otro en su habitación. Sentía mis mejillas arder de vergüenza, solo podía pensar en el otro día y en lo cercanos que habíamos estado. Antes de ese día, podía asegurar que los sentimientos románticos eran unilaterales y que eran solo míos, pero ya no estaba tan seguro. La duda golpeaba mi mente, obligándome a cuestionarme si es que Paimon sentía algo más que amistad ¿Y si fuera así? No sabía si aquello me haría sentir bien o aún peor.

Estábamos callados y no en el silencio cómodo que tantas veces había entre nosotros, este era un silencio desagradable, casi obligado y temeroso.

—Hoy es 12 de diciembre en el calendario humano —me recordó Paimon—. Queda poco para la medianoche y eso significa...

Eso significaba que me debía ir, a las 12 de la noche del día 12 del mes 12 era cuando los seres espirituales nos tomábamos un momento para reflexionar. Como he dicho antes, el tiempo en el mundo espiritual pasa de manera distinta y es muy difícil de calcular, si no revisas constantemente que día no sabrás la fecha y puedes olvidar fechas importantes. Como yo, que estaba tan distraído que había olvidado nuestro día más importante.

—Ya me voy, no te preocupes —lo interrumpí.

Me levanté apresurado y dispuesto a salir de ahí, pero el demonio tomó mi mano, deteniéndome.

—Espera, la verdad es que yo te quería pedir —tartamudeó nervioso—, ya sabes, si es que tu quisieras, que te quedarás a hacer la reflexión conmigo.

La reflexión era algo privado e íntimo, era un momento para pensar acerca nuestra propia existencia e interioridad, algo que al servir a un propósito más grande muchas veces olvidábamos. Normalmente era algo que se hacía a solas, que Paimon me estuviera pidiendo que lo acompañara en esa ceremonia era algo... no lo sé.

—Me encantaría, pero no se si sea la mejor idea que tu pases la ceremonia con alguien con quien estas enojado —respondí.

Paimon bajó la mirada.

—No estoy enojado, solo estoy frustrado. No logro entender que pasa por tu mente o corazón y tu tampoco pareces dispuesto a explicarme.

—Intentaré ser más claro y honesto, no solo diciendo la verdad y ya, si no que siendo realmente honesto —dije realmente convencido.

++++

El Bar Purgatorio estaba absolutamente vacío, sin Purgatos, sin ángeles ni demonios. Todos debían de haber ido a hacer su reflexión en privado, todos menos nosotros.

—¿Estás seguro que no estamos haciendo nada malo? ¿Podemos estar aquí? —pregunté tímidamente.

—No lo sé, supongo —se encogió de hombros despreocupado—. Tal vez nos regañen, pero técnicamente no es nada ilegal.

Ángeles y demonios se besan en el PurgatorioWhere stories live. Discover now