El deseo del amo (Completa ✔)

𝙭𝙭𝙫𝙡 𝙄𝙣𝙛𝙞𝙚𝙧𝙣𝙤 𝙥𝙚𝙧𝙨𝙤𝙣𝙖𝙡 ༻🔥

Lo que serían dos días para disfrutar mientras Caleb y Diogo trabajaban, se convirtieron en mi llorando por cólicos, Daffne quejándose de que su hermano sigue siendo el mismo don Juan de siempre y Caleb siendo extrañamente lindo conmigo. La noche anterior a volver de nuevo a California vimos películas y me trajo helado. De vuelta en casa él vuelve a su trabajo y yo una vez más me quedo sola en casa, hablé con Daffne esta mañana, mamá está muy agresiva y descontrolada, encontró una botella de whisky en su habitación y se enojó con Daf por tomarla y esconderla. Quisiera estar en casa ayudándola a controlar a mi madre, siento una profunda decepción porque el hecho de que haya dejado mi orgullo de lado y aceptar el retorcido trato y chantaje de Caleb en su mayoría fue por ella, para no dejar que le arrebataran el lugar donde tiene su historia, aunque fue el mismo donde fue infiel a mi padre muchas veces. No me gusta recordar esos tiempos, me hace volver a odiarla y ya no quiero eso, es mi madre, cometió errores pero ella y Daf son lo único que tengo en la vida y por las cuales mi sacrificio vale totalmente la pena.
Me siento en la sala de estar a ver una serie que me recomendó Diogo en Netflix, hablamos mucho en el jet cuando volvíamos a casa, Daffne veía a su hermano hablar como si de un Dios se tratara, se hicieron fotos, nos hicimos, hasta Caleb salió en una de las fotos, con cara de cordero degollado pero bueno, algo es algo. Mis cólicos ya han disminuido, al cuarto día siempre es así, normalmente mi período dura unos 6 días, así que falta poco para terminar con mi mayor tortura de cada mes. Me hago unas palomitas porque no tengo deseos de comer nada más, Valton si toma su porción de comida para perros que le toca en el almuerzo y está a mi lado en el sofá de tres plazas súper cómodo que amo. Me estaba quedando dormida cuando llaman a la puerta. El perro comienza a ladrar, lo calmo mientras camino a ver quién es. Cuando abro una no muy agradable sorpresa me hace quedar estática y algo nerviosa. Me quedo en silencio por unos segundos mientras miro fijamente a la persona que menos esperaba ver aquí 

— ¿No me vas a invitar a entrar? Que pésima recepción.

— ¿Qué haces aquí? — hablo y mi voz sale asustada.

— Dejame entrar y te diré a qué vine.

— No creo que sea buena idea Noam.

— ¿Tanto le temes a Nolan? — dice con burla.

— No es eso, es que...

Me besa, este chico está loco. No me dio tiempo a reaccionar, alejarme o decidir si quiero ser besada o no, simplemente lo hace. Me sorprendo pero no niego que si le correspondo el beso, pero, me hallo en una encrucijada porque, mi mente solo puede comparar y no se siente igual, y lo más jodido es que abro mis ojos y veo a Noam besandome pero mi mente piensa que es Caleb. Me alejo de golpe.

— ¿Qué haces? — le reclamo. — ¿Estás loco? — paso el dorso de mi mano por mi boca. Él ríe.

— No sé por qué estás aquí. Pude notar el día de la boda que la relación entre tú y Caleb no es la mejor, sé quien eres Peyton, eres la obsesión de Caleb, desde siempre hablaba de ti, pero no te dejes engañar, ese chico te odia, ha planeado con sus amigas vengarse de ti durante muchos años. — me sorprendo de sus palabras.

— ¿Qué sabes tú de eso?

— Eramos amigos Peyton, Caleb y yo éramos muy amigos, yo sé todo, me contaba todo. No te conocía pero sabía todo de ti por él. Cuando los vi juntos por primera vez y caí en cuenta que tú eras la Peyton de la que tanto hablaban, ¿sabes qué sentí? Pena por ti. — sus palabras me dejan desconcertada. — Ese chico te va a destruir, su propósito es verte en el lodo. ¿Quieres que te diga qué hará?

— No quiero saber nada. ¡Lárgate de aquí! — lo empujo pero su fuerza es demasiado en comparación con la mía.

— Es un lobo disfrazado de cordero. Te hará creer que le gustas, que va a cambiar por ti, que olvidará todo el pasado porque tú vales la pena, porque a pesar del paso de los años y el resentimiento que te guardó, tú eres la mujer de su vida ¿pero sabes que más hará? — mis lágrimas quieren salir.