Misión, enamorar a Popee ||Popeextu||

Detalles

Un nuevo día la misma rutina, mirando el horizonte por la ventana del salón perdiéndome en mis propios pensamientos sin prestar atención al ruido que hacían mis compañeros. Solté un bostezó; —“aun tengo sueño”—

Un golpe en mi pupitre me hizo saltar del susto, se trataba de mi mejor amiga que fruncía el ceño y me miraba muy seriamente.

— tenemos que hablar —me dijo

— ¿vas a terminar conmigo? —brome

— ¡no es momento para bromear esto es serio!

Me tomo del brazo para sacarme a rastras del aula y llevarme hasta los baños que para nuestra suerte se encontraban vacíos.

— es sobre lo que te dije por mensaje

— ¿sobre tus experimentos? —cuestione

Asintió, procediendo a retirarse la bufanda que llevaba al rededor del cuello, revelando así una clara marca de línea de un rojo intenso, sinónimo de ahorcamiento.

— ¿qué te pasó? —le pregunté sumamente preocupada

— ¿qué no está claro?, me ahorque —respondió

— ¿y no te dolió?

— ¡claro que si! —exclamo— fue de las experiencias más horribles —se abrazaba a si misma a manera de consuelo, había dolor en su mirada, su voz temblaba, se quebraba— las películas engañan, no es una muerte rápida, es horrible y tarda, ¡no lo vayas a intentar!

— ¡como si quisiera hacerlo! —le respondí

— pero, descubrí 6se viaja en el momento en que quedas inconsciente —hablo más tranquila— deben de ser muertes rápidas y certeras, nada de colgarse o cortarse las venas, morir desangrado igual tarda bastante

— no sé cómo se te ocurrió hacer eso…

Ya no estaba tan segura de lo que estábamos haciendo, era peligroso, aún así no quería dejar esto inconcluso.

— también… —evantó su ropa dejándome ver su abdomen en el cual había un muy grande moretón de una tonalidad tan oscura que casi era negro, se veía muy aparatoso— esto me lo hice accidentalmente en el otro mundo

— ¿accidente?, ¿cómo te haces eso por accidente?

— el como sucedió no importa —volvio a cubrirse— lo que importa es que las heridas que te haces en el otro mundo  regresarán contigo, no sé si seamos “inmortales” pero eso no quita el hecho que podemos sentir dolor de todas formas

— ¿también aplicará con las fracturas? —cuestione

— no estoy muy segura pero definitivamente no quiero ni averiguarlo

La campana sonó, las clases comenzarían.

Los días pasaron, mi mejor amiga descansaba para reponerse de sus heridas, había sido una suerte que ese golpe no le causó ningún daño severo.

Mi vida continúo como de costumbre, hasta que ese fin de semana me pidió que fuese a u casa poniéndole a mis padres como excusa una “pijamada”, sin embargo estaba consiente de lo que haríamos esa noche, morir.

— volví a ir —me dijo

— ¿no habías dicho que no lo intentarías de nuevo hasta reponerte?

— no pude evitarlo —escondió su cara entre sus manos— quería ir de nuevo

Suspire. ¿En serio estaba bien lo que estábamos haciendo?, ¿estaba bien solaparla?, ¿guardar el secreto y no decir nada?.

— llegue a la conclusión que no importa la muerte, cualquiera se logra ir