Su manera de representar esta firma, podría confundirse pero que muy bien con las de los grafiteros, sólo que estos tienen que esconderse de todo el mundo para evitar problemas y en este caso es justo lo contrario. A Tino le encantaba dar la cara y después si acaso, aguantar el chaparrón.
Su trágico final se empañó de frívolos comentarios acerca de una intoxicación etílica terrible, amén de otro tipo de sustancias. Era más que evidente que el artista tenía tendencias autodestructivas (ángulos bien marcados a la derecha de las "A"), además de no hacerle ascos a las situaciones de riesgo ("l" minúscula frente al resto de mayúsculas) parecía ser que precisamente el día de su muerte, lucía como un clavel.
Del 11 de febrero de 1950 al 22 de septiembre de 1991
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Análisis grafológicos de personajes históricos (I)
Non-Fiction¿Qué desvela nuestra firma y nuestra caligrafía de nuestra personalidad? Aquí averiguarás lo que supuso la existencia de celebridades, a través de sus autógrafos y escritos.