¿Qué desvela nuestra firma y nuestra caligrafía de nuestra personalidad? Aquí averiguarás lo que supuso la existencia de celebridades, a través de sus autógrafos y escritos.
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Se sabía a sí mismo un excelente comunicador y aprovechó la coyuntura para hacerse notar. Amante de todas las manifestaciones de arte, adoraba lo bello, ya se tratara de coches, casas, cuadros o mujeres.
Con el sexo opuesto estaba bien satisfecho. Públicamente se le adjudican determinadas relaciones pero con el autobombo que poseía y su abultada billetera, haceos a la idea de que hubo más pero que mucho más ("S" con un abultado pie a modo de "G").
Con fino olfato para hacer crecer su economía y astuto cual lince se vendía a sí mismo como un auténtico ganador. A poco que observara la operación en la que estuviese interesado, se lanzaba a la aventura dando a la otra parte la tranquilidad que deseaba escuchar.
Parte de su éxito debió de consistir en mostrarse natural y en compartir con amigos, o tan sólo conocidos, las migajas sobrantes de su imperio personal (ambas mayúsculas con ala de gallina). Pero a la hora de defender sus intereses...¡Cuidado! La lanzadera de la "t" debería ponernos en guardia.
